Multipolaridad Sur Global

Los dilemas del Sur Global

Por Yaroslav Lissovolik* –
La creación de una red de asociaciones regionales en todo el Sur Global permite al mundo en desarrollo aspirar por fin a liderar la comunidad global en lugar de seguir los pasos de las economías desarrolladas.

Dado que las nuevas barreras y restricciones comerciales proceden de las economías avanzadas, hay más razones para que las economías emergentes afectadas compensen estos efectos adversos mediante una mayor apertura de los mercados en el Sur Global. De hecho, los países en desarrollo han procedido a liberalizar sus mercados en los últimos años, lo que en gran medida ha sido impulsado por la integración regional. Con el telón de fondo del aumento de las barreras en el mundo avanzado, cualquier medida dirigida a liberalizar los mercados entre las naciones en desarrollo aumenta el margen preferencial del que pueden beneficiarse los productores del mundo en desarrollo. Esto, a su vez, aumenta la conveniencia de construir plataformas de cooperación Sur-Sur, incluso sobre la base de una «integración de integraciones» que reúna a los principales bloques de integración regional del mundo en desarrollo.

En la actualidad, la evolución de las plataformas del Sur Global se encuentra en una coyuntura crucial: a lo largo de los últimos años, las naciones en desarrollo han dado pasos significativos para construir plataformas de integración pancontinentales: en África fue la creación de la Zona de Libre Comercio Continental Africana (AfCFTA), mientras que en Eurasia la expansión de la membresía de la OCS fue acompañada por la creación del RCEP. La siguiente etapa de este proceso sería vincular todas las plataformas pancontinentales de Eurasia, África y América Latina en una plataforma común que abarcaría la mayor parte del mundo en desarrollo, con importantes implicaciones para la futura evolución de la gobernanza mundial. Por otro lado, la cuestión de la expansión de los BRICS que surgió en mayo de 2022 sugiere que, en lugar de la agregación de grupos de integración regional del Sur Global bajo la bandera de BRICS+, China y sus socios del BRICS se plantean una vía diferente que tiene como objetivo aumentar el número de miembros del núcleo del Sur Global.

Por lo tanto, el dilema actual del Sur Global es el siguiente: dar prioridad a la expansión en el núcleo, o poner el énfasis en la creación de una red horizontal de alianzas regionales – mientras que el primer paradigma se centra en la inclusión de más pesos pesados en el núcleo del BRICS, el marco de «integración de las integraciones» para las alianzas regionales permite al Sur Global apartarse del patrón «núcleo-periferia» que ha sido una característica intrínseca de la economía mundial en las últimas décadas. Además, aparte de la posibilidad de crear un marco «sin núcleo – sin periferia» en todo el Sur Global, la creación de una red de alianzas regionales permite a las economías en desarrollo crear una nueva capa de gobernanza global que hasta ahora ha permanecido vacía – actualmente no existe ningún mecanismo en la economía global que permita la coordinación horizontal entre los bloques de integración regional y entre sus instituciones de desarrollo regional.

Tal vez lo más importante sea que la «integración de las integraciones» representa una oportunidad única para innovar y crear un nuevo marco de cooperación que reúna a los bloques regionales en lugar de a los países por separado. Se trata de un tremendo terreno de oportunidades para que el Sur Global avance en nuevas y variadas formas de asociación, hasta ahora muy inexploradas. Aunque pueda parecer una opción más segura seguir siempre los pasos de líderes regionales tan avanzados como la UE en la construcción de proyectos regionales para las naciones en desarrollo, hay que recordar que «la imitación siempre es inferior al original». La creación de una red de asociaciones regionales en todo el Sur Global permite al mundo en desarrollo aspirar por fin a liderar la comunidad global en lugar de seguir los pasos de las economías desarrolladas.

Es importante destacar que las instituciones regionales occidentales están siguiendo activamente el camino de la cooperación entre los bloques de integración regional, siendo la UE una fuerza impulsora clave de esta innovación en la integración económica. En mayo de 2022, la Alta Representante y la Comisión Europea adoptaron una Comunicación conjunta sobre una «Asociación Estratégica con el Golfo» con el objetivo de profundizar en la cooperación de la Unión Europea (UE) con el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) y sus países miembros. En el desarrollo de su cooperación con los países del CCG, la UE pretende emplear su nuevo marco de «Pasarela Global» junto con las instituciones de desarrollo pertinentes, tal y como afirma la Comisión Europea «el Portal Global de la UE proporciona un marco dinámico de cooperación con los socios del CCG para fomentar las inversiones sostenibles en la región más amplia de Oriente Medio, así como en África».

Al final, el camino de la construcción de un marco para la «integración de las integraciones» está plagado de riesgos e incertidumbres. Si existe una norma común o un nivel de derechos de importación que deba aplicarse en toda la plataforma ampliada, puede haber problemas de cumplimiento y observancia. También es necesario que la creación de estas plataformas vaya acompañada de amplias evaluaciones académicas de los efectos de tal empresa para las regiones y las economías individuales del Sur Global. El camino hacia un sistema de Gobernanza Global diferente será traicionero, pero sin innovación y audacia no hay liderazgo ni cambio material en el statu quo. Audentis fortuna iuvat.

*Yaroslav Lissovolik, director de Programa del Club de Discusión de Valdai.

Yaroslav Lissovolik trabajó en el Fondo Monetario Internacional, en Washington, donde fue Asesor del Director Ejecutivo de la Federación Rusa (2001–2004). En 2004 se unió a Deutsche Bank como Economista Jefe y se convirtió en Jefe de Investigación de Empresas en Rusia en 2009, y luego en miembro del Consejo de Administración de Deutsche Bank en Rusia en 2011. En 2015-2018, Yaroslav Lissovolik fue Economista Jefe y posteriormente Director Gerente de Investigador y miembro del Consejo de Administración del Banco Euroasiático de Desarrollo (EDB). Desde 2018 ha sido Director Gerente Sénior – Jefe de Investigación en Sberbank Investment Research (CIB).

Yaroslav Lissovolik también es miembro del Consejo de Política Exterior y de Defensa (CFDP), el Comité de Bretton Woods y el Consejo Ruso de Asuntos Internacionales (RIAC). Miembro del Consejo Asesor Global, Academia Nacional de Desarrollo Verde de la Franja y la Ruta, China. Miembro sénior del Consejo Asesor del Centro para la Cooperación Estratégica Rusia-China de la Fundación CITIC sobre reforma y desarrollo. Miembro del Comité de Estabilidad Financiera del Banco Central de la Federación Rusa. Ha publicado libros sobre la entrada de Rusia en la OMC y la integración de Rusia en la economía mundial, así como numerosos artículos y documentos sobre cuestiones económicas y políticas.

Artículo publicado en Club Valdai.

Foto de portada: Reuters.

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