Tras una jornada electoral con una participación cercana al 52% en todo el territorio, el partido Morena, del presidente Andres Manuel López Obrador, logró 16 gobernaciones en todo el país, lo cual muestra una primacía de la alianza gobernante. Los datos son del Instituto Nacional Electoral (INE) de México.
Sin embargo, el panorama en la Cámara de Diputados es diferente al de los ejecutivos regionales. El frente governista mantiene la mayoría, pero con una reducción de representantes que pasó de 313 a 279, bien lejos de la mayoría calificada necesaria para pasar las reformas que pretende el oficialismo.
Por el lado de la oposición, los partidos PRI, PAN y PRD, que en elecciones anteriores se han mostrado como oposición uno de otro pero que en esta ocasión conformaron un frente con el objetivo de disputarle representatividad al oficialismo, consiguieron 197 escaños y superaron los 137 obtenidos en 2018. Morena y sus aliados del Partido Verde y Partido del Trabajo, necesitarán ahora de otras fuerzas políticas para poder consolidar sus proyectos de reformas. La mayoría calificada que se requiere en el Legislativo es de 334 votos.
Aún con este resultado en las legislativas, el frente encabezado por AMLO aumenta su poder territorial, algo inédito para un partido gobernante, al tiempo que se consolida como la principal fuerza del país. La cuarta transformación se consolidó en 16 gobernaciones, aunque los datos ratifican la derrota en Nuevo León, una de sus principales apuestas, por ser el corazón industrial y económico del país. Sin embargo, quedan frustradas también las esperanzas de la fuerza naranja de ganar peso en el Parlamento. El conteo rápido le atribuye 24 diputados, uno menos que en 2018.
Con una participación récord, más de 93 millones de mexicanos estaban llamados a votar en un contexto de violencia que ha convulsionado la campaña electoral, considerada hasta ahora la más sangrienta de la historia, con alrededor de 800 casos de tiroteos, secuestros y 36 asesinatos. Los episodios de violencia y las amenazas de las organizaciones criminales y los carteles, que han golpeado especialmente a candidatos locales de zonas rurales, no se detuvieron durante la votación. A lo largo del país se registraron disparos, quema de puntos de votación y robo de papeletas.
Con este escenario, la formación sumaría 16 Estados, la mitad de las entidades federativas del país. Mientras tanto, en el Congreso los partidos tradicionales de la oposición demostraron que todavía pueden dar pelea. Lo mismo sucedió en la capital, donde la oposición se impuso en cuatro alcaldías (distritos administrativos en los que está dividida la capital) decisivas: Miguel Hidalgo, Álvaro Obregón, Cuauhtémoc y Azcapotzalco. A su vez, Morena logró mantenerse en Iztapalapa, la demarcación territorial más poblada de México.
Tras lo que fue la convocatoria más grande de la historia de México, la correlación de fuerzas pone límites a su margen de maniobra en el Congreso. Para impulsar su proyecto político sin trabas y poder aprobar reformas constitucionales, López Obrador y Morena, necesitan el apoyo de al menos dos terceras partes de la Cámara baja. Ese apoyo es fundamental, por ejemplo, para desatascar su plan energético, que después del trámite parlamentario quedó paralizado por la justicia.
Con estos resultados y entrando en la segunda etapa del gobierno de AMLO, comienza el debate acerca de quien será la figura que sucederá al presidente de cara a 2024 teniendo en cuenta que no existe la posibilidad de una reelección.
En conferencia de prensa, el presidente López Obrador destacó que la ciudadanía votó por un proyecto y que el mismo contará con apoyo en el Congreso para aprobar presupuestos destinos a programas sociales. En el video, la conferencia completa: