El nuevo presidente de transición de Siria, ex líder del HTS y ahora llamado Ahmed Al Sharaa, comenzó a gestionar sus relaciones diplomáticas con otros estados, que han demostrado interés en sus acciones golpistas contra Assad.
La cuestión de la inmigración de refugiados hacia otros países, el rompimiento de relaciones con Moscú, y las valiosas tierras sirias representan fuertes intereses para las potencias de la región.
El primer mandatario en visitar a su vecino árabe, fue el emir de Qatar, el jeque Tamim bin Hamad Al-Thani, quien reanudó sus relaciones con Siria luego de que con el estallido de la guerra en 2011, decidiera cerrar su Embajada y romper lazos con Assad. El encuentro se dio el pasado jueves 30 de enero, horas después de que se anunciara la designación de Sharaa.
El emir había concurrido a Damasco a principios de enero, allí aseguró que Qatar respaldaría a Siria en cuestiones energéticas, en principio suministrando 200 megavatios, con incrementaciones graduales.
El pasado domingo, Al Sharaa realizó su primer viaje oficial, acudiendo a una reunión en Riad con el príncipe heredero saudí, Mohammed bin Salman. El mandatario de facto sirio eligió Arabia Saudita como su primer destino, siendo este su país de nacimiento.
«Amplios planes futuros en los campos de la energía, la tecnología, la educación y la salud» fue lo que acordaron ambos líderes.
El Reino árabe ya se había destacado como mediador de las relaciones políticas sirias, recibiendo a varios de sus funcionarios a principios de año, y realizando diversas reuniones con otros delegados árabes y occidentales.
Los encuentros de Sharaa con los representantes del Golfo, reanudaron las relaciones de Siria con la Liga Árabe, entidad de la cual Assad había sido expulsado al comienzo de la Guerra, para luego ser reincorporado en 2023 (a pesar de las sostenidas tensiones). Ambos emiratos aseguraron la reapertura de sus casas diplomáticas, así como el apoyo insistente al reacomodamiento de la situación del país.

Al encuentro con Europa
El martes, Sharaa viajó a Ankara para encontrarse con Erdogan, su principal aliado en el proceso revolucionario que estableció en Siria. El apoyo de Turkiye para con el nuevo régimen se hizo explícito una vez más, y el líder árabe agradeció el constante refuerzo brindado.
La cuestión kurda es de mera importancia para los turcos, por ello, uno de los temas principales de la reunión fue la acción conjunta para combatir a las Fuerzas Democráticas Sirias, a fin de expulsar a las milicias kurdas de la frontera.
«Estamos trabajando en la construcción de una asociación estratégica con Türkiye para enfrentar las amenazas a la seguridad en la región y garantizar la seguridad y estabilidad permanentes en Siria y Türkiye», dijo Sharaa. «También discutimos la necesidad de ejercer presión internacional sobre Israel para que se retire de la zona de amortiguación en el sur de Siria e implemente el acuerdo de 1974” añadió.
Por otra parte, el gobierno de Erdogan ha recibido al mayor número de refugiados sirios en los últimos años, alcanzando un máximo de 3.8 millones. Por ello, el presidente turco, junto con otros mandatarios europeos, se hallan ansiosos por resolver dicha cuestión, y expresó que el retorno voluntario de los desplazados se aceleraría a medida que Siria se volviera más estable.
También, dijo que “Türkiye continuará presionando por el levantamiento de las sanciones internacionales impuestas a Siria durante el gobierno del ex presidente Bashar al-Assad”. Así mismo, llamó al apoyo financiero de los demás estados árabes durante el periodo de transición del gobierno de Damasco, a pesar de no ser Türkiye un país árabe.
También, se trataron los lazos económicos entre ambos países, considerando una importante inversión de Ankara en empresas de transporte y manufactura en el territorio levantino.
El presidente Emmanuel Macrón, se sumó a la necesidad de resolver la problemática de los desplazados sirios, quienes no son recibidos con gratitud en las tierras europeas. Francia felicitó la designación del nuevo jefe transitorio abriendo las puertas a una futura reunión. Así mismo, se sumó al grupo de países que reabrirán su Embajada en Damasco, anunciándolo a través de la visita de su
Francia y otros países de la Unión Europea, se encuentran ansiosos por establecer nuevas relaciones con Siria, a fin de alejar al país de las intervenciones rusas. El ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Noel Barrot, visitó Damasco a principios de enero junto con su homóloga alemana, Anna Baerbock.
Foto de portada: Presidencia de Türkiye