Estas protestas tuvieron lugar, entre otros lugares, en la ciudad de Adén (suroeste), ocupada por las milicias del Consejo de Transición del Sur, apoyadas por los Emiratos Árabes Unidos.
Según AFP, los manifestantes denuncian el alto costo de vida, el desempleo, el colapso de la moneda frente a las divisas extranjeras y los apagones cada vez más frecuentes.
Los manifestantes bloquearon carreteras y quemaron neumáticos, lo que provocó enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, que dejaron nueve personas heridas, señalaron fuentes médicas.
Otra protesta está programada para el miércoles por la noche, dijeron los manifestantes a AFP.
Según Mahmud Saber, residente de Adén, las autoridades “no nos brindan ningún servicio”. “Hay electricidad durante una hora y luego se apaga durante seis horas. ¡Es cruel!”, dijo.
“¿Por qué se tortura a la gente de esta manera? ¿Cómo es posible que la coalición (liderada por Riad) proporcione armas, pero ningún servicio?”, se preguntó Mazen Abdelrauf, otro residente de Adén.
En Mukalla, en la provincia de Hadramut, al este de Adén, estallaron otras protestas por tercer día consecutivo en medio de apagones prolongados y el deterioro del nivel de vida.
“Pronto proporcionaremos 60 megavatios de electricidad a los habitantes de Mukalla, con el apoyo de los Emiratos Árabes Unidos”, dijo Faraj al Bahssani, gobernador de Hadramut, a AFP.
Según el sitio de noticias yemení New Yemen Hor, las protestas se extendieron a las provincias de Shabwat, Lahaj y Abin, y se produjeron enfrentamientos entre las facciones mercenarias de los distintos grupos apoyados por Riad y Abu Dhabi: el CTS, Al Islah y el grupo del disputado presidente Abed Rabbo Mansur Hadi, un secuaz de Arabia Saudí. Explosiones, enfrentamientos y disparos han dominado estas manifestaciones.
El conflicto en Yemen ha provocado la peor crisis humanitaria del mundo, según la ONU, que advierte periódicamente de una hambruna a gran escala en el país. De los 30 millones de habitantes, el 80% depende de la ayuda internacional, y las agencias de ayuda lamentan la falta de financiación.
Artículo publicado en Insurgente, orignal de Al Manar/Agencias.