La región de Zaporozhye celebrará un referéndum para decidir si se separa de Ucrania y solicita unirse a Rusia, según anunció el lunes el jefe de su administración.
Evgeny Balitskiy dijo que había firmado una orden para organizar el plebiscito durante un foro regional celebrado en la ciudad de Melitopol. Más de 700 representantes de diversas partes de la región ucraniana aprobaron la idea, según RIA Novosti.
Comentarios anteriores de funcionarios de la administración indicaban que el referéndum podría celebrarse a mediados de septiembre.
Las fuerzas rusas tomaron el control parcial de la región durante la ofensiva inicial contra Ucrania lanzada a finales de febrero. La ciudad homónima, situada en el norte de la región a orillas del río Dnepr, sigue bajo control ucraniano.
Los funcionarios de la región de Kherson, otra parte de Ucrania controlada por Rusia, expresaron planes similares para someter a votación la propuesta de separarse de Kiev y tratar de unirse a Rusia.
El presidente ucraniano, Vladimir Zelensky, reiteró el domingo la advertencia de que si las dos regiones siguen adelante con sus planes, Kiev romperá todas las conversaciones con Rusia. En respuesta, Moscú sugirió que el presidente ucraniano se dirigiera a los ciudadanos de esas regiones.
«La cuestión es que esto es lo que planean los residentes de la región. No es que nosotros [Rusia] celebremos un referéndum. Aquí, aparentemente, hay que entender a quién se dirige Zelensky con esta declaración: ¿a los ciudadanos de Ucrania de las regiones mencionadas o a los ciudadanos de Rusia? Si es a los ciudadanos y a los dirigentes de Rusia, entonces nos equivocamos de dirección», comentó el lunes el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
Hace meses que no hay conversaciones de paz entre Rusia y Ucrania, ya que Kiev rechaza tales contactos y afirma que sólo negociará después de derrotar a Rusia en el campo de batalla con la ayuda militar de Occidente.
Antes de la ruptura de las conversaciones, las dos naciones parecían haber avanzado en la resolución de sus diferencias. En una reunión celebrada en Estambul a finales de marzo, Kiev se había comprometido a convertirse en un país neutral y a aceptar restricciones en su ejército. Moscú dijo que había preparado un proyecto de acuerdo de paz basado en esas propuestas, pero Ucrania nunca respondió.
El mes pasado, la ONU y Turquía mediaron en un acuerdo indirecto entre Rusia y Ucrania para permitir la reanudación de las exportaciones de grano desde tres puertos ucranianos a través del Mar Negro. El plan se formalizó en dos acuerdos separados que firmaron Rusia y Ucrania con las otras dos partes.
Rusia envió tropas a Ucrania el 24 de febrero, alegando que Kiev no ha aplicado los acuerdos de Minsk, diseñados para dar a las regiones de Donetsk y Lugansk un estatus especial dentro del Estado ucraniano. Los protocolos, negociados por Alemania y Francia, se firmaron por primera vez en 2014. El ex presidente ucraniano Piotr Poroshenko ha admitido desde entonces que el principal objetivo de Kiev era utilizar el alto el fuego para ganar tiempo y «crear fuerzas armadas poderosas.»
En febrero de 2022, el Kremlin reconoció a las repúblicas del Donbass como estados independientes y exigió que Ucrania se declarara oficialmente un país neutral que nunca se unirá a ningún bloque militar occidental. Kiev insiste en que la ofensiva rusa no fue en absoluto provocada.
Artículo publicado en RT.
Foto de portada: Screenshot © RIA Novosti.
