Aunque en apariencias no aparezca de ese modo, opacada por la masa de créditos en dólares que consigue Caputo-Stuzzenegger y que sepulta-en-deuda a la Argentina como Nación ante los acreedores financieros globales.
Por lo tanto, cuando vemos a Bullrich con “mando” sobre las fuerzas de seguridad –gendarmería, policía federal, prefectura y servicio penitenciario-, esto implica a todos sus apoyos en Texas y Florida, la banca comercial norteamericana JPMorgan-Goldman Sachs y, principalmente al Comando Sur, la estructura militar más poderosa en todas las américas y referencia obligada para las fuerzas de seguridad y defensa en la región. Que hoy controla ya el ministerio de seguridad, el de defensa y el de energía YPF, Exxonmobil – Techint.
Y con vínculos claros con Luis Petri, el abogado mendocino, radical no del partido y hoy el ministro de defensa de Milei en 2023. Siempre muy vinculado a ala dura del PRO. Un radical y abogado que no viene del partido radical, pero con buen dialogo con Cobos y con las estructuras de poder.
Claro que, en la primera línea visible, aparecen sobredimensionados los actores vinculados al globalismo unipolar como Stuzzenegger, Caputo, el ministerio de economía y el banco central. Y con muy poca mención la influencia de Eunekian y grupo económico financiero local y el gran mentor de los Milei&Milei. Con Eunekian es importante tener presente a todos los grupos económicos locales que consolidaron sus posiciones provinciales a partir de quedarse con el control de los bancos provinciales privatizados en la Era Cavallo 1993-1996.
El actor del poder financiero norteamericano es la amenaza principal porque tiene presencia desde el golpe de 1955 en Argentina. Pero es en 1974-77 cuando consolida su presencia partir de su participación decisiva en los golpes de estado, junto al comando sur, que llevaron las maniobras de golpes de estado contra Perón desde 1973 hasta 1976, hasta lograr imponer su ley de entidades financieras con Martínez de Hoz, Kissinger y el Comando sur a la cabeza. Reeditando lo que ya habían hecho en Chile contra Allende.
Fue clave en 1991-94 también, con sus maniobras desde Uruguay, para imponer las leyes que entregaron el patrimonio nacional y les permitieron desguazar nuestras capacidades estratégicas acumuladas desde principios del siglo XX con la YPF nacional.
Pero hoy, en diciembre de 2023, poder financiero continentalista norteamericano necesita imponer su dominación en toda Sudamérica no solo en Argentina, sino también en Brasil, Venezuela, en Colombia, en Bolivia y no perder Perú al que controla con el golpe de estado de hace tres años para que no haya salida al pacifico sur. Y para asegurarse el cerco sobre la Bolivia rica en gas y en Litio.
Texas-Florida, los Republicanos de Trump-Bush y el comando sur asumen esta posición porque su presencia internacional se reduce a las Américas. Y se ve amenazada por los intereses globalistas dentro de EEUU, expresados en la Chevron, Blackrock, Davos y la OTAN, por un lado. Y por los actores multipolaristas en el BRICS+ en claro ascenso internacional.
Europa, la UE, Alemania-Francia-Italia en particular, está aún demasiado condicionada por los intereses globalistas-Otan y las crisis que les genera con las guerras desde Ucrania, desde Israel y desde África. Quienes dinamitaron su acceso a la energía barata a través del Northstream 1-2 y de la provisión de uranio desde Níger para las centrales nucleares de Francia.
Pero los actores financieros Globalistas-OTAN-Davos, si bien aún tienen peso en las decisiones de la UE, éste se está diluyendo luego de las derrotas en Ucrania, en Taiwán, en Israel Gaza-Palestina y en el mar Rojo en ambas bandas. Donde los actores del medio oriente en el marco de la multipolaridad se unen, se organizan y enfrentan a sus históricos colonialistas como Inglaterra, Francia, Italia, Netherlands.
Esto se manifiesta en las acciones de Yemen contra las grandes empresas navieras globalistas -Maersk, etc-. Lo cual entorpece el negocio del transporte retrasándolo en 11 días.
Todo esto da cuenta de porqué y dónde los actores financieros globalistas, Davos-Otan, están debilitados.
Por ello en Argentina, Suramérica y en toda la CELAC no son la amenaza principal. La amenaza principal son las corporaciones multinacionales norteamericanas y el Comando Sur. Que penetra y modela el amplio mundo de las fuerzas de seguridad y policiales. Y también el mundo narco local.
Los intereses financieros norteamericanos en la región Latinoamericana y Argentina, en particular, no tienen margen de tiempo para controlarla. Por ello su golpe de estado en Perú, su intento de golpe en Bolivia antes y la movida de desestabilización y confrontación aguda en la región del Esequibo venezolano, a partir de los intereses de Exxonmobil-Comando Sur. Donde Brasil movió rápidamente sus estructuras de defensa a la región y que le dan marco al conflicto. Claro que el Comando Sur tiene 5 bases militares en Colombia y acceso directo al mar caribe.
Bullrich y sus desafíos de debilitar al proyecto nacional argentino, a los acuerdos con Brasil en el marco del comercio con China, a la Unasur, a los acuerdos con China que bloqueen toda posibilidad de desarrollar independencia económica Nacional, Regional, Unasur, CELAC y BRICS- “A”.
Por ello lo crítico de la derrota electoral y de la ofensiva de las multinacionales, Exxonmobil y del comando sur al tratar de imponer con urgencia, condiciones y un programa que manifiestan en un DNU que no reúne los apoyos institucionales requeridos.
No tienen márgenes de tiempo solo intereses objetivos
Walter Formento* Licenciado en Sociología. Director del Centro de Investigaciones en Política y Economía (CIEPE), Centro miembro de la Red CLACSO. Director del Área de Estudios Geopolíticos de la Crisis Financiera Global (CIEPE). Coordinador del Grupo de Trabajo “Geopolítica de la Globalización” (CLACSO).
Foto de portada: Pablo Cuarterolo