Análisis del equipo de PIA Global Europa

Más promesas quiméricas en un encuentro insulso

Escrito Por Micaela Constantini

Por Micaela Constantini* –
Esta semana se desarrolló un encuentro entre los Ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN en donde se debatieron diversos temas, en específico los que involucran la seguridad de la región euroatlántica.

Un nuevo encuentro que buscaba mostrar la unidad del bloque y de los aliados, como también demostrar que no existe tal fatiga y desgaste respecto a la ayuda a Ucrania que muchos medios han estado alertando. Pero, la apatía y falta de interés por parte de los medios evidencia lo insustancial que resultó el encuentro entre ministros.

El evento principal era la primera reunión del Consejo OTAN-Ucrania a nivel de Ministros de Relaciones Exteriores junto al Ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, quien tenía como objetivo convencer a sus colegas de no abandonar a Ucrania y brindarle más ayuda.

Se aprobó un programa de trabajo para el año que viene que incluye seguridad energética, innovación e interoperabilidad. Se recordó el acuerdo entre 20 aliados de la OTAN sobre la formación de una coalición de defensa aérea para Ucrania. El paquete integral de asistencia de la OTAN se transformó en uno de asistencia plurianual para ayudar a Ucrania a realizar la transición de los equipos y estándares de la era soviética a los de la OTAN. Y aunque con algunas variantes, suena a la misma promesa de siempre.

El principal tema de la agenda respecto a Ucrania era discutir la membresía de Kiev a la OTAN y el mantenimiento de la ayuda de los aliados. Todo ha quedado, nuevamente, en lo simbólico y discursivo. Volvieron a prometer que si bien “los aliados acuerdan que Ucrania se convertirá en miembro de la OTAN”, aún le queda un vasto camino por recorrer. 

Se ha proporcionado “recomendaciones sobre las reformas prioritarias de Ucrania, incluyendo la lucha contra la corrupción, el fortalecimiento del Estado de derecho y el apoyo a los derechos humanos y los derechos de las minorías”. Un tema muy importante al que Washington insiste en hacer cumplir a Kiev tras los escándalos por corrupción que sirven a sus socios y aliados para justificar su preocupación sobre cómo se está organizando la política interna y la política de guerra en Ucrania. 

Ucrania presentó el Programa Nacional Anual adaptado para 2024 que el Consejo OTAN-Ucrania “espera con interés su implementación”, y del cual “los Ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN evaluarán periódicamente los avances”.

El Secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, participó del encuentro, como parte del intento de occidente de buscar demostrar que no existe tal fatiga ni debilitamiento del apoyo hacia Ucrania. De hecho, respondiendo a la pregunta explícita de un periodista, Blinken aseguró: “no escuché ninguna sensación de fatiga o de retroceso; al contrario, una determinación de seguir adelante”.

En principio Blinken intentó recordar que EEUU invierte en la OTAN como su “mayor activo estratégico: una red inigualable de alianzas y asociaciones”, e incluso recordó cuando en marzo de 2021 fue a la OTAN a afirmar el compromiso de Biden con Europa, ya que en ese momento “algunos cuestionaban su relevancia, su capacidad y su unidad”. 

“Mientras nos reunimos hoy aquí en Bruselas, aquellos que apostaron contra la OTAN claramente han demostrado que estaban equivocados. Hoy la OTAN es más grande, más fuerte, más unida y más capaz que nunca”, dijo Blinken tras el encuentro, y ciertamente tiene razón si vemos cómo la OTAN ha extendido sus tentáculos por toda Europa y más allá, consolidándose en regiones estratégicas, cortando completamente los lazos de la región con Rusia y sometiendo, junto a las élites europeas, a los países europeos a sus deseos e intereses.

Por su parte, Kuleba afirmó “nos estamos convirtiendo prácticamente en un ejército de facto de la OTAN”, en su primera reunión del Consejo OTAN-Ucrania, haciendo referencia a la “capacidad técnica, gestión, enfoques y principios”. Pero mientras tanto, la respuesta sigue siendo la misma: “Ucrania se convertirá en miembro de la OTAN cuando todos los aliados estén de acuerdo y se cumplan las condiciones. Esa es la política. Se afirmó claramente en Vilnius y se reafirma claramente hoy”, esta vez en palabras de Blinken. Las mismas palabras que se vienen diciendo desde el principio.

Otro gran tema de discusión, al que hay que comenzar a poner el ojo para los eventos futuros en la región europea, que se desarrolló en el Encuentro entre Ministro de Asuntos Exteriores de la OTAN y que toma cada vez más relevancia en la agenda de los aliados es la presencia de la Alianza en los Balcanes Occidentales, o como ellos lo mencionan: “la promoción de la paz y la seguridad”.

En este sentido, Blinken aseguró que los Balcanes, Bosnia y luego Kosovo forman parte de las preocupaciones del gobierno estadounidense y de la Alianza. “La OTAN tiene un papel fundamental que planificar para ayudar a los Estados de la región a avanzar en su camino hacia la membresía en la UE y hacia una estabilidad europea más amplia. La OTAN ha sido durante mucho tiempo la columna vertebral de la seguridad en los Balcanes Occidentales; va a seguir haciéndolo”.

Al día siguiente del Encuentro de Ministros, Blinken encabezó la delegación estadounidense y se dirigió a Macedonia del Norte, miembro de la OTAN, en donde se desarrolló la reunión de dos días de ministros de Asuntos Exteriores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).

Por su parte, el Alto Representante de la UE, Josep Borrell, instó a Serbia y Kosovo a que muestren voluntad para avanzar sobre acuerdos que faciliten su camino hacia la integración europea. También destacó la importancia de la cooperación entre la UE y la OTAN en Kosovo. Alemania anunció que proporcionará hasta 150 soldados adicionales a la KFOR, según dijo su ministra de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock. Confirmando una Alemania decidida en el involucramiento de su nación en los temas más acuciantes respecto a la seguridad de Europa.

El Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, también insistió en que Pristina y Belgrado “deben participar de buena fe en el diálogo facilitado por la UE”. Varios funcionarios destacaron la importancia de que la OTAN y la Unión Europea deben trabajar en conjunto en los Balcanes Occidentales. En este sentido, Stoltenberg resaltó que “Kosovo es un ejemplo de cómo la OTAN y la Unión Europea están trabajando muy estrechamente. La UE está a cargo de los esfuerzos diplomáticos. Estamos presentes con miles de tropas sobre el terreno y, de hecho, como resultado de esto, hemos añadido 1.000 tropas más de la OTAN a nuestra presencia en Kosovo, hasta llegar a aproximadamente 5.000”.

Asimismo, recalcó que gran parte de la solución del conflicto y comienzo del diálogo entre Serbia y Kosovo implica la propuesta de una asociación de municipios de mayoría serbia.

Mientras Ucrania pierde relevancia en el interés internacional frente al genocidio del pueblo palestino en manos del régimen sionista de Israel, pero en especial por los pocos avances en el terreno que dejó la tan promocionada contraofensiva ucraniana, los “rumores” acerca de las conversaciones entre EEUU y Rusia sobre negociaciones de paz respectro a Ucrania se hacen cada vez más sólidos, y las especulaciones sobre un posible cambio en las filas internas del gobierno ucraniano en detrimento de Zelensky podrían cumplirse si se ajustan a los deseos de Washington sobre la consolidación del sometimiento europeo en su enfrentamiento contra Rusia.

Mientras se preparan para recibir “malas noticias” respecto a Ucrania, según las palabras de Stoltenberg en una entrevista al medio alemán ARD, el interés de la Alianza y los miembros de la UE comienza a posicionarse en los Balcanes Occidentales, un territorio que si bien ya cuenta con Estados artificiales como satélites de control, aún le queda consolidarse y terminar de desarraigar los vínculos de ciertos países con Rusia.

Previo a la discusión en el formato de reunión entre Ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN, la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, visitó los Balcanes Occidentales para asegurarse el interés de los candidatos a la UE y su voluntad de seguir el camino de la adhesión a la Unión. Asimismo, Stoltenberg realizó un gira por Bosnia y Herzegovina, Kosovo, Macedonia del Norte y Serbia.

Siendo un posible terreno de desestabilización futura, los aliados buscan introducir a los Balcanes occidentales dentro de su órbita atrayendolos a la UE para, quizás más tarde en proyección geoestratégica incluirlos a la Alianza. Para poder llevar adelante este objetivo, han estado fortaleciendo el discurso de bajar tensiones existentes, desescalar conflictos y evitar cualquier enfrentamiento entre partes. 

Constantini Micaela, periodista y parte del equipo de PIA Global.

Foto de portada: Foto de familia – nato.int.

Acerca del autor

Micaela Constantini

Comunicadora Social, periodista. Miembro del equipo de investigación de PIA Global. Investigando cibergeopolítica y virtualidad. Feminista, antiimperialista y autodidacta. Nuestra americana Trabajo con redes sociales, edición de video y comunicación digital.

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