Las fuentes oficiales del gobierno iraní confirmaron que la explosión de Isfahán sucedió en la zona norte de la urbe, en una de las empresas de armamentos que posee el Ministerio de Defensa iraní, y que por el momento no se reportan víctimas.
También aseguraron que otros drones fueron derribados por la defensa antiaérea y que el que impactó causó daños menores en el tejado del taller sin afectar los equipos y las misiones del complejo.
En un comunicado oficial aseguran que “Estas acciones ciegas no tendrán efecto en la continuación del progreso del país, por la gracia de Dios, no causó ninguna interrupción en el equipo y las misiones del complejo”
El vocero gubernamental Mohammad Reza Jannesar, expresó a la televisión estatal: “Se están investigando los daños, así como las causas y los elementos que provocaron esta explosión y se anunciarán más adelante”.
Este ataque no ha sido el primero y en los últimos años se han producido distintos atentados a instalaciones militares, nucleares e industriales iraníes.
Fuentes occidentales especulan que la planta atacada este 28 de enero podría estar ligada a la fabricación de drones que el Ejército ucraniano asegura haber derribado a la ofensiva rusa y que se tratarían de los drones “kamikaze” Shahed-136 de fabricación iraní.
También se están difundiendo por medios locales y redes sociales explosiones en otras regiones de Irán, como las ciudades de Hamedan y Karaj, durante la noche del 28 de enero, pero por el momento no hay otra información oficial.
Foto de portada: / Captura de video, Irán reportó un ataque de drones en una instalación militar