Este 6 de octubre, se celebró la Cumbre UE-Balcanes Occidentales en Brdo pri Kranju, Eslovenia. Organizada por la presidencia eslovena del Consejo, la Cumbre reunió a líderes de los Estados miembros de la UE y los seis socios de los Balcanes Occidentales: Albania, Bosnia y Herzegovina, Serbia, Montenegro, la República de Macedonia del Norte y Kosovo. Según describen en el Consejo Europeo, la designación de Kosovo “es sin perjuicio de las posiciones sobre el estatus, y está en línea con la RCSNU 1244/1999 y la opinión de la CIJ sobre la declaración de independencia de Kosovo”, esto quiere decir, que la declaración unilateral de independencia de Kosovo del 17 de febrero de 2008 no viola el derecho internacional. No obstante, España, Grecia, Rumanía, Chipre y Eslovaquia no reconocen a Kosovo.
Eslovenia fue en 2004 el primer país de los Balcanes en ingresar en la UE. Croacia se unió en 2013, casi 10 años después de haber solicitado la adhesión. Albania, Macedonia del Norte, Montenegro y Serbia son oficialmente candidatos para ingresar a la Unión Europea, mientras que Bosnia y Herzegovina y Kosovo son candidatos potenciales.
La Presidencia eslovena en el Consejo Europeo propuso un calendario de adhesión de los Balcanes Occidentales para 2030, pero no contó con el apoyo de todos los Estados miembros. Por lo que la UE llega a la Cumbre buscando reafirmar la perspectiva europea en la región pero sin intención de fijar un calendario concreto para el proceso de adhesión.
La Cumbre, “forma parte del compromiso estratégico de la UE con los Balcanes Occidentales, en consonancia con la Agenda Estratégica 2019-2024”, según describen desde el mismo Consejo Europeo. Concluyó con una declaración conjunta adoptada tanto por los líderes de la UE como los líderes de los Balcanes Occidentales.
“La declaración reafirma el apoyo inequívoco de la UE a la perspectiva europea de los Balcanes Occidentales. Establece iniciativas para apoyar la conectividad y las transiciones verde y digital en la región, y compromisos en el ámbito de la cooperación política y de seguridad”.
Comisión Europea
Las iniciativas que destacan desde el Consejo son:
- el Plan Económico y de Inversiones (EIP) de 30.000 millones de euros;
- el compromiso de aumentar las tasas de vacunación COVID-19;
- el camino hacia menores costos de roaming;
- una agenda de innovación para los Balcanes Occidentales;
- Planes de acción comunitarios de transporte y carriles verdes.
Reunión previa de los líderes europeos
Previo a la Cumbre se realizó una reunión de ‘debate estratégico’ entre los líderes de la Unión Europea. Se conversaron temas como la crisis de Afganistán, la alianza AUKUS entre EEUU, Reino Unido y Australia y las relaciones con China y EEUU. Uno de los temas más destacados fue el apoyo o rechazo a la idea de ‘autonomía estratégica’ de la UE respecto a otras potencias, especialmente de Estados Unidos.
El primer ministro italiano, Mario Draghi, habló de la necesidad de tener una política exterior común para lograr la creación de un sistema de defensa común europeo, sin necesidad de socavar a la OTAN.
«No pienso que crear algo fuera de la OTAN debilite a la OTAN ni a la UE (…) Se habla a menudo de la autonomía estratégica en defensa, pero si no hay una política exterior común es muy difícil pensar que haya una defensa común», dijo Mario Draghi.
Emmanuel Macron, presidente francés, también perfiló con la idea de que Europa debe ‘aumentar su independencia y soberanía’ ante ‘los desafíos y las crisis’ actuales.
Por otra parte, el primer ministro de Letonia, Krisjanis Kariņs, declaró que “la alianza UE-OTAN, la alianza transatlántica es un aspecto muy importante que no debe verse comprometido de ninguna manera”.
En las conclusiones del presidente Charles Michel, luego de la reunión informal de los miembros del Consejo Europeo, se dejo establecido la colaboración con los aliados y socios afines, “en particular Estados Unidos y en el marco de la OTAN, que constituye la piedra angular de nuestra seguridad”.
No obstante, a continuación remarca que “para ser más eficaz y más asertiva en la escena internacional, la Unión Europea debe incrementar su capacidad para actuar de manera autónoma”. Entonces describe autonomía
“como potencia económica, a través de nuestro mercado único, la definición de normas (sobre el clima, la energía, el sector digital o la política industrial), la igualdad de condiciones y la reciprocidad; en el ámbito de la seguridad y la defensa de la UE”.
Charles Michel
También develó que se trabajará en “una nueva declaración política con la OTAN antes de la Cumbre de la OTAN de junio de 2022”.
Por último, informó que el Alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell presentará un primer proyecto de la brújula estratégica en noviembre de 2021.
En declaraciones posteriores, Borrell dijo que son muy conscientes de que “el mundo está experimentando un cambio en el equilibrio geopolítico de poder”.
“Hay una gran bipolaridad entre China y Estados Unidos por un lado, y por otro lado hay una multipolaridad de actores, y los europeos tienen que actuar (…) Los europeos tienen que crear una cultura estratégica común, compartir los desafíos a los que se enfrentan, y de eso se trata la brújula estratégica”.
Josep Borrell
Visión estratégica de la UE en los Balcanes
En la Declaración de Brdo, 6 de octubre de 2021, la UE instó a que sus socios de los Balcanes Occidentales reconozcan públicamente el rol de la UE en la región.
“La UE es, con diferencia, el socio más cercano, el principal inversor y el principal donante de la región. La magnitud y el alcance sin precedentes de este apoyo deben ser plenamente reconocidos y expuestos por los socios en sus debates públicos y sus comunicaciones”.
La UE remarca que la Comunidad es “el principal socio político, económico y comercial de los Balcanes Occidentales a través del Plan Económico y de Inversiones (EIP). La UE está proporcionando un apoyo financiero sin precedentes movilizando unos 30.000 millones de euros para la región durante los próximos siete años”.
Desde el sitio web oficial de la UE dedicado a los Balcanes ‘webalkans.eu’, informan que “Para ayudar a avanzar hacia la adhesión, la UE proporciona ayuda financiera en una variedad de áreas. Esto va de la mano con el apoyo a las mejoras necesarias para cumplir con las normas de la UE, en áreas como el poder judicial y la administración pública.
Una mayor igualdad, crecimiento y oportunidades en los Balcanes Occidentales conducirá a una Europa más fuerte y próspera”.
Otro ítem importante que se dejó establecido en la declaración de la Cumbre, es el de cooperación política y de seguridad. Los líderes de la UE señalaron que estar junto a la UE era una clara señal de la orientación estratégica de los socios de los Balcanes Occidentales, por lo que esto debería reflejarse en la plena alineación con las posiciones de política exterior de la UE.
Reafirmamos nuestra expectativa de que los socios profundicen aún más la cooperación en el ámbito de la Política Exterior y de Seguridad Común (PESC) y logren un progreso tangible y sostenible hacia la plena alineación con las posiciones de política exterior de la UE y actúen en consecuencia, incluso con posiciones en foros internacionales como parte importante de su camino europeo.
Declaración de Brdo, 6 de octubre de 2021
El comunicado del Consejo Europeo continúa: “Dado que la UE y los Balcanes Occidentales se enfrentan a numerosos desafíos de seguridad comunes, los líderes acordaron fortalecer su cooperación en:
- contribuir a las misiones y operaciones de seguridad de la UE;
- abordar la desinformación y otras amenazas híbridas;
- mejorar la seguridad cibernética y la diplomacia cibernética;
- lucha contra el terrorismo, la radicalización y el crimen organizado;
- lucha contra el blanqueo de capitales y el tráfico de personas y de drogas;
- responder a los acontecimientos en Afganistán.
Sin embargo, todas las promesas de adhesión se van deteriorando con el pasar del tiempo, mientras que la presencia de otras potencias en la región se vuelve más fuerte. En los últimos años se ha profundizado la presencia de China, Turquía, Rusia y los países del Golfo Pérsico que ven en los Balcanes Occidentales una zona estratégica.
Algunos actores presentes en los Balcanes Occidentales
Los Balcanes constituyen un área estratégica de interés para distintas potencias, por ejemplo para el proyecto chino de la Ruta de la Seda; para el gasoducto europeo y el ruso-turco; zona geográfica de interés en seguridad para la UE debido a sus fronteras; puertos e infraestructura crítica. Los Balcanes occidentales se encuentran en el corazón de una importante ruta marítima, próxima a Europa occidental, África del Norte y Asia occidental.
Turquía comenzó con su política exterior de “cero problemas con los vecinos” y cooperación regional con el entonces ministro de relaciones exteriores y luego primer ministro Ahmet Davutoglu entre 2009 y 2016. Turquía, a partir del gobierno de Erdogan, comenzó a establecer relaciones en los Balcanes Occidentales principalmente en el desarrollo de los lazos comerciales y económicos. El pilar de la estratégia turca en la región de los Balcanes Occidentales ha sido la cooperación económica, los tratados de libre comercio y circulación e inversiones en infraestructuras.
Para 2016 ya se podía observar un gran aumento de comercio mutuo, y para 2019 ya se encontraba posicionado entre los 20 socios comerciales más importantes para la economía de la región, incluso se comenzó a hablar de la entrada del complejo militar-industrial turco. En 2020 comenzó a funcionar el “Turkish Stream”, un gasoducto que va desde Rusia a Turquía atravesando el Mar Negro, para suministrar gas a Europa. Grecia, Bulgaria, Macedonia del Norte y Serbia formaron parte del proyecto. También se lanzó el Corredor de Gas del Sur, constituído por el Oleoducto del Cáucaso Sur (SCPX) de Azerbaiyán y Georgia, el Oleoducto Trans Anatolian (TANAP) de Turquía y el Oleoducto Trans Adriático (TAP) de Grecia, Albania e Italia.
A pesar del gran crecimiento de la presencia turca en los Balcanes, Turquía aún no está cerca de igualar los proyectos de inversión de la UE, Estados Unidos o China.
Serbia es el país balcánico que más relación tiene con Rusia, especialmente a partir de los vínculos históricos, religiosos y culturales que comparten, como también en el apoyo ruso en la disputa con Kosovo. El gasoducto “Turkish Stream” constituye una fuerte influencia rusa en la región a partir del suministro de gas.
No obstante, la presencia de Rusia en los Balcanes ha ido disminuyendo. Como ya mencionamos Eslovenia ingresa a la UE en 2004, Croacia en 2013, Albania, Macedonia del Norte, Montenegro y Serbia son candidatos, mientras que Bosnia y Herzegovina y Kosovo son candidatos potenciales. Se han sumado a la OTAN, Eslovenia en 2004, Albania y Croacia en 2009, Montenegro en 2017 y Macedonia del Norte en 2020. Esto implica una pérdida de posición rusa en el suroeste europeo, especialmente en el Mediterráneo. Deja el camino libre a otros actores y desafía a Rusia en sus relaciones con Turquía, China, la UE y la OTAN.
China tiene una mayor presencia en la región de los Balcanes ofreciendo una visión estratégica de integración a partir de la Ruta de la Seda. Desde el lanzamiento del mecanismo de cooperación 16+1 entre China y los países de Europa Central y Oriental la presencia china se ha multiplicado. Las empresas chinas han invertido en Albania, Bosnia y Herzegovina, Kosovo, Montenegro, Macedonia del Norte y Serbia, como también han dado préstamos para infraestructura en toda la región. Además se han fortalecido los lazos culturales a partir de la cooperación entre instituciones culturales y académicas.
A los países balcánicos no sólo los impacienta la larga espera y exigencias para ingresar a la UE, sino también la falta de solidaridad de la Comunidad con la región de los Balcanes cuando comenzó la crisis de la pandemia por covid-19. Esto creó una gran desconfianza y falta de credibilidad para con sus socios europeos. Rusia y China tuvieron una participación activa en la región suministrando vacunas, personal médico y distintas medidas para ayudar con la crisis causada por la pandemia. China suministró vacunas Sinopharm a Serbia y firmaron contrato para la producción local de la vacuna. Rusia también ha exportado la vacuna Suptnik V a Montenegro, Macedonia del Norte, Bosnia y Herzegovina y Albania.
El mismo presidente Serbio, Aleksandar Vucic, dijo “La solidaridad europea no existe. Era un cuento de hadas sobre el papel. Los únicos que pueden ayudarnos son los chinos”.
No obstante, los europeos siguen siendo el principal socio comercial y de inversión para los Balcanes Occidentales, muy por delante de Rusia o de China.
Qué pasará con los pueblos balcánicos ante los nuevos desafíos de la geopolítica mundial con multiplicidad de actores, promesas incumplidas, conflictos históricos sin resolver, y una estratégica posición geográfica de interés para varias potencias.
*Micaela Constantini, periodista parte del equipo de PIA Global.
Foto de portada: Ursula von der Leyen y Charles Michel, presidentes de la Comisión y el Consejo, con los líderes de los Balcanes Occidentales – Virginia Mayo/Copyright 2020 The Associated Press.