Se informa y es noticia que Marruecos está cada vez más interesado en fortalecer su cooperación en materia de inteligencia y seguridad con Israel. Quizás el ejemplo más significativo de esto es la compra de 36 piezas de obús autopropulsadas Atom 2000 a la empresa israelí Elbit Systems, que fue anunciada a principios de febrero de este año. Marruecos se está distanciando poco a poco de uno de sus proveedores tradicionales, Francia, que había firmado un acuerdo con Rabat en 2020 para comprar el sistema de artillería autopropulsada Caesar, fabricado por la empresa francesa KANDA y muy similar a su competidor israelí, el Atom 2000.Marruecos compra estos cañones principalmente por su operabilidad en todo tipo de terrenos, incluido el desértico, gracias a su movilidad autónoma. Otro dato que refleja el distanciamiento respecto a los galos, es que el pasado mes de julio de 2024, las fuerzas armadas marroquíes decidieron rescindir un contrato militar con Francia relativo a sus satélites espías Mohammed VI-A y Mohammed VI-B, fabricados por las empresas europeas Airbus y Thales, para sustituirlos por los de compañías israelíes.
Según se lee en el contrato, la compañía estatal israelí IAI suministrará a Marruecos dos satélites Ofeq-13 de última generación en un plazo de cuatro años por un valor de 1.000 millones de dólares. Este es considerado el mayor acuerdo militar firmado hasta ahora entre Israel y Marruecos. Los acuerdos entre Rabat y Tel Aviv avanzan gracias a la compra de armas israelíes. Tras la venta de material militar como los drones Heron, el SkyLook Dome para derribar drones enemigos, el sistema antimisiles Barak MX, y muchos otros. Desde principios de 2023, Israel se convirtió en el tercer mayor proveedor de armas del Reino de Marruecos (11%), después de Estados Unidos y Francia, según el Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo (SIPRI). A este ritmo, Francia pronto perderá su puesto como segundo mayor proveedor de armas a Marruecos.
Los acuerdos de armas más destacados entre Marruecos e Israel
1. Sistemas de lanzamiento de cohetes, lanzacohetes israelí de múltiples calibres.
El gobierno de Marruecos ha firmado un contrato con Israel para adquirir sistemas de lanzacohetes múltiples PULS, que se trata de sistemas de largo alcance capaces de realizar ataques de precisión contra objetivos estratégicos. Estos lanzadores son capaces de disparar múltiples cohetes en un tiempo récord, lo que proporciona a las fuerzas marroquíes una ventaja de potencia de fuego avanzada.
2. Drones.
Marruecos desea potenciar su arsenal de drones, tras la cancelación de los Reaper estadounidenses, los marroquíes adquirieron drones israelíes avanzados, que cuentan con capacidades de reconocimiento y ataque. Estos aviones no tripulados incluyen modelos capaces de realizar ataques de precisión contra objetivos terrestres, además de proporcionar información de inteligencia.
3. Satélites de espionaje y reconocimiento, un satélite israelí de la familia «Ofeq».
Como parte de sus esfuerzos para mejorar sus capacidades aéreas en cuanto a vigilancia y reconocimiento, Marruecos ha adquirido los satélites israelíes Ofeq-13 y 16, que proporcionan imágenes de alta resolución.
4. Sistemas de defensa aérea de largo alcance; Barak MX, o el sistema de defensa aérea de camuflaje marroquí.
Entre los acuerdos más destacados de Marruecos con Israel está la adquisición del sistema Barak MX, considerado uno de los sistemas de defensa aérea más avanzados de Israel. Este sistema proporciona capacidades defensivas avanzadas contra aviones y misiles.
5. Misiles antitanque israelíes Spike.
Marruecos ha reforzado sus fuerzas terrestres adquiriendo misiles antitanque israelíes Spike. Estos misiles se caracterizan por su capacidad para penetrar fortificaciones gracias a su avanzado guiado y sistemas inteligentes, lo que los convierte en un arma eficaz contra objetivos blindados y protegidos.
6. Sistemas de guerra electrónica, contramedidas e interferencias.
En mitad de una tendencia mundial hacia la guerra cibernética, Rabat ha adquirido sistemas avanzados de guerra electrónica de Israel, incluidas tecnologías de interferencia y contramedidas para proteger sus comunicaciones y los sistemas militares de ataques cibernéticos. Estos sistemas contienen la capacidad de interrumpir las comunicaciones del adversario y protegen la infraestructura de defensa frente a intrusiones cibernéticas.
7. Cañones autopropulsados avanzados; el cañón autopropulsado israelí de 155 mm
Marruecos también ha reforzado su arsenal de artillería adquiriendo cañones autopropulsados de fabricación israelí, que son muy maniobrables y de rápido despliegue, lo que los convierte en un componente importante en las operaciones militares terrestres.
Los negocios marcan la relación israelo-marroquí
Marruecos e Israel mantienen buenas relaciones, en oculto, desde hace décadas, especialmente desde los años 1980. Pero en los últimos meses, las autoridades marroquíes han hecho lo que ningún otro país árabe, ni siquiera occidental, se ha permitido hacer: apoyar abiertamente a Israel en su guerra en Gaza. Una vez que comenzó la guerra en Gaza, las visitas de funcionarios israelíes a Marruecos cesaron o se volvieron más restringidas, como la de Amir Peretz, jefe de la estatal IAI (Israel Aerospace Industries) quien visitó el reino alauita en el verano de 2024 para firmar el contrato de los satélites Ofeq 13 y 16. Desde entonces, el intercambio comercial continuó con fuerza.
A principios de junio de 2024, el gran buque de desembarco de la Armada israelí INS Komemiyut, en ruta desde Pensacola (Florida, EE. UU.) a Haifa (Israel), hizo escala en el puerto de Tánger para repostar después de que el gobierno español se negara a permitir que el barco utilizara sus puertos por estar involucrado en el envío de armas a la guerra en Gaza. En diciembre de 2024, Marruecos aceptó repatriar a Israel, Nassim Kleibat, un ciudadano palestino acusado de terrorismo y detenido en el reino marroquí, a pesar de la falta de un tratado de extradición entre ambos países.
¿Cuáles son los costos de estas relaciones?
¿Por qué Marruecos ha estado tan interesado en mantener e incluso fortalecer sus relaciones con Israel, dado que la guerra de Israel en Gaza es tan impopular en Marruecos? Durante la segunda Intifada palestina (2000-2005), Rabat hizo exactamente lo contrario y rompió las relaciones diplomáticas con Israel, que se habían establecido en 1994. Puede haber una doble explicación para esto; Marruecos es un país en guerra, aunque la guerra que libra contra los saharauis en la República Saharaui es una guerra de baja intensidad. Pero detrás de los saharauis está Argelia, la principal potencia militar de África.
En su relación con Israel, «el componente militar es muy importante porque va más allá de las armas», explicó Intisar Fakir, jefa del Programa del Norte de África del Middle East Institute. Rabat necesita que Estados Unidos continúe apoyando su ocupación de partes de la República Saharaui. Trump ya dió un paso en este sentido en 2020, pero la diplomacia marroquí quiere que haga más en este momento. La experta añadió que «Existe un deseo de intercambiar experiencias y un compromiso más profundo con la cooperación militar entre Israel y Marruecos». Al enfrentarse a los enemigos de Marruecos, que son también enemigos de Israel, éste se pone en mayor riesgo que los socios europeos del Reino, según los expertos.
«Rabat ahora espera obtener algún tipo de respaldo internacional final a su ocupación del Sáhara Occidental» afirmó por su parte Hugh Lovatt, en una importante conferencia patrocinada por Estados Unidos que se celebró el mes pasado en los Emiratos Árabes Unidos, añadiendo que «se están manteniendo intensos contactos diplomáticos para lograr este objetivo». Lovatt es el investigador principal de políticas del Programa para Oriente Medio y el Norte de África del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores.
*Lehbib Abdelhay es analista y periodista
Artículo publicado originalmente en ECSAHARAUI