Análisis del equipo de PIA Global Elecciones 2024 Europa

Elecciones en Austria y el posible porvenir de Patriotas por Europa

Escrito Por Micaela Constantini

Por Micaela Constantini* –
Neutralidad, independencia de las organizaciones supranacionales, autarquía económica y libertad individual en asociación a un nacionalismo soberano, proyecto que gana terreno en Austria.

El domingo 29 de septiembre se estarán desarrollando elecciones federales en Austria, en donde más de seis millones de ciudadanos y ciudadanas elegirán a 183 miembros del Consejo Nacional, la cámara baja del Parlamento.

Nueve partidos se estarán disputando asientos en el Consejo Nacional, órgano encargado de la elaboración de leyes, la fiscalización del gobierno y la aprobación del presupuesto nacional. 

La nueva formación del nuevo gobierno se decidirá a partir del partido o coalición que obtenga la mayoría en el Consejo Nacional, lo que influye directamente en los temas más acuciantes de la población, desde la economía y políticas públicas hasta la política exterior. 

Otra función importante que posee el Consejo Nacional sobre la gobernanza del país reside en la aprobación o desaprobación de la figura del Canciller. Una vez finalizadas las elecciones parlamentarias, y con los resultados en la mesa, el Presidente de la nación propone al líder del partido o coalición con mayoría como el próximo Canciller ante el Consejo Nacional. Los parlamentarios pueden emitir su voto de confianza y aprobar la designación, o presentar una moción de censura y desaprobar dicha propuesta. 

Mientras que el Presidente se desempeña como jefe de Estado, representa al país en actos oficiales e internacionales, posee la capacidad de disolver el Consejo Nacional y cumple algunas funciones diplomáticas, el Canciller es el jefe de gobierno y jefe ejecutivo, posee más control sobre la administración del gobierno y junto al Ministro de Asuntos Exteriores se encargan de gestionar y tomar decisiones en política exterior.

Tras las elecciones en 2019 el actual gobierno reúne a los partidos ÖVP y Die Grünen en una coalición, mientras que en 2022 los y las austriacas votaron a Alexander Van der Bellen como presidente.

Los principales partidos en Austria son el ÖVP, el Partido Popular Austriaco, es el principal partido conservador y se encuentra dentro del grupo del Partido Popular Europeo; el SPÖ, el Partido Socialdemócrata de Austria es el principal partido de centro-izquierda y pertenece al grupo de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas (S&D) en el Parlamento Europeo; Die Grünen, Los Verdes, es un partido ecologista de centro-izquierda que pertenece al grupo de los Verdes/ALE en el Parlamento Europeo; NEOS, el partido Nueva Austria y el Foro Liberal, es un partido liberal de centro que forma parte de Renew Europe en el Parlamento Europeo; el FPÖ, el Partido de la Libertad de Austria es un partido nacional conservador de extrema derecha y pertenece al recién creado grupo europarlamentario de Patriotas por Europa.

En los últimos meses, tanto el partido socialdemócrata del SPÖ, como la extrema derecha del FPÖ vienen encabezando las encuestas de intención de votos, mientras que la coalición de gobierno del ÖVP y Grünen, está perdiendo apoyo y popularidad. No obstante, los partidos siguen discutiendo y especulando ante posibles nuevas coaliciones. 

Fuente: legrandcontinent

Aunque el FPÖ hoy se posiciona como principal partido opositor que ha logrado volver a captar el apoyo ciudadano, no siempre fue oposición, compartieron gobierno durante los períodos 200-2005 y 2017-2019. Durante 2017 el ÖVP con Sebastián Kurz, y el FPÖ, con Heinz-Christian Strache, formaron coalición de gobierno, pero no duró mucho debido a escándalos de corrupción que involucraban al líder del FPÖ, por lo que en 2019 Strache dimitió y se disolvió la coalición que llevó a elecciones anticipadas.

En 2020, el ÖVP, con Sebastián Kurz, en un giro bastante radical, pasa de formar coalición con la extrema derecha para formar gobierno con Los Verdes, de izquierda. No obstante, esta coalición tampoco se salvó de sus crisis. En 2021 Kurz fue acusado de malversación de fondos públicos, soborno y manipulación de medios, por lo que ese mismo año presentó su renuncia y fue reemplazado por Alexander Schallenberg en un mandato que duró tan sólo dos meses hasta que asumió Karl Nehammer como nuevo líder del ÖVP y como canciller del país.

Y aunque la coalición ha sobrevivido a diversas crisis, actualmente enfrenta enormes diferencias y tensiones, por lo que el ÖVP se encuentra analizando nuevas alianzas. El ÖVP se ha mostrado interesado en formar coalición con el FPÖ, pero los miembros conservadores no están dispuestos a unirse con el actual líder del FPÖ, Herbert Kickl.

Kickl ocupó el cargo de Ministro del Interior durante el gobierno de 2017-2019, y sus políticas sobre migración y seguridad se caracterizaron por ser duras. Tiene un perfil nacionalista radicalizado en temas de inmigración y asilo con fuertes críticas hacia la Unión Europea y de buenas relaciones con Rusia, oponiéndose a las sanciones contra Moscú y proyectando una postura neutral de Austria en relación a los conflictos regionales e internacionales, dos posiciones que generan extremas tensiones en los países europeos hoy. En 2019 estuvo involucrado en escándalos e investigaciones por corrupción, no obstante sigue siendo una figura atrayente entre sus votantes.

El FPÖ se creó en 1956, y en principio estuvo relacionado al nazismo a partir de su primer líder, Anton Reinthaller. Desde 1980, con el liderazgo de Jörg Haider, el FPÖ comenzó a ganar popularidad debido al giro ideológico y a la atracción de sectores descontentos con los partidos tradicionales austriacos, lo que llevó a la primera gran victoria del partido en 1999.

El FPÖ se ha caracterizado por ser un partido anti-establishment, euroescéptico, antiinmigración, que pregona las buenas relaciones con Rusia por lo que actualmente se opone a las sanciones contra Moscú, y el rechazo a involucrar a Austria en el conflicto ucraniano y en las tensiones globales.

En su programa electoral, el FPÖ, resalta la importancia de la neutralidad, independencia de las organizaciones supranacionales, autarquía económica y libertad individual en asociación a un nacionalismo soberano.

“Los ciudadanos no pueden ser libres si el Estado en el que viven no lo es. Por ello, restableceremos la soberanía y la neutralidad y devolveremos a Austria su libertad. Nuestro país no es una sucursal de la organización de nadie”.

Herbert Kickl, Presidente del FPÖ.

El extenso programa electoral presentado por el FPÖ explica que para que Austria sea libre debe garantizarse tres elementos esenciales de la condición de Estado, que hoy se encuentran en peligro porque:

  • “El gobierno del Estado ya no tiene su sede en Viena, sino en Bruselas; 
  • El espacio del Estado está siendo eliminado por el principio de facto de las fronteras abiertas; 
  • La población del Estado está siendo sustituida gradualmente por una inmigración masiva permanente”.

“La libertad del Estado corre peligro si la República de Austria cede competencias decisivas a organizaciones internacionales o supranacionales. Esto incluye la sumisión a tribunales internacionales, así como una «integración» excesiva por parte de la UE o la aceptación de intervenciones masivas por parte de la Organización Mundial de la Salud. Si las leyes y normas decisivas para la República de Austria y sus ciudadanos dejan de crearse en Austria y sólo por austriacos, tanto la pregunta «¿Cómo debo comportarme como ciudadano?» como la pregunta «¿Cómo debe comportarse Austria?» dejarán de tener respuesta en nosotros mismos”, reza el documento.

Un punto sumamente importante en lo que se refiere a política exterior propuesto por el FPÖ es su posición respecto a la OTAN. En el documento, el FPÖ propone que para recuperar la soberanía de Austria, el país “debe permanecer neutral” con una “política de paz activa en lugar de acercamiento a la OTAN”, incluso asegura la “no pertenencia a la OTAN” y la “no participación en el Escudo Celeste (Sky Shield)”, memorando de entendimiento bajo el liderazgo alemán firmado en 2023 que establece la adquisición conjunta de equipos de defensa aérea y misiles por parte de las naciones europeas.

“Compromiso con la neutralidad, la diplomacia y el diálogo. Razón en lugar de guerra”. En sentido el FPÖ dice “no al Fondo Europeo de Apoyo a la Paz”, mecanismo de financiación de la guerra para Ucrania, y si a una “financiación adecuada y a largo plazo de unas fuerzas armadas eficientes”.

Otro punto importante que se destaca en el documento incluye lo que el FPÖ tituló como “defensa de nuestros valores occidentales – lucha contra el Islam político”. 

“El Islam político ataca la democracia y combate los valores de la Ilustración. Es veneno para una sociedad libre y debe ser prohibido”, dice el documento.

No obstante, “los valores occidentales” no parecen incluir o estar alineados a los mismos “valores occidentales europeos y globalistas” sobre la diversidad de género. En este sentido el documento expresa un rotundo “no al dinero de los impuestos para la promoción de experimentos «queer» y «woke». Stop a la sexualización precoz”.

El renovado avance del FPÖ ya se advirtió en las elecciones al Parlamento Europeo en junio de este año, en donde el Partido de la Libertad obtuvo el primer resultado histórico encabezando los comicios a nivel nacional con un 27% de los votos. Consiguió 6 escaños para el Parlamento Europeo, mientras que el ÖVP quedó en segundo lugar con 5 escaños y un 23% de los votos; el SPÖ se encuentra en tercer lugar, por una escueta diferencia con el ÖVP, y obtuvo también 5 escaños. Por último, tanto Los Verdes como Neos se quedaron con 2 escaños cada uno.

Fuente: legrandcontinent

El FPÖ forma parte del recién formado eurogrupo Patriotas por Europa. Su lema es “Make Europe Great Again” (Hacer a Europa grande de nuevo), ¿suena conocido?.

Patriotas por Europa es el nuevo grupo político europeo que nació tras los resultados de las últimas elecciones al Parlamento Europeo y reúne como principales líderes a Marine Le Pen de Francia, Viktor Orbán de Hungría, Santiago Abascal de Vox España, Mateo Salvini de Lega Italia, el partido Chega de Portugal, el ex primer ministro checo Andrej Babiš de ANO, el ex ministro del Interior de Austria Herbert Kickl y el eurodiputado Harald Vilimsky (FPO) entre otras fuerzas.

En el el “Manifiesto Patriótico por un Futuro Europeo”, propuesto por Patriotas por Europa, se lee: 

“Las elecciones al nuevo Parlamento Europeo celebradas en junio tuvieron, por tanto, una importancia generacional y existencial. La línea divisoria política ya no se sitúa entre conservadores y liberales o entre derecha e izquierda, sino entre centralistas que pregonan un nuevo “superestado” europeo y patriotas y soberanistas que luchan por preservar y fortalecer la Europa de las Naciones que tanto apreciamos. Sólo mediante la victoria y la cooperación de los partidos patrióticos y soberanistas de todo el continente podremos garantizar la herencia de nuestros hijos”.

Los resultados de las elecciones al Parlamento Europeo, y los distintos y particulares casos de victorias regionales y parlamentarias nacionales en algunos países europeos, advierte el desgaste y descontento de la ciudadanía europea ante los partidos tradicionales arraigados al tipo de proyecto europeísta y globalista que somete a Europa a los designios y directrices de Estados Unidos. Los votantes de Reagrupación Nacional en Francia (Marine Le Pen), de AfD y BSW en Alemania, de Vox en España, de Fidesz (Orbán) en Hungría, vislumbran no sólo el hartazgo del proyecto de las élites globalistas en Bruselas sino también el apoyo a un proyecto que incluya el nacionalismo y soberanismo, que no se enfoque en el belicismo de la OTAN, que no siga financiando y escalando la guerra en Ucrania, que revise el proyecto estratégico de Europa.

A pesar de esta nueva ola de ascensos de partidos nacionalistas y conservadores, los resultados de las elecciones europeas también afianzaron las estructuras otanistas y globalistas luego de conocerse a las nuevas (viejas) autoridades en las primeras sesiones al Parlamento Europeo. Ursula von der Leyen ha sido releegida como presidenta de la Comisión Europea; Roberta Metsola releegida como presidenta del Parlamento Europeo; Kaja Kallas, quien ocupaba el cargo de primera ministra estonia, asumió como Alta Representante de la Unión Europea para Política Exterior y Seguridad Común; y el ex primer ministro de Países Bajos, Mark Rutte asumirá como Secretario General de la OTAN.

Este equipo es altamente belicista y abiertamente antiruso, principales características que sólo anuncian la continuidad del modelo globalista que vienen sosteniendo en las estructuras de las élites europeas, basadas especialmente en la guerra en Ucrania.

*Micaela Constantini, periodista y parte del Equipo de PIA Global.

Foto de portada: El líder del Partido de la Libertad (FPÖ) de Austria, Herbert Kickl, pronuncia un discurso en Viena durante la campaña electoral para las elecciones al Parlamento Europeo en junio. Foto de Elisabeth Mandl vía Reuters

Acerca del autor

Micaela Constantini

Comunicadora Social, periodista. Miembro del equipo de investigación de PIA Global. Investigando cibergeopolítica y virtualidad. Feminista, antiimperialista y autodidacta. Nuestra americana Trabajo con redes sociales, edición de video y comunicación digital.

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