Algunos países podrán sostener su nivel de crecimiento. Otros se mantendrán en virtual estancamiento, a pesar de que los índices sean positivos. Otros continuarán su retracción. El promedio mundial de expansión económica rondaría el 3.5%.
Estiman que Argentina vivirá la retracción de su economía en un -0.8%.
Por su parte, Siria parece seguir rompiendo los pronósticos oscuros. Primero, con una sociedad que ha podido sostener un gobierno y la unidad territorial ante la guerra internacional, ahora, partiendo de una situación de grandes dificultades, proyecta un desarrollo económico importante, con una expansión económica de 9.9%.
Las dos economías más grandes del mundo seguirán creciendo, aunque por debajo de las proyecciones estimadas por sus gobiernos.
China crecería en 2019 al 6.3% mientras Estados Unidos lo haría a un 2.3% cuando los cálculos del gobierno indican un 2.9%.
La llamada guerra comercial entre ambas potencias, el desempeño interno de la economía norteamericana y la lucha de China por controlar su deuda serán factores que podrían determinar lo que ocurra en definitiva.
El panorama para Europa presenta una imagen más oscura. Gran Bretaña enfrenta la salida de la Unión Europea con el Brexit. Una situación hasta el momento que no ofrece panoramas con claridad. Se estima un crecimiento del 1.5%.
Francia, que termina el año 2018 con el histórico conflicto de los Chalecos Amarillos espera un panorama similar.
Italia se estanca con un posible crecimiento de 0.4% ocupando el séptimo peor lugar en los desempeños económicos de Europa para el año que comienza.
Por otro lado, sobresale el posible desempeño de Vietnam con una expansión económica de 6.7%, un país de 92 millones de habitantes. Bangladesh, de 168 millones de habitantes, se calcula que podría crecer al 7.9%. Y la India, con 1210 millones de habitantes, podría crecer al 7.4%
