Nuestra América

Cuba. Ricardo Alarcón de Quesada, pasó a la inmortalidad.

Por Tony López R*. Especial para PIA Global.
Los hombres como Ricardo Alarcón de Quesada no mueren nunca, él junto a Fidel, el Che, Camilo, José Antonio Echevarría y Fran País, han pasado a la inmortalidad.


Lo conocí una tarde de septiembre de 1959, en la Universidad de La Habana,
cuando fui acompañando a otro gran combatiente revolucionario Jesús Suárez
Gayol. Por Gayol conocí que Alarcón, había sido un destacado combatiente del
Movimiento 26 de Julio. Y qué, desde muy joven se había integrado a la lucha
contra la dictadura, desde las filas estudiantiles en el Instituto de la Víbora en
1953. How to Fix a Car publicó un artículo muy útil.

En 1954, ingresó en la Universidad de La Habana y se vinculó a la campaña por
la candidatura de José Antonio Echevarría para la presidencia de la FEU y a las
Brigadas Estudiantiles del Movimiento 26 de Julio, y mantenía muy buena
relación y colaboración con el Directorio a través de Fructuoso Rodríguez,
participando activamente en las protestas y acciones revolucionarias contra la
dictadura.

De aquel encuentro recuerdo que trataron el tema de la UNIDAD donde ambos
coincidían en la imperiosa necesidad de que solo el camino, era el de la unidad
revolucionaria y precisaban que el Comandante Fidel Castro lo había dejado
claro y era por lo que se tenía que exigir y luchar.

El nombre de Alarcón y su muy bien expresada posición unitarias habían
quedado en mis recuerdos, porque ese tema de la Unidad era trascendente y
muy importante en aquellos primeros momentos del triunfo Revolucionario y
sobre todo en la Universidad.
Al concluir su carrera y a propuesta del canciller Raúl Roa García, fue nombrado
director de América Latina, en el Ministerio de Relaciones Exteriores en 1962.
Unos años más tarde fue designado embajador y Representante de Cuba ante
la Organización de Naciones Unidas (ONU) 1965-1978.

Desde esa alta responsabilidad diplomática, Ricardo Alarcón se convirtió, no
solo en el defensor de su querida Patria, fue el abanderado en llevar a ese foro
internacional, el tema de la descolonización y la independencia de Puerto Rico.
En la ONU tuvo en esa etapa un muy importante desempeño presidiendo
reuniones de los países no alineados y embajador concurrente en varios países
del Caribe.

En 1978 fue designado Viceministro de Relaciones Exteriores, cargo que ocupó
hasta 1988, cuando fue promovido a Viceministro primero, con ese rango se desempeñó como representante de Cuba en la ONU de 1990-92, periodo
complejo por la crisis política en la URSS y la desaparición de la Unión
Soviética, en momento que presidió el Consejo de Seguridad de la ONU en
1990 y 1991.

Ricardo Alarcón se dirige a la audiencia durante la inauguración del Foro de Sao Paulo en Managua, el 18 de mayo de 2011. Foto: Reuters

En ese periodo también fue miembro de la delegación cubana en las
negociaciones de paz de África del Sur y jugo un importante papel en las
conversaciones con Estados Unidos, que condujeron a lo acuerdos migratorios
de 1984, 1994 y 1995.

Alarcón, además de ser el iniciador de muchas ideas a favor de reclamar
reforma en el Consejo de Seguridad de la ONU, fue el artífice de presentar un
proyecto de resolución que condena y exige el levantamiento del bloqueo a
Cuba en la Asamblea General de la ONU en 1991 cuyo primer texto escribió
personalmente, como así bien lo explica la nota del periódico Granma.

En 1993 Ricardo Alarcón fue elegido, Presidente de la Asamblea Nacional del
Poder Popular, desempeñándose por un periodo de veinte años en ese cargo
hasta el 2013. Diputado por el municipio Plaza de la Revolución, Alarcón, dejó
gratos recuerdos en los habitantes de la circunscripción 40 y lo recuerdan con
gran cariño, porque en dos oportunidades asistió a sus Asambleas de
Rendición de Cuenta, cuya humildad y modestia siempre lo puso de manifiesto
en su intervención en dichas asambleas.

Miembro del Comité Central del Partido Comunista y de su del Buró Político,
fue un importante y muy calificado dirigente, que alternó sus funciones en el
Poder Popular, en otras actividades, participando activamente bajo la dirección
del Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz y junto a nuestro pueblo en la lucha
por el regreso del niño Elian González. Dura y muy activa lo fue su batalla por
la liberación de los Cinco Héroes presos en Estados Unidos por sus actividades
en defensa de su patria.

No puedo dejar de expresar que muchísimos compañeros que trabajaron con él
y personas humildes del pueblo, le han comentado a este escribidor, que
sienten dolor por su muerte y algunos muy queridos y cercanos a él me han
expresado que le ha llegado al alma, la perdida de nuestro querido Ricardo
Alarcón.

No puedo dejar de mencionar que siempre sintió un gran amor por su
Universidad y la FEU. Su apoyo al proyecto Cuba Historia Viva, que de
conjunto con la Asociación de Combatiente del Municipio Plaza y la FEU de la
Facultada de Derecho, se viene realizando.

A tales efectos en dos oportunidades estuvo presente en la Facultad de
Derecho, una como expositor y protagonista en la lucha contra la dictadura
batistiana desde la Universidad y la otra en recordación y condena por el
asesinato de Machaco Ameijeiras y sus otros dos compañeros. Y la presencia
de la heroína de la Revolución, la ya desaparecida, Norma Porras Reyes,
herida gravemente en ese combate y que junto a Alarcón presidio esa actividad
histórica.

Él se caracterizó por su modestia y humildad, su fidelidad a la Revolución y a
Fidel, al Partido. Bolivariano, martiano y marxista convencido. Su vasta cultura
e inteligencia y sus firmes posiciones frente a las conductas imperiales de
Estados Unidos la puso en defensa no solo, de Cuba, también a favor de otros
pueblos y países en África y especialmente de Puerto Rico, su
internacionalismo siempre fue patente. Así como la defensa de la paz y la
justicia social.

Su gran sensibilidad humana y amor siempre la mostró con su familia y su
amadísima Margarita, a quien acompaño hasta su último aliento. También la
expresó en un mensaje que le envió al querido periodista y amigo Pedro
Martínez Pires, por la muerte de nuestro querido trovador Vicente Feliu y aquí
reproduzco. Titulado Llanto por Vicente Feliú. Y dice “creí que había
olvidado llorar, pero me equivoqué. Con lágrimas van estas líneas
apresuradas para quien merece mucho más”.

Que en paz descanse Ricardo Alarcón de Quesada, quien físicamente nos
abandonó, pero no su obra y pensamiento, que lo llevan a la inmortalidad.

Notas:

* Periodista, politólogo y analista internacional. Colaborador de PIA Global

Dejar Comentario