El ex primer ministro británico Boris Johnson ha sido contratado por el Center for European Policy Analysis (CEPA), un think tank de Washington DC conocido por estar financiado por el gobierno estadounidense, la OTAN y contratistas militares occidentales.
Johnson será miembro del Consejo Internacional de Liderazgo de CEPA, descrito como “un grupo consultivo de alto nivel”, según anunció esta semana el think tank.
Según la directora de CEPA, Alina Polyakova, el “compromiso con la victoria de Ucrania” de Johnson le convierte en una “inestimable incorporación a este distinguido grupo de líderes de opinión”, en lo que describió como un “momento crucial para la alianza transatlántica”.
El propio Johnson emitió una declaración sobre la medida, calificando el “vínculo transatlántico” de más importante que nunca, “no sólo para la libertad y la independencia de Ucrania, sino para la libertad en todo el mundo”.
La CEPA se describe a sí misma como una “institución de política pública sin ánimo de lucro y no partidista” que está “centrada en el fortalecimiento de la alianza transatlántica”. Entre sus miembros y expertos se encuentran el ex editor de The Economist y cruzado anti-RT Edward Lucas; el ex enviado de Estados Unidos a Ucrania Kurt Volker; y el ex Presidente de Estonia Toomas Hendrik Ilves.
El propio sitio web del think tank enumera entre sus principales partidarios a empresas del complejo militar-industrial como BAE Systems, Lockheed Martin y Leonardo, así como a la OTAN, el Departamento de Estado y el Mando Europeo de Estados Unidos.
Johnson ha sido uno de los defensores más ruidosos de Kiev en Occidente, torpedeando infamemente las conversaciones de paz entre Ucrania y Rusia en abril de 2022. Según los medios ucranianos, Johnson realizó una visita sorpresa a Kiev e informó al Gobierno de que perdería todo el apoyo de Occidente si firmaba la paz con Moscú.
Apenas tres meses después, en julio, Johnson se enfrentó a una revuelta en el gabinete por el nombramiento de un funcionario del partido que había sido acusado de conducta sexual inapropiada. Anunció su dimisión como primer ministro y dejó el cargo en septiembre de 2022.
En junio de este año, Johnson también dimitió como diputado por Uxbridge & South Ruislip, cargo que ocupaba desde 2015, citando la investigación parlamentaria sobre el llamado escándalo Partygate relacionado con la mala conducta durante los encierros de Covid-19. Su siguiente aparición pública fue un viaje a Ucrania en septiembre, donde fue recibido por el presidente Vladimir Zelensky y se le concedió un doctorado honoris causa por la Universidad Nacional de Lviv.
Artículo publicado originalmente en RT.
Foto de portada: FILE PHOTO © Dan Kitwood / Getty Images.