
Assad dijo: “Sabemos que la gran mayoría de los sirios que viven en las áreas ocupadas son verdaderos patriotas y apoyan al gobierno.”
Sin hacer una referencia directa a los kurdos sirios, agregó: “Les digo a los grupos que confían en EEUU que los estadounidenses nunca los apoyarán. El único apoyo para vosotros es el del gobierno y el Ejército Árabe de Siria, mientras que EE.UU. os considera solo como una carta de negociación. Si rechazáis el apoyo que vuestro país le ofrece, los estadounidenses os venderán a los otomanos. El Ejército es la única institución capaz de apoyar a ciertos grupos del noreste de Siria que no quiero nombrar aquí.”
Agregó que la guerra está lejos de terminar en Siria: “La patria lucha en frentes militares, económicos (sanciones y embargos), psicológicos y contra la corrupción. Sin la voluntad del pueblo sirio, sin la resistencia del Ejército y la ayuda de los países aliados y amigos, Damasco no podría registrar tan grandes victorias.”
La inquebrantable voluntad de la Resistencia
En otra parte de su discurso, el presidente sirio dijo que el proyecto de fragmentación del territorio sirio no era nuevo y no se detenía en las fronteras del Estado sirio.
“Nuestros enemigos no aprenden de sus errores. La realidad siria y la situación política internacional han evolucionado, pero dos factores permanecen sin cambios: primero, el plan hegemónico de EE.UU. y Occidente; en segundo lugar, la inquebrantable voluntad de la resistencia del pueblo sirio, que ha frustrado los planes occidentales”, dijo Assad.