El Boletín diario sobre la situación en el terreno n°46 consecutivo del 21 de noviembre de 2023 enviado a las distintas embajadas por parte de la Autoridad Palestina, detalla más de 12.700 palestinos asesinados, con al menos 5.840 niños, y 30.000 heridos en la Franja de Gaza, mientras que, en Cisjordania, incluida Jerusalén, registran 218 asesinados y más de 2.850 heridos por el asedio que las Fuerzas de Defensa Israelíes (FDI) les propiciaron a los palestinos desde el 7 de octubre.
Sin embargo, al día siguiente, 22 de noviembre, el Boletín diario sobre la situación en el terreno n°47 de la Autoridad Palestina ratificaba un incremento en las bajas: “la agresión de la ocupación israelí contra nuestro pueblo de Gaza y Cisjordania, incluida Jerusalén, ha asesinado a 14.325 personas, además de herir a al menos 35.900 desde el 7 de octubre”; a lo que también agregó palabras del Secretario General Adjunto de Asuntos Humanitarios y Coordinador Socorro de Emergencia de la ONU, Martin Griffiths: (..) Esta gente dejó de contar el número de niños asesinados después de que alcanzaron los 4.500, nadie va a la escuela en Gaza, nadie sabe cuál es su futuro en Gaza, los hospitales se han convertido en lugares de guerra y no de sanación. No creo haber visto nunca nada como esto antes. Esto es una carnicería completa y absolutamente.
La narrativa diaria de lo que se emite y transmite día a día desde Gaza y la recopilación multimedia de los sucesos allí, es gracias a las y los periodistas situados en el terreno donde las fuerzas de ocupación colonas no cesan de bombardear a la población civil; al menos 60 profesionales de prensa murieron a causa de bombardeos que pretenden silenciar la verdad.
Frente a la importancia de la certificación pública sobre los hechos ocurridos desde el 7 de octubre, se denota con suma importancia la vida periodística de corresponsales de guerra y periodistas que producen coberturas en tiempo real con sus propios cuerpos, manteniendo viva la técnica esencialmente humana de transmitir al mundo lo que ocurre en la realidad social que padecen los gazatíes respecto a sus vidas, bienes edilicios, escuelas, hospitales y mezquitas que continúan siendo destruidas por los sistemáticos bombardeos que propician las fuerzas armadas de Israel aún después de un mes y medio de iniciado el conflicto bélico con la resistencia palestina.
Los colegas trabajan codo a codo con sus pares de la población en Gaza, y se hace indispensable nuestra solidaridad recíproca ya que el asedio político sionista y sus bombas arruinaron lo más elemental de la Franja dejándola sin electricidad y en pésimas condiciones de infraestructura, de manera que lo inadecuado de la situación dificulta aún más el uso de internet y las cargas eléctricas usuales en los equipos de trabajo periodístico de palestinos sobre el terreno de conflicto se vuelven también complejo mientras que entra en vigor una tregua humanitaria por cuatro días entre Israel y Hamas.
En Líbano, el canal panárabe Al Mayadeen es quien trabaja sobre el terreno de los acontecimientos con corresponsales en el sur libanés, tanto como en la Franja de Gaza y Cisjordania para dar cobertura sobre lo que ocurre cada día entre su geografía aledaña por el conflicto bélico israelo-palestino. Recientemente, la cadena de comunicación notificó que dos de sus periodistas y un colaborador murieron por un ataque “directo e intencional” de Israel. Las tres personas se encontraban trabajando para Al Mayadeen en la zona sur de Líbano, fronteriza con el norte de Israel.
El terrorismo sionista aplica indiscriminadamente métodos de eliminación y muerte sistemática a quien consideró su enemigo público: el pueblo palestino. Pero desde la incursión de Movimiento de Resistencia Islámica (HAMAS) en el sur de la ocupación colona, el 7 de octubre, el Primer Ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, respondió repitiendo el esquema de convencer a distintos países para que apoyen de manera oficial la determinación de designar internacionalmente a HAMAS como organización terrorista para justificar y habilitar su exterminio en clave de “guerra” sin consideración alguna sobre las consecuencias mortales que terminó ocasionando a la población civil de la Franja de Gaza. Por su parte, la resistencia palestina y sus distintas facciones armadas prosiguen por la defensa de su territorio desde 1948; cuando los israelíes se auto-asignaron su independencia y crearon el Estado de Israel, logrado por la expulsión territorial de palestinos en lo que se conoce como la Nakba; detrimento de la población árabe originaria de sus territorios palestinos ancestrales. Aun así, Palestina existe.
Es por eso que PIA Global expresa su solidaridad con los colegas periodistas y trabajadores de prensa asesinados por el régimen sionista de Israel.
*Favio Vidal, periodista y Técnico Superior en Comunicación Popular.