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El comercio entre Rusia y China: Factores y límites del crecimiento

Por Anastasia Stepanova*- Durante mucho tiempo se ha producido un proceso de reorientación de los flujos comerciales de Rusia de Occidente a Oriente. El mercado asiático es enorme, tiene un gran potencial de crecimiento y su población tiene un alto poder adquisitivo. La cooperación comercial con los países BRICS, la ASEAN, los países árabes, así como con África y América Latina se está ampliando.

En 2018, por primera vez en la historia, el comercio entre Rusia y China superó el límite psicológicamente importante de 100.000 millones de dólares al año. El presidente ruso, Vladímir Putin, y el presidente chino, Xi Jinping, fijaron entonces un nuevo y ambicioso objetivo: aumentar el comercio entre ambos países hasta los 200.000 millones de dólares en 2024. Hay razones para creer que este objetivo se alcanzará con éxito. En pocos años, a partir de 2023, se ha producido una expansión cualitativa del comercio ruso-chino de bienes y servicios. En primer lugar, este crecimiento se debe al desarrollo de proyectos conjuntos en el sector energético, la industria, el sector agrícola y la alta tecnología.

El desarrollo de las relaciones económicas entre Rusia y China es cada vez más importante para ambos países. Desde finales de 2022, China es el primer socio comercial de Rusia. El comercio entre Rusia y China ascendió a 190.270 millones de dólares en 2022, un 29,3% más. En 2021, el volumen de comercio entre Rusia y China ascendió a 146.887 millones de dólares, un 35,8% más que en 2020. Por lo tanto, en los últimos años, incluso a pesar de las restricciones causadas por la pandemia de coronavirus en 2020-2022, hemos visto un crecimiento constante y rápido en el comercio entre los dos países.

Lo mismo puede decirse tanto de las importaciones como de las exportaciones. Según la Administración General de Aduanas de China, en 2022 las importaciones procedentes de Rusia ascendieron a 114.150 millones de dólares, lo que representa un aumento porcentual del 43,4% en comparación con 2021. Al mismo tiempo, las exportaciones del país a Rusia aumentaron a 76.120 millones de dólares, un 12,8%.

Cuadro 1.

Volumen de negocios comerciales entre Rusia y China, 2013-2022

Durante mucho tiempo ha habido un proceso de reorientación de los flujos comerciales de Occidente a Oriente. Este proceso se ha acelerado desde 2014, tras la entrada de la República de Crimea en la Federación Rusa, pero desde el 24 de febrero de 2022, con el inicio de la operación militar especial para proteger a los residentes de Donbass, el giro hacia el Este se ha vuelto inevitable. Al mismo tiempo, el mercado asiático es enorme; tiene un gran potencial de crecimiento y la población tiene un alto poder adquisitivo. La cooperación comercial con los países BRICS, la ASEAN, los países árabes, así como con África y América Latina, está en expansión.

Rusia y China mantienen fuertes lazos comerciales que se han estrechado aún más en los últimos años. China suministra casi todo tipo de productos a Rusia, incluidos no sólo alimentos, sino también equipos, teléfonos móviles y bienes producidos en serie. China también aumenta constantemente la exportación de productos electrónicos, de ingeniería, muebles, juguetes, textiles, ropa y calzado. Entre los productos agrícolas, China suministra a Rusia frutas y verduras (tomates, pepinos, berenjenas, ajos, chalotas, manzanas, cítricos), así como pescado y marisco (esturión, trucha, anguila, tilapia, cócteles de marisco y gambas), además de arroz, cacahuetes, etc. China también suministra productos agroquímicos, suplementos vitamínicos y piensos a gran escala para la industria ganadera.

En consecuencia, en relación con la actual política de sanciones de Occidente contra Rusia, se han ampliado las cadenas de sustitución de importaciones en diversas industrias procedentes de los socios orientales de Moscú, principalmente de China, que ha asumido una posición de liderazgo en las exportaciones a Rusia. Como ya se ha señalado, esto se aplica a máquinas, equipos, dispositivos y mucho más. El sector del automóvil se desarrolla con especial rapidez en 2022-2023. Antes de la pandemia y del inicio de la operación militar especial en Ucrania, los automovilistas rusos preferían los coches europeos, así como los fabricados en Estados Unidos, Japón y Corea del Sur. Sin embargo, las empresas europeas, estadounidenses, surcoreanas y japonesas no han reanudado sus actividades en Rusia en el mismo volumen. Las razones son, entre otras, los problemas logísticos, los tipos de cambio, la complejidad de los acuerdos mutuos, los problemas con la compra de piezas de recambio, así como la situación geopolítica y las sanciones. Algunas empresas, como General Motors y Renault, han abandonado por completo el mercado ruso.

Históricamente, los coches nacionales han tenido una demanda constante en Rusia. La demanda de coches nacionales se ha mantenido y ha mejorado, y las marcas chinas han aparecido en el mercado para sustituir a las europeas.

Así pues, este nicho está siendo ocupado activamente por marcas nacionales y chinas. Al mismo tiempo, Chery, Omoda, Exeed, Jac Motors, FAW, Haval, Geely, GAC y Changan se convirtieron en las marcas chinas más populares en Rusia en 2023. Con el rápido desarrollo de la tecnología, la apuesta por el desarrollo ecológico, la construcción de infraestructuras adecuadas y la aparición de estaciones de servicio, el mercado de los vehículos eléctricos se está desarrollando a un ritmo vertiginoso. Ya hoy en día en el mercado ruso se pueden comprar coches eléctricos de diferentes categorías de precios, que son de alta calidad y presentan un diseño moderno. Cabe señalar que la industria automovilística rusa también está desarrollando activamente coches eléctricos como el Moskvich, el Evolute, el E-Neva y otras marcas. En este sentido, es especialmente importante el desarrollo de la producción conjunta ruso-china en la industria automovilística en su conjunto, en lugar de limitarse a las redes de concesionarios.

Rusia suministra a China productos energéticos – petróleo, gas, productos refinados, agroalimentarios e industriales. Los subproductos rusos tienen una gran demanda en China – principalmente patas y muslos de pollo, pescado y marisco, miel, alfalfa, confitería, aceite de girasol y semillas y piñones.

Por desgracia, a pesar de un largo proceso de negociación, la exportación de carne de cerdo rusa a China sigue estando prohibida. Rusia es también el mayor proveedor de madera a China. En relación con la reforma de la legislación en el ámbito de la transformación de la madera, desde el 1 de enero de 2022, la exportación de madera en rollo (coníferas, así como maderas duras valiosas como el fresno, el haya y el roble) ha disminuido significativamente. Según los resultados de fin de año de 2022, Rusia había reducido la exportación de madera en rollo en un 71% hasta 306 millones de dólares; el volumen de exportación ascendió a 3 millones de metros cúbicos.

Las exportaciones más importantes de Rusia a China son petróleo, gas, acero y carbón. El volumen de compras a los socios chinos crece constantemente; sin embargo, hay algunos matices. Así, debido a las sanciones y a la negativa de las empresas europeas a comprar materias primas rusas, Rusia vende materias primas con importantes descuentos. Los chinos compran acero ruso a precios rebajados. El aumento de las ventas de carbón también se ha producido a precios reducidos.

Las empresas chinas, incluidas Sinopec, Zhenhua Oil y otras, compran actualmente petróleo ruso con descuento. Sin embargo, en 2023 Rusia se convirtió en el mayor proveedor de petróleo de China. Arabia Saudí ocupa el segundo lugar e Irak el tercero. En 2022, Rusia fue el segundo mayor proveedor de petróleo de China, sólo por detrás de Arabia Saudí. En 2022, Rusia suministró 86,2 millones de toneladas de petróleo a China.

El desarrollo del suministro de gas también es una prioridad para la cooperación. Esto se aplica principalmente a la dirección oriental. A pesar de la negativa de las empresas occidentales a cooperar en el sector del petróleo y el gas, Gazprom sigue trabajando en los yacimientos marinos de la isla de Sajalín, incluidos los de Kirinskoye y Yuzhno-Kirinskoye. El contratista nacional de estos yacimientos es Rusgazshelf, también con la participación del AkademikChersky, un buque ruso de tendido de tuberías. A partir de 2025, está previsto iniciar la producción de gas en el yacimiento de Yuzhno-Kirinskoye como parte del proyecto Sajalín-3. Se prevé producir hasta 5.000 millones de metros cúbicos anuales en esta instalación.

El suministro de gas licuado a China también se está llevando a cabo activamente en el marco del proyecto Yamal LNG.

Ya en 2014, la empresa rusa Gazprom y la china CNPC firmaron un acuerdo sobre la construcción del gasoducto Energía de Siberia y el suministro de gas de Rusia a China a través de él. El suministro de gas a través del gasoducto Energía de Siberia comenzó en diciembre de 2019. Después de 2024, se planea alcanzar la capacidad de diseño de 38 mil millones de metros cúbicos anuales. En el marco del proyecto, se están desarrollando los yacimientos de Chayandinskoye, en Yakutia, y Kovykta, en la región de Irkutsk.

Así pues, uno de los incentivos más importantes para el crecimiento del comercio en los próximos años será el aumento de los proyectos ruso-chinos de gas y petróleo.

Rusia y China refuerzan constantemente su cooperación en muchos ámbitos, incluido el comercial. Para Rusia, China se ha convertido en un socio comercial de primer orden y en 2022, como ya se ha señalado, el volumen de negocios comerciales ascendió a 190.200 millones de dólares.

Debe prestarse especial atención al hecho de que, a pesar del alto crecimiento del comercio entre Rusia y China, el volumen de inversión mutua se encuentra en un nivel extremadamente bajo. China prácticamente no invierte en Rusia, en comparación con los países de Asia Central, donde se ha invertido mucho.

Las cuestiones de inversión no son objeto de este examen, pero también requieren mucha atención.

A finales de 2022, según los datos del Servicio Federal de Aduanas (SFA), los cinco principales socios comerciales de Rusia eran China (+28%), Turquía (+84%), Países Bajos (-0,1%), Alemania (-23%) y Bielorrusia (+10).Analizando la estructura del comercio entre Rusia y China, podemos comparar el comercio de China con el de otros países.

En particular, para China, los países de la ASEAN, en conjunto, fueron los mayores socios comerciales en 2022. A continuación se muestra un gráfico de los principales socios comerciales de China en 2022 .

En consecuencia, el comercio con la ASEAN ascendió a 975.300 millones de USD, seguida de la UE (847.300 millones de USD), Estados Unidos (759.400 millones de USD), Corea del Sur (362.200 millones de USD) y Japón (357.400 millones de USD). Rusia ocupa el décimo lugar en la lista de socios comerciales de China. No obstante, el rápido crecimiento del comercio entre ambos países indica una tendencia positiva en este sentido.

Un factor importante que contribuirá al aumento del comercio entre Rusia y China es la mejora del sistema de liquidaciones mutuas en monedas nacionales. En este sentido, el nuevo rechazo a gran escala del dólar y el euro en favor de las monedas nacionales en las liquidaciones mutuas, la simplificación de las liquidaciones bancarias y de productos básicos entre países, y el desarrollo del rublo digital y el yuan digital contribuirán a un nuevo aumento sistemático de los flujos comerciales.

La solución de los problemas logísticos también es sumamente relevante: se trata de la modernización de los corredores de transporte existentes, la construcción de otros nuevos en el marco de la Nueva Ruta de la Seda y la cooperación en materia de transporte entre países, así como de una mayor digitalización y modernización del transporte y los servicios de transporte.

La visita de Xi Jinping a Rusia en marzo de 2023 -la primera desde su reelección como Presidente de la RPC y sus fructíferas negociaciones con el Presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin- se considera con razón un hito. En él se esbozaron nuevos vectores de cooperación y asociaciones estratégicas a largo plazo entre ambos Estados. También hay grandes perspectivas en el sector comercial.

Así, teniendo en cuenta el cambio en la estructura regional de las operaciones de importación y exportación y el pivote hacia el Este, la diferenciación de los flujos de mercancías (mediante el mantenimiento y ulterior aumento de la cooperación mutua entre Rusia y China en muchos ámbitos) y la estabilidad de los sistemas políticos de ambos países, en los próximos años se prevé una clara tendencia al alza del volumen de negocios hasta alcanzar los 300.000 millones de dólares.

Existe un gran potencial para Rusia en el desarrollo de las operaciones de exportación e importación, tanto dentro de la Unión Económica Euroasiática como con los países de Asia Central, los países árabes, la ASEAN, América Latina, África y otros. Al mismo tiempo, a la hora de desarrollar el comercio con China y otros países asiáticos, es necesario tener en cuenta las cuestiones de las barreras arancelarias y no arancelarias, no sólo para expandir las mercancías y materias primas rusas en el extranjero, sino viceversa, aumentar el mercado nacional y crear condiciones favorables para las empresas nacionales y extranjeras.

Al mismo tiempo, un análisis detallado del volumen de comercio que se desarrolló anteriormente entre Rusia y la Unión Europea y alcanzó los 400.000 millones de dólares en los mejores tiempos, su reorientación hacia el Este, así como un análisis de la estructura del volumen de comercio entre Rusia y China y su rápido crecimiento en los últimos 5 años, ayudarán a identificar nichos para aumentar el comercio entre Rusia y China hasta los 400.000 millones de dólares a largo plazo.

*Anastasia Stepanova es Jefa del Comité de Cooperación con China y los BRICS, Asociación Empresarial Euroasiática (EAAB).

Artículo publicado originalmente en el Club de Debate Valdai.

Foto de portada: Reuters

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