Europa

Dinamarca espía a lideres europeos para Estados Unidos

Por Ron Ridenour*
El 30 de mayo, el medio Danmark Radio reveló el espionaje sistemático que Dinamarca realiza a los líderes europeos de los países más cercanos; Alemania, Francia, Noruega y Suecia.

Los aliados de la UE / OTAN han sido espiados para Estados Unidos y por el Servicio de Inteligencia danés (Forsvarets Efterretningstjeneste –FE), sin conocimiento del parlamento y, quizás, incluso del propio gobierno de Dinamarca.

Los líderes de Francia, Noruega y Suecia han solicitado una investigación completa que ponga fin de un comportamiento calificado como “grotesco”.  Todos han vuelto ha repudiar el espionaje a Ángela Merkel que Edward Snowden denunció ya el año 2014. En esa oportunidad Estados Unidos intervino -en conjunto con los servicios de inteligencia daneses (FE)- las llamadas telefónicas privadas de la canciller alemana bajo un código denominado Operación Dunhammer (1)

Además, de espiar a sus vecinos, la FE ha estado espiando ilegal y sistemáticamente a sus propios ciudadanos en beneficio económico y político de los Estados Unidos. Esto no tiene nada que ver con espiar a los «enemigos» (supuestamente Rusia, China, Irán, et.).

La FE es el equivalente a la Agencia Central de Inteligencia de EEUU. Y por ley no debe espiar a los daneses, solo puede hacerlo a extranjeros y a otros países. El encargado de vigilar a la población es el Servicio de Inteligencia Policial (PET) al igual que el FBI vigila a las personas dentro de los EEUU.

Durante varios meses, «Danmark Radio» ha estado trabajando con periodistas de Suecia (SVT), Noruega, Alemania (Süddeutsche Zeitung, NDR, WDR) y Francia (Le Monde) en los nuevos antecedentes del espionaje entre «aliados”. Su investigación ha obligado a pronunciarse públicamente a alguno de los 35 líderes europeos espiados por los Estados Unidos.

“Exigimos estar plenamente informados sobre asuntos relacionados con el espionaje a los ciudadanos, las empresas y los intereses suecos dijo el ministro de Defensa sueco, Peter Hultqvist, a la emisora ​​nacional SVT. «Nos tomamos muy en serio las acusaciones», ha declarado su homólogo noruego Frank Bakke-Jensen a la emisora ​​nacional NRK. Ambos ministros de defensa enfatizaron que su colega danés, la Ministro de Defensa, Trine Bramsen, no les había informado sobre el espionaje de la NSA a sus países. «No nos informaron nada en concreto sobre el caso», se quejó Frank Bakke-Jensen de Noruega.

Los franceses también interpelan a Dinamarca

“El Ministro para Asuntos Europeos de Francia, Clement Beaune, calificó el espionaje de Estados Unidos como algo muy serio y pidió una verificación de la información … Si se confirma, Beaune no descartó ‘consecuencias’. «El primer ministro Emmanuel Macron dijo que “este comportamiento es inaceptable entre los aliados».

Por su parte, la Ministra de Defensa danesa, Trine Bramsen, dijo que el gobierno» no entrará en especulaciones sobre asuntos de inteligencia «, pero enfatizó que considera que las escuchas telefónicas sistemáticas a aliados son «inaceptables «.Sin embargo, el motivo por el que el gobierno danés “no puede” hablar públicamente o en privado sobre su espionaje a su aliados no tiene explicación plausible.

Con respecto a las nuevas revelaciones, Edward Snowden ha escrito en Twitter: “Biden debe responder acerca del espionaje a sus aliados cuando visite Europa en unos días más. Por supuesto, Biden siempre ha estado involucrado directamente en este asunto”.

¿Qué responde Dinamarca?

El gobierno danés ha dejado claro a Danmark Radio (RD) que no permitirá una divulgación completa de las acciones de espionaje. Al respecto la reportera judicial de RD Trine Marie Ilsøee escribió: «No podemos esperar que estas posibles ilegalidades cometidas se hagan públicas. Los servicios de inteligencia de Dinamarca dependen de potencias extranjeras [es decir, Estados Unidos y no Europa]. Dinamarca podría verse comprometida si revela estos secretos».

Por su parte, el Comité de Supervisión de Inteligencia de Dinamarca presentó en agosto pasado, un informe acerca de las ilegalidades que comete el Servicio de Inteligencia de Defensa (FE). Entre otras actividades se destacan estas:

  • Retención de “información clave y crucial a las autoridades gubernamentales” y al comité de supervisión
  • Actividades ilegales abiertamente ilegales antes de 2014;
  • Difusión de «falsedades » a los responsables de formulación de políticas publicas
  • Vigilancia ilegal de ciudadanos daneses, incluido a los miembros del Comité de Supervisión. (Parte de este espionaje ilegal se había compartido con fuentes anónimas [¿tal vez los Estados Unidos?]
  • Las actividades no autorizadas han sido archivadas y el FE se niega ha investigarlas.

En 2014, cuando por primera vez la Radio Danesa denunció el espionaje ilegal, la Ministra de Defensa, Trine Bramsen, suspendió a los responsables de la FE bajo la presión de algunos partidos políticos. Sin embargo, pocos meses después los reintegró, en otros trabajos con el mismo salario.

En la Revista CovertAction escribí sobre esta política inconstitucional y antidemocrática:  

“El ejército de Dinamarca permite que la Agencia de Seguridad Nacional de los Estados Unidos (NSA) espíe al Ministerio de Finanzas, al Ministerio de Relaciones Exteriores, a la empresa privada de armas Terma, a toda la población danesa y los vecinos más cercanos: Suecia, Noruega, Francia, Alemania y los Países Bajos.

Pese que Dinamarca prohíbe la posesión de armas nucleares en su territorio la información que la NSA obtuvo con la ayuda del Servicio de Inteligencia de Defensa se utilizó para convencer al gobierno danés que comprara el Joint Strike Fighter F-35 de Lockheed-Martin, capaz de portar armas nucleares.

La NSA y FE firmaron un acuerdo en 2008 que permite a la NSA aprovechar las enormes cantidades de datos procedentes de cables de comunicación de fibra óptica que pasan por Dinamarca. El Servicio de Inteligencia de Defensa almacena estos metadatos en un centro construido con la asistencia técnica de la NSA en la pequeña isla danesa de Sandagergaard, a la que tiene acceso la NSA.

Sandagergaard es uno de los tres ‘puestos de escucha’ de la inteligencia militar danesa que rastrea y analiza datos de Internet, buscando información, por ejemplo, sobre lo que tiene Terma, la mayor empresa de armas de Dinamarca. Esto es claramente una intrusión en un principio básico del capitalismo: el libre mercado”.

Hace unos días la Radio Danesa informó:

“FE puede haber violado una de las reglas que se aplican al servicio inteligencia extranjero danés: FE solo se creó para proteger a Dinamarca de amenazas externas y para salvaguardar los intereses daneses en el extranjero. Por lo tanto, FE no puede obtener información de la población danesa «.

En la ceremonia del «día de la bandera” en una presuntuoso declaración la Ministra de Defensa, Trine Bramsen, trato de explicar la trama de espionaje:

“Los cables de fibra óptica absorben y copian metadatos, SMS, chat, llamadas telefónicas, correos electrónicos. Los cables obtienen datos a través del tráfico de Internet, conociendo las comunicaciones de Rusia, así como de Alemania y otros países europeos… Además de la vigilancia electrónica terrestre, hay cientos de cables submarinos transoceánicos que transportan información entre muchos países. Durante décadas, Dinamarca ha tenido un cable europeo clave conectado a los EE UU, que utiliza de vez en cuando la NSA.»

Ya en mayo de 2015 un oficial militar denunció estas actividades como ilegales. Sus informes fueron ignorados. El presupuesto del SE es de 160 millones de dólares. La forma en que se utilizan los fondos es secreta y ningún Comité de Supervisión sabe cómo se utiliza el dinero ni puede determinar su uso.

Ante este conjunto de irregularidades Tobias Liebetrau – investigador de inteligencia del Centro de Estudios Militares de la Universidad de Copenhague- le dijo a la Radio Danesa: La NSA con la FE están espiando algunos secretos industriales daneses, que es por lo que acusamos a los chinos por Huawei”.

Para el analista internacional Finian Cunningham esta situación ejemplifica la “política real” de Europa y Estados Unidos

“Está demostrado, más allá de cualquier equívoco, que los gobiernos europeos son colaboradores y vasallos de Washington. No son «aliados», ya que esa palabra implica una asociación mutua de iguales. Son servidores del poder estadounidense y se engañan a sí mismos cuando hablan de independencia.

Esto explica por qué tanto Rusia como China han visto deteriorarse sus relaciones con Europa. Bajo los actuales gobiernos de la UE, es virtualmente imposible que Moscú o Pekín mantengan relaciones productivas con Europa. Eso requeriría que la Unión Europea tuviera un mínimo de autonomía. Sin embargo, tal como están las cosas, los europeos están subordinados a los dictados de Washington. Y así, la renovada hostilidad de Estados Unidos hacia Rusia y China se refleja de manera incuestionable en el bloque europeo. Los europeos no son más que satélites del imperio estadounidense”.

Una o varias traiciones

En primer lugar, está la traición a la asociación amistosa de Dinamarca con los países europeos y sus líderes. Han sido las mujeres socialdemócratas las que iniciaron estas actividades de espionaje en 2013 cuando fue elegida Primera Ministra, la socialdemócrata, Helle Thorning Schmidt.

Tras las revelaciones de Snowden, abrazó a su “camarada”, la canciller Ángela Merkel, asegurándole que Dinamarca no estaba ni estaría involucrada. Todo el tiempo estuvo mintiendo. Luego, la siguiente primera ministra socialdemócrata, Merete Frederiksen, y su ministra de guerra, Trine Bramsen, profundizaron en las actividades de espionaje de la NSA.

En contraste, los medios de comunicación de Dinamarca, ni siquiera cubrieron el juicio de extradición de Julian Assange. Aparentemente, los medios daneses temen respaldar a un editor que revela cómo Estados Unidos espía a todos y cada uno de sus “aliados”.

(1) Dunhammer en inglés significa espadaña, un junco que crece en pantanos.

*Ron Ridenour, periodista estadounidense.

Artículo publicado en Observatorio de la Crisis Mundial.

Foto de portada: © REUTERS / Kevin Lamarque

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