La elección, para los peruanos, significará escoger entre una nueva Constitución y terminar con actual modelo económico a través de la nacionalización de los recursos naturales fundamentales para poder poner de pie al país o el continuismo que encabeza la procesada Fujimori, que tiene como meta extraordinaria si consiguiera el triunfo, poder eludiría una acusación de 30 años de prisión por lavado de dinero.
Para ese objetivo la candidata del partido Fuerza Popular ha recurrido a lo más rutilante del jet set mediático, convocando para su campaña de mentiras a una docena de jugadores de la selección peruana, que la acompañan con su camiseta blanquirroja para pedir que no voten por ella, sino por el país.
Con artillería de videos publicados simultáneamente en redes sociales, en los cuales los futbolistas sin mencionar a Keiko, llaman a votar por ella esgrimiendo una consigna temeraria. «Yo voto por la libertad. Yo le digo no al comunismo».
Este mensaje en boca de jugadores del combinado nacional de fútbol, como Jefferson Farfán, a quien nadie le creería su supuesto conocimiento del “comunismo”, forma parte de la desesperada campaña con la cual la señora K pretende amedrentar al electorado.
También para la defensa del “estilo de vida peruano” la derecha ha puesto a valer a uno de sus emblemáticos representantes, el ilustrísimo premio Nobel de Literatura Vargas llosa, que muy suelto de cuerpo, luego de haber despotricado contra la señora K para las elecciones del 2010 ahora plantea, tras cuestionar las propuestas económicas de Castillo, que incluyen la estatización y nacionalización de empresas y sectores económicos estratégicos, dijo que si esta es la sociedad que plantea crear «es obvio que ella tendrá todas las características de una sociedad comunista».
Como podemos apreciar Vargas llosa y Jefferson Farfán llegan a la misma conclusión por distintos camino.
Mucho se viene diciendo sobre la guerra sucia que la señora K está orquestando para atemorizar al electorado y ponerlo en contra de Pedro Castillo, desde el “terruqueo” hasta el anticomunismo fanático.
Recogeré las expresiones vertidas por el columnista Ricardo Jiménez en el ejemplar N° 3 de DIARIO LIBRE, en el artículo DURMIENDO CON EL ENEMIGO: DERECHA PERUANA Y COMUNISMO INTERNACIONAL como una reflexión inteligente que trasciende la acotada ruta que pretende transitar la señora K para evitar su derrota y las consecuencias de la misma.
El amigo Jiménez señala con razón que al país que la derecha puede referirse como comunista, es nada más ni nada menos que a China, principal potencia económica dentro de la órbita internacional capitalista.
Señalando “¡Y es además el principal socio comercial del Perú actual! Con cerca del 28% del comercio internacional peruano, el más alto y principal. Casi 400 de las más grandes empresas peruanas tienen en la China comunista a su principal socio en el mundo y encabezan esta complicidad silenciosa e hipócrita con el comunismo internacional”
Además nos aporta “Más cerca, el país que ha sido modelo desde hace décadas para la derecha peruana, Chile, acaba de brindar un triunfo electoral para las fuerzas de izquierda, lideradas por el Partido Comunista Chileno, que además gana la más importante alcaldía del país, la de Santiago, con una joven militante comunista de 30 años de edad, y la reelección como alcalde de Recoleta (comuna popular vecina a la de Santiago) de Daniel Jadue, el candidato comunista que aparece con más ventaja en todas las encuestas para ser el futuro presidente chileno”.
Este dato no es menor pues nos muestra la realidad de un país gobernado por los legítimos herederos de una de las dictaduras mas sanguinarias y represivas de nuestra América y que pese a todo el terror ejercido contra los ciudadanos no ha podido deslegitimar la alternativa que ofrecen los comunistas chilenos.
En otro párrafo de su columna señala “El actual gobernante de Estados Unidos, Joe Biden, está proponiendo una reforma para cobrar más impuestos a las empresas y a los súper ricos, para financiar la crisis de la pandemia, propuesta que horrorizaría por su “comunismo” a la derecha peruana, sino fuera por el pequeño detalle de que la hace el mismo poder que desde hace décadas les ha venido diciendo qué hacer y qué no.
También hace notar que “Estas realidades son una de las notables ausencias de información en la actual campaña anti comunista en contra del candidato presidencial Pedro Castillo, que por lo mismo resulta burda y básica, y muestra el nivel ético e intelectual de los y las periodistas que la promueven, a quienes – seamos sinceros – resulta casi imposible imaginarles comprendiendo algo más allá de la página 30 del Tomo 1 de “El Capital” de Karl Marx, con suerte. Tanto como imaginarles denunciando a los dueños de esas casi 400 grandes empresas peruanas “cómplices del comunismo internacional” chino y exigiendo que el estado peruano rompa relaciones con China, Estados Unidos y Chile”
Para remata “Pies de barro de la campaña anti comunista de la Sra. Ka y un síntoma más de descomposición de la derecha peruana y su modelo desgastado y en crisis”.
Mas claro que la nieve, el amigo Ricardo Jiménez no da elementos que deben ser considerados por la población para romper con ese fatídico destino manifiesto al que hace uso la oligarquía peruana desde hace cientos de años para someter al pueblo peruano y seguir disfrutando de su provechoso anticomunismo visceral.
Notas:
*Analista político del equipo de Periodismo Internacional Alternativo PIA Global