El presidente de la República de Perú, Pedro Castillo, cuando nombró a Héctor Béjar al frente de la Cancillería peruana, dio una muestra clara de lo que significará la nueva política exterior de la nación andina.
Héctor Béjar, escritor y sociólogo de 85 años, es un intelectual formado en la lucha por liberar al pueblo del yugo colonial y por la justicia social, por eso no parecerá extraño el anunció del retiro del país del llamado Grupo de Lima, como parte de la implementación de una política exterior no injerencista, nacional, autónoma, democrática, social y descentralizada.
El flamante ministro de Relaciones Exteriores indicó también que la diplomacia peruana tendrá una agenda de libertad, globalidad planetaria, humanismo y de justicia; una diplomacia de paz, de amistad sincera, cooperación y entendimiento con todos los países del mundo y en especial con los vecinos y principales socios comerciales y económicos; una diplomacia basada en el respeto mutuo.
Béjar manifestó que su país se unirá a las naciones que se posicionan en contra de las políticas de bloqueo unilaterales.
«Condenamos los bloqueos, los embargos y las sanciones unilaterales que solo afectan a los pueblos y respaldamos plenamente el libre y autónomo derecho de cada pueblo a mantener libremente y sin obstáculos el intercambio comercial».
También, el ministro, ratificó que el poder ejecutivo retirará del Congreso la solicitud para salir del tratado que formó la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), y que, por el contrario, se buscará dar impulso a la reconstitución y modernización del organismo.
Así mismo el canciller informó que Perú se reinsertará en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y caribeños (Celac) y que condenará los bloqueos y las medidas restrictivas unilaterales en el ámbito de las Naciones Unidas.
En el discurso de comienzo de gestión, el intelectual marco de manera tajante el nuevo rumbo que tomará la nación andina destacando el valor de la integración y la consagración de los derechos humanos como el norte irrenunciable para construir una nación libre, justa y soberana.
Así lo hacia saber Héctor Béjar
