El momento en que el viceministro de Defensa saudí, el príncipe Khalid bin Salman, apareció junto al ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, provocó comentarios de “traición” en Washington.
La revista Foreign Policy (FP), una de las principales instituciones de la política exterior estadounidense, publicó un detallado análisis sobre la necesidad estadounidense de una nueva estrategia ante el acuerdo de Arabia Saudí con Rusia en medio de desastrosas escenas en Afganistán. “Riad y Teherán son rivales en casi todos los asuntos, y sin embargo ambos países apoyan a Rusia y China”, comenzaba el análisis de FP, revelando el dilema estadounidense.
Los acontecimientos en la región muestran una imagen del orden internacional post-estadounidense. La retirada de Emiratos Árabes Unidos (EAU) de la compra de cazas F-35 a Estados Unidos cancelando un acuerdo de 23.000 millones de dólares, la reanudación de las relaciones diplomáticas de los países árabes con Siria y el aumento de las relaciones estratégicas con la República Popular China son los pasos del Nuevo Mundo.
La historia de las relaciones chino-árabes
Las relaciones chino-árabes se remontan a hace dos mil años. El profeta Mahoma recibió la influencia de la avanzada civilización china a través de la Ruta de la Seda y dijo: “El verdadero conocimiento debe aprenderse con atención, aunque sólo pueda encontrarse en un país tan lejano como China”. El interés por China en el mundo islámico ha aumentado aún más desde entonces. Las bases históricas de las relaciones sino-árabes se sentaron siglos antes de que el mundo occidental empezara a tener embajadas en los países con la Paz de Westfalia en el siglo XVII, cuando se envió un enviado a China en 651 durante el reinado del Tercer Califa Hazrat Uthman.
La lucha de los Estados por la independencia y las relaciones chino-árabes
En la década de 1950, las luchas de los países árabes contra el imperialismo y el colonialismo recibieron un gran apoyo de China. Los dos mayores partidarios de la nacionalización del Canal de Suez por parte del líder egipcio Gamal Abdel Nasser fueron la URSS y la RPC. En 1956, contra la guerra imperialista-sionista de Gran Bretaña, Francia e Israel contra Egipto, el entonces primer ministro chino Zhou Enlai llamó a Gamal Abdel Nasser y le transmitió su apoyo diciendo “El gobierno chino decide conceder al gobierno egipcio 20 millones de francos suizos en efectivo libres de todo cargo”.
En el mismo periodo, China apoyó las luchas de países árabes como Líbano y Palestina contra la agresión occidental, especialmente el Movimiento de Independencia Nacional en Argelia.
Impacto significativo de la Iniciativa de la Franja y la Ruta
Los hechos mencionados demuestran que los orígenes de las relaciones entre China y el mundo árabe no son financieros, sino que se basan en una hermandad nacida de una lucha de clases común. Las relaciones políticas y económicas construidas sobre esta base se han visto reforzadas por el gran interés de los países árabes en la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI) anunciada por Xi Jinping en 2013.
El Orden Internacional Multipolar, cada vez más evidente, ofrece a los países del Golfo la oportunidad de actuar con mayor independencia en política exterior. Especialmente el creciente volumen de comercio con China y Arabia Saudí, junto con el solapamiento entre la “Visión 2030” de Arabia Saudí y la BRI, deja entrever importantes acontecimientos geopolíticos en los próximos años.
El creciente mercado y las necesidades energéticas de China aumentan la importancia estratégica de los Estados árabes. Además, el hecho de que dos de los estrechos de Gibraltar, Ormuz, Malaca y Bab-el-Mandeb, que proporcionan la conexión comercial de China con los mercados mundiales, estén situados en el mundo árabe aumenta esta importancia.
La mitad de las necesidades diarias de petróleo de China, 10 millones de barriles, pasa por el mundo árabe y el estrecho de Ormuz.
En el marco de la BRI, China estableció asociaciones estratégicas con Argelia y Egipto en 2014, Arabia Saudí y los EAU en 2016, Qatar en 2014, Irak en 2015, Marruecos y Omán en 2016. Desde enero de 2022, 20 Estados árabes han firmado acuerdos de cooperación con China en el marco de la BRI en diversos ámbitos como la energía, la inversión, el comercio, las finanzas, las infraestructuras y la tecnología avanzada.
China y los países árabes establecieron el Foro de Cooperación China-Estados Árabes en 2004 y la Exposición China-Estados Árabes en 2013. En 2018, se firmó la Declaración de Acción sobre la Cooperación China-Estados Árabes en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta.
El mayor inversor en el mundo árabe
China es el mayor inversor en los países árabes, con inversiones por valor de 214.000 millones de dólares entre 2005 y 2021. En 2021, el volumen comercial entre China y los países árabes superó los 330.000 millones de dólares, estableciendo un nuevo récord.
En los últimos años, China y los Estados árabes también han alcanzado logros significativos en la exploración espacial y la cooperación médica. En 2021, China y los Estados árabes firmaron el Plan de Navegación por Satélite China-Estados Árabes, que sentará las bases para la cooperación tecnológica espacial China-Estados árabes en los próximos años. En respuesta a la pandemia de COVID-19 a principios de 2020, las empresas médicas chinas Sinopharm y Sinovac firmaron acuerdos de cooperación con los EAU y Egipto para producir y almacenar vacunas de COVID-19.
Visita de Xi Jinping y nuevo impulso
La visita del presidente chino Xi a Arabia Saudí a principios de diciembre debe destacarse por las oportunidades que el Orden Mundial Multipolar presenta para China y Asia Occidental, y por el establecimiento de nuevos mecanismos de cooperación entre ambas partes, que son también las principales influencias en la formación de este orden.
Xi se reunió con los líderes y ministros de Asuntos Exteriores de al menos 14 países en la primera Cumbre China-Países Árabes y la Cumbre China-Organización de Cooperación del Golfo. Se reunió con líderes de Arabia Saudí, Kuwait, Palestina, Egipto, Sudán, Irak, Marruecos, Argelia, Líbano y otros países árabes. En estas reuniones, Xi reiteró su apoyo a la lucha de los socios árabes por un desarrollo independiente y subrayó que tanto China como las naciones árabes comparten su firme confianza en el multilateralismo internacional.
Durante la histórica visita de Xi a Riad después de 6 años, temas como la ampliación de la Organización de Cooperación de Shanghái y el BRICS con los países árabes y el comercio en monedas nacionales se convirtieron en la pesadilla de Washington.
El primer viaje del nuevo ministro de Exteriores
Qin Gang, que sustituyó al anterior ministro de Asuntos Exteriores, Wang Yi, como ministro de Exteriores tras el XX Congreso Nacional del PCCh, visitó el norte de África nada más tomar posesión de su cargo. En Egipto, el secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Aboul Gheit, acordó acelerar la aplicación de los resultados de la primera Cumbre China-Estados Árabes. Durante sus conversaciones en la capital egipcia, El Cairo, Qin saludó la exitosa convocatoria de la cumbre el mes pasado como un “hito” en el desarrollo de las relaciones chino-árabes en la nueva era.
China y la Liga Árabe han firmado decenas de acuerdos de cooperación en materia de energía, infraestructuras, finanzas, educación, tecnología y otros campos importantes.
La visita del Presidente y el Ministro de Asuntos Exteriores chinos a los países árabes acelerará la ruptura geopolítica en el mundo. La cooperación entre ambas partes no es sólo económica, sino también ideológica, dada la postura de los países árabes, que no han sucumbido a la propaganda estadounidense sobre la cuestión uigur y la “política de una sola China”. Por otra parte, el apoyo de China a la causa palestina desde el pasado hasta el presente también lo demuestra.
También es posible afirmar que, con el impacto de la política pacífica de China, en un futuro próximo se alcanzará la solución regional de problemas liderados por Estados Unidos como la cuestión nuclear iraní, la crisis siria, la paz israelo-palestina y la disputa entre Irán y las islas de EAU.
*Orçun Göktürk es Representante del Partido Vatan (Türkiye) de la República Popular China
Artículo publicado originalmente en UWI.
Foto de portada: Retirada de UWI