Análisis del equipo de PIA Global Asia - Asia Pacifico

Japón y la estrategia militar aliada a Occidente

Escrito Por Erika Giménez

Por Erika Gimenez- La “Constitución de la Paz”, el miedo a China y a Rusia y la estrategia estadounidense del Indo-Pacífico.

En 1947, luego de la Segunda Guerra Mundial, Japón promulgó una nueva Constitución que fue redactada por las fuerzas de ocupación estadounidenses y que hasta el día de hoy recibe críticas del Partido Liberal Democrático —de corte consevador—, sobre todo, por el artículo 9 que destaca: “no se mantendrán en lo sucesivo fuerzas de tierra, mar o aire, como tampoco otro potencial bélico. El derecho de beligerancia del Estado no será reconocido.

Uno de los primeros ministros que intentó cambiar la “constitución de la paz” fue Shinzo Abe —asesinado en julio pasado— que si bien gobernó de 2006 a 2007 y de 2012 a 2020, no le dio la correlación de fuerzas para borrar el artículo 9 pero sí para reformarlo. Aunque en la actualidad al PLD le darían los votos suficientes para tener Fuerzas de Autodefensa sin hacer demasiada reinterpretación de un artículo.

Los mayores preocupados porque Japón vuelva a tener una fuerza militar nacional de autodefensa son sus países vecinos, como China, Corea del Norte y Corea del Sur. Dichos países fueron ocupados por el imperio japonés y aún tienen un recuerdo muy fuerte de las atrocidades cometidas por los nipones. La revisión constitucional que plantea el PLD en la actualidad, representa un temor latente ya que, para la región de Asia Pacífico se trata de una historia bastante reciente.

Otro de los elementos a tener en cuenta, es que luego de la Segunda Guerra Mundial, Japón pasó a ser una nación aliada a los Estados Unidos esto implicó que sea un país con la mayor cantidad de bases militares norteamericanas del mundo, 120 bases y 57.300 efectivos militares. La mayoría se encuentran en la ciudad de Okinawa.

La construcción de bases militares en Okinawa comenzó en abril de 1945 durante la Guerra del Pacífico. En el momento de la reversión de Okinawa a Japón, en 1972, la superficie de las instalaciones militares estadounidenses era de aproximadamente 28.000 hectáreas, pero luego de repetidas negociaciones con el ejército estadounidense, se devolvió aproximadamente el 35 %, siendo la última cifra de algo más de 18.000 hectáreas, según Nippon.com.

A la “Constitución de la Paz” y las bases militares se le suma que Japón es miembro del El Diálogo de Seguridad Cuadrilateral —QUAD—, es un foro entre Estados Unidos, Japón, Australia y la India que se mantiene mediante cumbres semi-regulares, intercambios de información y ejercicios militares entre países miembros. Entonces, el Estado Japonés tiene un permiso “especial” de actuar o participar siempre que su aliado estratégico norteamericano se vea comprometido en alguna situación bélica.

Es el caso de la “preocupación” por parte de Estados Unidos, Japón y otros países sobre los ejercicios con fuego real realizados por la República Popular China después de la visita a Taiwán de la presidenta de la Cámara de Representantes estadounidense, Nancy Pelosi. Que según el gobierno japonés demuestran un salto en las capacidades del EPL para actuar de forma conjunta y entre dominios para controlar las aguas y el espacio aéreo en Taiwán y sus alrededores, mientras que para China se trata de su soberanía.

Se espera que bajo la estrategia estadounidense para el indo-pacífico, Japón invierta mucho más en sus capacidades militares. Este era un riesgo con el que Kishida estaba dispuesto a contar mientras duplica la estrategia de Japón de defender el «orden basado en reglas» de la posguerra, y es un riesgo que los nipones no pueden evitar a medida que las tensiones en el Estrecho de Taiwán continúan aumentando.

Por otro lado, el pueblo japonés ha apoyado el énfasis de Kishida en la defensa del statu quo de la posguerra. Según una encuesta realizada en marzo de 2022, el 85 por ciento de los japoneses aprobaron la respuesta de Kishida de sancionar a la Federación Rusa por la guerra en Ucrania.

Se espera que la administración de Fumio Kishida anuncie una nueva Estrategia de Seguridad Nacional para fines de este 2022. Donde tanto Rusia como China serían los principales focos de “evaluación”de cara al futuro por parte de las autoridades japonesas. Japón buscará ser protagonista, aunque hasta ahora, por lo menos en el Pacífico esté siguiendo las órdenes de alguien más.

Foto de portada: Escenario Mundial

Acerca del autor

Erika Giménez

Licenciada en Comunicación Social- UNLP, Diplomada en Estudios Estratégicos Chinos- UNDEF, estudiante del Korea Fundation School Program. Investigo la región de Asia Pacífico.

Dejar Comentario