Desde que entró en vigor el alto el fuego mediado por Estados Unidos el pasado 10 de octubre, al menos 211 palestinos han sido asesinados y casi 600 han resultado heridos en ataques israelíes según datos del Ministerio de Salud de Gaza.
El sábado 25 de octubre vehículos militares israelíes demolieron edificios residenciales en el este de Khan Yunis, en el sur de Gaza. A eso se sumaron ofensivas con disparos israelíes en el este del campamento de refugiados de Al-Bureij, en el centro del enclave, en medio de un intenso fuego de artillería contra la misma zona.
Además, al amanecer, las tropas israelíes destruyeron varias viviendas de civiles en el barrio de al-Shujaiya, al este de la ciudad de Gaza.
Al mismo tiempo, la marina israelí arrestó a tres pescadores frente a la costa de la ciudad de Gaza tras destruir sus equipos de trabajo. Las lanchas de guerra también abrieron fuego en el mar durante la mañana.
La noche de este martes el primer ministro israelí dio la orden de lanzar “ataques contundentes e inmediatos” en Gaza después de una reunión del Gabinete de Seguridad y de que Tel Aviv acusara a Hamas de violar el alto el fuego. Una acusación que el grupo ha rechazado y de la que no se proporcionan pruebas.
Los ataques fueron dirigidos contra viviendas y tiendas de desplazados en diferentes zonas del territorio
Al menos 104 palestinos, incluyendo 46 niños, han sido asesinados poco después de que Netanyahu encomendará a su ejército retomar operaciones militares “potentes” de inmediato en el enclave.
El Ministerio de Salud de Gaza informó el miércoles que los hospitales atendieron a 253 heridos, incluyendo 78 niños y 84 mujeres.
Foto de portada: Al Mayadeen
