Las autoridades iraníes anunciaron la incautación de un petrolero extranjero que transportaba millones de litros de combustible de contrabando mientras navegaba por el estratégico Estrecho de Ormuz, uno de los principales corredores energéticos del mundo. La operación fue realizada por fuerzas navales del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI).
Si bien, algunos medios expresaron que se desconocía la procedencia del buque, portales internacionales como RT, anunciaron que pertenece a Estados Unidos.
De acuerdo con Mojtaba Ghahramani, jefe del poder judicial, el barco transportaba aproximadamente 4 millones de litros de combustible —equivalentes a unos 25.000 barriles— cuando fue interceptado.
El funcionario calificó la incautación como un “duro golpe” contra las redes de contrabando de combustible y señaló que el caso fue derivado a las autoridades judiciales para continuar con la investigación. Según la Guardia Revolucionaria, se están realizando pesquisas adicionales para identificar a los grupos vinculados a la operación ilegal.
La semana pasada, Teherán había informado sobre la incautación de otro petrolero extranjero en el Golfo de Omán, que transportaba cerca de 6 millones de litros de diésel de contrabando.
Irán sostiene que se ha incentivado el tráfico ilegal de petróleo hacia países vecinos por vía terrestre y hacia los Estados del Golfo por vía marítima.
La República Islámica realiza periódicamente este tipo de incautaciones en el marco de su política para frenar el contrabando de energía, un fenómeno agravado por las sanciones internacionales que restringen sus exportaciones formales de petróleo.
El episodio ocurre en un contexto de crecientes tensiones regionales, en el que Teherán ha reiterado su advertencia de que podría restringir o incluso cerrar el Estrecho de Ormuz en respuesta a eventuales acciones militares. Por este angosto paso marítimo, circula cerca del 20% del petróleo comercializado a nivel mundial y alrededor de una cuarta parte del crudo transportado por vía marítima. Estados Unidos, por su parte, mantiene una presencia naval permanente en la región a través de su Quinta Flota, con base en Bahréin.
Foto de portada: Insight Iran

