Las nuevas relaciones fueron confirmadas mediante la firma de una declaración conjunta entre los ministros de Relaciones Exteriores de Honduras y China, Eduardo Enrique Reina y Qin Gang, respectivamente, en la ciudad de Beijing.
Honduras reconoció que existe una sola China en el mundo y ambos países acordaron trabajar bajo los principios de respeto mutuo a la soberanía e integridad territorial del otro, la igualdad, el beneficio recíproco y la coexistencia pacífica.
Dos meses y dos semanas después, en un hecho que marca la historia hondureña, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, y el presidente de China, Xi Jinping, protagonizaron un primer encuentro oficial en Beijing, que representa un nuevo tiempo en las relaciones entre ambos pueblos.
La visita de Estado generó la firma de varios acuerdos de cooperación en diferentes campos, que proyectan un futuro esperanzador para el crecimiento y desarrollo de estos dos países.
La titular del Poder Ejecutivo hondureño inició su visita en la ciudad de Shanghai, en donde sostuvo un encuentro con la presidenta del Nuevo Banco de Desarrollo del BRICS, Dilma Rousseff, para abogar por la incorporación de Honduras ante ese organismo.
China es una nación de 1.400 millones de habitantes que, en la última década, logró sacar de la pobreza extrema a su pueblo y que avanza a pasos acelerados en un proceso de modernización que ya es referencia mundial.
Con fuertes avances en materia tecnológica, prácticas ejemplares en manejo de recursos naturales, seguridad social, educación, infraestructura y otras áreas, el gigante de Asia es sin duda para Honduras uno de los socios más importantes de los últimos tiempos.
China juega un papel cada día más trascendental en los asuntos internacionales, desde la construcción conjunta de la Franja y la Ruta hasta el establecimiento de un nuevo tipo de relaciones internacionales.
Sus valores sobre la humanidad, que enmarcan la paz, el desarrollo, la equidad, la justicia, la democracia y la libertad, muestran una nación altamente comprometida con la convivencia y las buenas relaciones en el ámbito internacional.
El pasado mes de mayo, por primera vez en la historia, una delegación de medios de comunicación hondureños visitó China para conocer su historia, cultura y desarrollo, en el marco de las nuevas relaciones bilaterales.
En esta visita, la prensa hondureña tuvo la oportunidad de apreciar de primera mano la riqueza cultural china, sus notorios avances tecnológicos, el potencial educativo y un ejemplar modelo de desarrollo que ha sido capaz de levantar a un país que hoy presume de haber logrado erradicar la extrema pobreza de su pueblo.
La impresionante cultura china, su historia milenaria, la calidez de su pueblo, su variada gastronomía y la belleza y modernidad de sus ciudades fueron sin duda escenarios que marcaron el recorrido hondureño de dos semanas por el gigante de Asia.
Con la apertura de las relaciones diplomáticas entre ambos países resta desear un vínculo duradero y provechoso, permitiendo al pueblo hondureño replicar las prácticas exitosas que han permitido afianzar el desarrollo de China en el corto plazo.
Las esperanzas están cifradas en que los nuevos lazos de amistad con el país asiático permitan a Honduras impulsar un mayor desarrollo en beneficio de cada ciudadano, a través de la generación de oportunidades y mejores condiciones que garanticen una convivencia en armonía para todos.
Más de nueve millones de hondureños anhelan una nación como China, con empleo, salud, educación, acceso a los servicios básicos, vivienda, sin pobreza, sin corrupción y valorada por la comunidad internacional como ejemplo mundial.
Pedro Membreño* es el jefe de Redacción del diario hondureño Poder Popular
Este artículo fue publicado en la Agencia de Noticias Xinhua
Foto de portada: radioamerica.hn/
