Las noticias iniciales de las negociaciones entre el régimen sionista y el Movimiento de Resistencia Palestina (Hamas) indican que la resistencia total del pueblo de Gaza, la firmeza de Hamas y los grupos palestinos, y el poderoso apoyo de los miembros del Frente de Resistencia, convencieron a Israel de que la derrota militar de Hamas y la dominación de Gaza no es posible y que debe decir adiós a sus sueños inalcanzables.
Después de dos años de sufrir derrotas en los ámbitos militar, político, económico, internacional y de opinión pública, el régimen sionista abandonó su objetivo principal, que es la destrucción de Hamas y la ocupación completa de Gaza, y pidió a Estados Unidos que active la mesa de negociaciones a través de su mediación. Una vez más, después de su fracaso en la agresión militar contra Irán, Israel se acercó a Estados Unidos para que actuara para escapar de su derrota. No en vano, Trump dice que el ataque de Estados Unidos a Irán aceleró las conversaciones de paz, porque si Estados Unidos e Israel hubieran ganado la agresión contra Irán, no habrían pensado en la mesa de negociaciones y habrían continuado el mismo proceso de militarización contra el pueblo palestino.
La victoria de Hamas en el campo se produjo después de un ataque preventivo contra las posiciones del régimen sionista durante la Operación Tormenta de al-Aqsa, y el apoyo militar de grupos de liberación palestinos como la Yihad Islámica y miembros del Frente de Resistencia como Hezbollah en el Líbano, Ansarullah en Yemen y la Resistencia iraquí provocó que puertos activos como Eilat y Ashkelon estuvieran completamente inactivos. y que la infraestructura económica del régimen se vea gravemente dañada.
En contraste, el régimen sionista, impotente en el campo de batalla, con el apoyo inquebrantable de Estados Unidos lanzó ataques violentos contra civiles, genocidio de niños y mujeres y el martirio de más de 65.000 palestinos, y se convirtió en odiado por el mundo. Finalmente, Israel acordó retirarse de la Franja de Gaza después de dos años de crímenes en las negociaciones de Sharm el-Sheikh. Al implementar este acuerdo, el Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (Hamas) logrará liberar a 250 prisioneros palestinos y 1.700 habitantes de Gaza que han sido detenidos por las fuerzas de ocupación israelíes desde el comienzo de la guerra, y en la primera fase del acuerdo, liberará a 20 prisioneros vivos del régimen de ocupación.
También está previsto enviar 400 camiones de ayuda diarios a la población indefensa de Gaza, y este número aumentará gradualmente en las siguientes etapas. Hamas no solo no aceptó desarmar a sus fuerzas militares, sino que también enfatizó en la declaración emitida su firme determinación y la de otros palestinos de defender el derecho a la autodeterminación y la formación de un estado palestino independiente.
En general, la gran resistencia del pueblo palestino y el coraje y la valentía de los combatientes de la resistencia en el campo y el apoyo integral de los pueblos del mundo a la resistencia, hicieron que Hamas apareciera en la mesa de negociaciones con autoridad y defendiera los objetivos de la resistencia con gran poder de negociación.
Ahora es deber de la comunidad internacional seguir defendiendo al pueblo palestino y obligar a los ocupantes sionistas a aplicar plenamente el acuerdo.
Hamas y el Frente de Resistencia ganaron en el campo y la diplomacia, y es apropiado honrar la memoria y los nombres de grandes mártires como Sayyed Hassan Nasrallah, Yahya Sinwar, Ismail Haniyeh, etc., que jugaron un papel importante en la sostenibilidad de la resistencia y la derrota del enemigo.
Mohsen Pakaein*. Político, diplomático y escritor iraní
Este artículo ha sido publicado originalmente en el portal mehrnews.com/news
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