Según las primeras informaciones divulgadas, siete de los secuestrados son miembros de la Fuerza de Resistencia Popular de Irán (Basich), cinco son guardias fronterizos de la localidad Miryaveh y los restantes pertenecen a la inteligencia del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI).
El rapto se ha producido entre las 04:00 y las 5:00 de la madrugada de este martes, hora local, en la zona fronteriza de Lokadan, a unos 50 km de Miryaveh, y ubicada en la provincia suroriental de Sistán y Beluchistán.
Horas después del secuestro, el grupúsculo terrorista Yeish Al-Adl (ejército de la justicia) ha reivindicado la autoría del rapto, pero sin llegar a dar más detalles o reclamar exigencias al respecto.
La banda terrorista Yeish Al-Adl se ha atribuido la responsabilidad de numerosos ataques en la frontera suroriental de Irán. El grupo extremista mató en abril de 2017 a diez guardias fronterizos iraníes durante una emboscada en la misma región de Miryaveh.
Las zonas fronterizas en Sistán y Beluchistán sufren desde hace años numerosos ataques de redes de narcotráfico y milicias armadas radicadas en suelo paquistaní. Teherán ha criticado una y otra vez a Islamabad por no actuar con dureza contra estas bandas terroristas, incluida Yeish Al-Adl, que siempre huyen a Paquistán tras lanzar sus ataques.
Por otra parte, las Fuerzas Armadas y los servicios de inteligencia iraníes, después de los atentados de Daesh el 7 de junio de 2017 en Teherán, la capital iraní, y el reciente mortal ataque terrorista ocurrido contra un desfile militar en la ciudad de Ahvaz, situada en la provincia suroccidental de Juzestán, han intensificado sus operaciones y logrado eliminar a una serie de terroristas y células armadas en distintos puntos del país.
Fuente: Alahed
