Elecciones 2022 Norte América

El plan de los republicanos para impugnar las elecciones

Por Heidi Przybyla*- La colocación de agentes como trabajadores electorales y la creación de una «línea directa» con abogados amigos son algunas de las estrategias que se desplegarán en Michigan y otros estados indecisos.

Las grabaciones de vídeo de los operativos del Partido Republicano reunidos con activistas de base proporcionan una mirada al interior de una estrategia múltiple para apuntar y potencialmente anular los votos en los distritos electorales demócratas: Instalar reclutas entrenados como trabajadores electorales regulares y ponerlos en contacto directo con los abogados del partido.

El plan, tal y como lo ha descrito un empleado del Comité Nacional Republicano en Michigan, incluye la utilización de normas diseñadas para proporcionar un equilibrio político entre los trabajadores electorales para instalar voluntarios formados por el partido y preparados para impugnar a los votantes en los colegios electorales de mayoría demócrata, desarrollar un sitio web para poner en contacto a esos trabajadores con los abogados locales y establecer una red de fiscales de distrito afines al partido que podrían intervenir para bloquear el recuento de votos en determinados recintos.

«Siendo un trabajador electoral, tienes muchos más derechos y cosas que puedes hacer para detener algo que [como] un impugnador electoral», dijo Matthew Seifried, el director de integridad electoral del RNC para Michigan, subrayando la importancia de obtener designaciones oficiales como trabajadores electorales en una reunión con activistas del GOP en el condado de Wayne el pasado 6 de noviembre. Es una de una serie de grabaciones de reuniones del GOP entre el verano de 2021 y mayo de este año obtenidas por POLITICO.

Respaldando a esos trabajadores de primera línea, «va a ser un ejército«, prometió Seifried en una sesión de entrenamiento del 5 de octubre. «Vamos a tener más abogados de los que hemos reclutado nunca, porque seamos sinceros, ahí es donde se va a luchar, ¿verdad?».

Seifried también dijo que el RNC organizará «talleres» y equipará a los trabajadores electorales con una línea telefónica y un sitio web desarrollados por Zendesk, una empresa de soporte de software utilizada por los minoristas en línea, que les permitirá chatear en vivo con los abogados del partido el día de las elecciones. En una sesión de formación de mayo de 2022, dijo que había alcanzado un objetivo fijado el pasado invierno: Más de 5.600 personas se habían inscrito para ser trabajadores electorales y, hace varios días, presentó una lista inicial de más de 850 nombres al secretario de Detroit.

La demócrata Janice Winfrey, que ejerce de secretaria, estaría obligada a elegir los nombres de la lista presentada por el partido en virtud de una ley local destinada a garantizar la representación bipartidista y un equipo imparcial de trabajadores de los recintos electorales.

Por otra parte, POLITICO obtuvo grabaciones de Zoom de Tim Griffin, asesor legal de The Amistad Project, un grupo autodenominado de integridad electoral que el ex abogado de Donald Trump, Rudy Giuliani, describió una vez como «socio» en los esfuerzos legales de la campaña de Trump para anular las elecciones de 2020, reuniéndose con activistas de múltiples estados y discutiendo planes para identificar a fiscales de distrito amigos que podrían organizar intervenciones en tiempo real en disputas electorales locales.

En la grabación, Griffin habla de la construcción de una red nacional de fiscales de distrito aliados y de cómo crear una «trampa» legal para Winfrey.

«Recordad, chicos, que estamos tratando de construir una red de fiscales de distrito a nivel nacional. Su fiscal de distrito local, como siempre decimos, es más poderoso que su congresista», dijo Griffin durante una reunión el 21 de septiembre. «Son ellos los que pueden convocar a un gran jurado. Son los que pueden iniciar una investigación, emitir citaciones, asegurarse de que se conservan los registros, etc.», dijo.

POLITICO obtuvo una docena de grabaciones de personas que fueron invitadas a escuchar las reuniones. Seifried remitió las solicitudes de comentarios de POLITICO al RNC. Griffin, a través de la Sociedad Thomas More, que dirige Amistad, no devolvió las repetidas llamadas y mensajes de texto al portavoz Tom Ciesielka.

Un portavoz del RNC dijo que el partido está tratando de rectificar un desequilibrio a favor de los trabajadores electorales demócratas en las grandes áreas urbanas, particularmente en Detroit, una ciudad que vota confiablemente a los demócratas en más de un 90%. Sólo 170 de los más de 5.400 funcionarios electorales de Detroit eran republicanos en 2020, según el RNC.

«Los demócratas han tenido el monopolio de la observación de las encuestas durante 40 años, y dice mucho que les aterra la igualdad de condiciones», dijo el portavoz del RNC, Gates McGavick. «El RNC está centrado en la formación de voluntarios para que participen en el proceso electoral porque las encuestas muestran que los votantes estadounidenses quieren una vigilancia electoral bipartidista para garantizar la transparencia y la seguridad en las urnas».

En el gráfico de introducción de su presentación de formación, Seifried dice que el objetivo del RNC es «hacer que sea fácil votar y DIFÍCIL ENGAÑAR».

Pero los grupos de vigilancia electoral y los expertos legales dicen que muchos de estos reclutas están respondiendo a la llamada del RNC porque creen falsamente que se cometió fraude en las elecciones de 2020, por lo que instalarlos como los funcionarios supuestamente imparciales que supervisan la votación a nivel de precinto podría crear un caos en esos precintos fuertemente demócratas.

«Esto es completamente inédito en la historia de las elecciones estadounidenses que un partido político trabaje a este nivel granular para armar una red», dijo Nick Penniman, fundador y CEO de Issue One, un grupo de vigilancia electoral. «Parece que ahora las fuerzas de Trump van directamente a por el propio sistema legal y eso debería preocupar a todo el mundo«.

Penniman también expresó su preocupación por las redes de abogados y fiscales que se están creando, sugiriendo que los trabajadores electorales con motivaciones políticas podrían simplemente iniciar un conflicto legal en el colegio electoral que interrumpa la votación y luego utilizarlo como vehículo para rechazar el recuento de votos de ese distrito electoral.

El portavoz del Comité Nacional Demócrata, Ammar Moussa, dijo que el DNC «capacita a los observadores electorales para ayudar a todos los votantes elegibles a emitir su voto», pero ni el DNC ni el partido estatal capacitan a los trabajadores electorales. El DNC sí ayudó a reclutar trabajadores electorales en 2020 debido a la disminución de trabajadores mayores en medio de la pandemia; pero dice que no lo hace actualmente y que nunca ha entrenado a trabajadores electorales para impugnar votos.

En las cintas, algunos de los aspirantes a trabajadores electorales lamentaron que se cometiera fraude en 2020 y que las elecciones fueran «corruptas». Instalar a los leales al partido en la Junta de Escrutinio, que es responsable de certificar las elecciones, también parece ser parte de la estrategia del GOP. En el condado de Wayne, que incluye a Detroit, los republicanos nominaron para su junta a un hombre que dijo que no habría certificado la elección de 2020.

Tanto Penniman como Rick Hasen, profesor de derecho y ciencias políticas de la Facultad de Derecho de la Universidad de California en Irvine, dijeron que ven un efecto dominó que podría sembrar dudas sobre las elecciones incluso cuando no hubo ninguna infracción original: Un trabajador electoral motivado políticamente que se conecta con un celoso abogado local para perturbar la votación, seguido de una impugnación ante la Junta de Escrutinio que puede no tener nada que ver con la disputa subyacente, sino simplemente con el nivel de perturbación en el centro de votación.

«No debería haber trabajadores electorales que informen a las organizaciones políticas de lo que ven», dijo Hasen. «Se crea la posibilidad de ensuciar las cosas en los centros de votación y potencialmente conducir a retrasos o a la privación de derechos de los votantes», especialmente «si [los trabajadores electorales] vienen con la actitud de que algo está torcido con la forma en que se ejecutan las elecciones».

La estrategia del distrito electoral

Las grabaciones están entre las primeras ventanas a lo que el ex estratega de Trump, Stephen Bannon, que ha estado instando a los oyentes de su podcast a ocupar puestos de liderazgo electoral, llama «la estrategia del precinto.»

Pero Penniman, el vigilante electoral, cree que la estrategia está diseñada para crear suficientes disputas que justifiquen la intervención de las legislaturas estatales controladas por el Partido Republicano, que se negó a tomar tales medidas en 2020.

«Cuando llegue el día de las elecciones, crearás un fallo masivo de certificación» en los recintos demócratas, dijo Penniman. «La verdadera esperanza es que puedas lanzar la elección de los electores a las legislaturas estatales».

Los participantes en las sesiones de formación grabadas dijeron que su objetivo es erradicar el fraude, no sólo conseguir más trabajadores electorales republicanos en recintos electorales de mayoría demócrata.

Entre los panelistas de una cumbre de «Integridad Electoral» celebrada el 14 de mayo en Detroit se encontraba Jacky Eubanks, un candidato a la cámara estatal apoyado por Trump que advirtió que «los chicos de mi edad que son comunistas hacen y harán personal en nuestras elecciones» al instar a los republicanos a convertirse en «trabajadores electorales a tiempo completo y pagados» para vigilar las firmas de los votos en ausencia, según una grabación de la cumbre.

Hablando por separado a los republicanos del condado de Macomb, Eubanks también dijo recientemente: «El sistema electoral está amañado, y quién mejor para robarlo que nuestros secretarios».

Durante la cumbre de integridad electoral del 14 de mayo, Seifried dijo que el partido está ahora reclutando activamente abogados y que quería «empezar a llegar a las fuerzas del orden».

Patrick Colbeck, ex miembro del Senado del estado de Michigan y ex candidato a gobernador, dijo en la misma cumbre que está «trabajando con otra organización en este momento» en el «desarrollo de un kit para la aplicación de la ley» porque muchos no entienden la ley electoral y les dará «herramientas que identifican y aplican el fraude electoral con mayor eficacia.»

Eubanks no respondió a las solicitudes de comentarios. En un correo electrónico enviado a POLITICO, Colbeck dijo que debería haber «formación regular» para las fuerzas del orden sobre las leyes electorales.

Un enfoque en Michigan

Michigan es uno de los estados más disputados en los que se está preparando a los leales al partido para que actúen como inspectores en las próximas elecciones presidenciales. Seifried calcula que el RNC está destinando 35 millones de dólares a los esfuerzos de integridad electoral en todo el país, una cantidad similar a la que gastó en el último ciclo en los esfuerzos de los estados disputados. Es uno de los 16 directores estatales.

Durante décadas, al RNC se le prohibieron las llamadas medidas de «seguridad en las votaciones» después de que resolviera un caso a principios de la década de 1980 en el que se le acusó de supresión de votantes en violación de la Ley de Derechos Electorales, incluido el envío de agentes de policía armados fuera de servicio a los centros de votación en áreas minoritarias. En 2018, un juez federal permitió que ese decreto de consentimiento expirara.

«Las elecciones de 2020 habrían sido el primer año en que el RNC podría haber hecho algo con la integridad electoral», dijo Seifried en las grabaciones.

De todos los aliados del ex presidente Donald Trump en los estados disputados, los operativos republicanos en el estado de Michigan fueron los que más cerca estuvieron de arrojar las elecciones de 2020 -y la nación- a una crisis constitucional. Tantos voluntarios impugnadores desbordaron el TCF Center de Detroit, donde se estaban contando los votos, que la policía intervino porque se habían incumplido los protocolos de seguridad de Covid.

Los observadores electorales acusaron a los trabajadores de las urnas de «intimidarles» e impedirles el acceso a las mesas de votación debido a los requisitos de distanciamiento social de la pandemia. También alegaron falsamente que se introdujeron «papeletas falsas» en el centro, lo que contribuyó a sentar las bases de un retraso de semanas en la certificación de los votos electorales del estado. Eso a pesar de que el entonces candidato demócrata Joe Biden había ganado el estado por más de 154.000 votos.

En la reunión grabada con los activistas en marzo, Seifried dijo que «hubo mucha desorganización, mucha falta de preparación y he escuchado una historia de horror tras otra», refiriéndose a los observadores del GOP impedidos por la policía debido a las restricciones de Covid.

«Vamos a tener abogados que trabajen para construir relaciones con diferentes jueces para que cuando eso ocurra, que tengan relaciones con los jefes de policía en las diferentes áreas, para que cuando eso ocurra con relaciones preexistentes ya establecidas para que no puedan mentir», dijo Seifried durante una sesión de entrenamiento en octubre de 2021 en el condado de Oakland.

Un comité liderado por el Partido Republicano no encontró evidencia de fraude generalizado en las elecciones de Michigan de 2020 y recomendó que el fiscal general del estado investigue a aquellos que hicieron afirmaciones falsas «para recaudar dinero o publicidad para sus propios fines.» Numerosas demandas fueron desestimadas en los tribunales.

En las grabaciones, Seifried cita quejas específicas de 2020: que el Secretario de Estado enviara por correo papeletas de voto en ausencia «no solicitadas», que no todos los secretarios estuvieran obligados a cotejar las firmas de las solicitudes de voto en ausencia, que el número de puntos de entrega de papeletas aumentara drásticamente y que las zonas demócratas recibieran más financiación externa para aumentar el acceso al voto que las republicanas.

Cómo impugnar a un votante

En 2022 y 2024, en lugar de voluntarios sin formación, el objetivo es que los reclutas del GOP hayan recibido formación y estén equipados con nuevas herramientas, según Seifried.

Antes de compartir una diapositiva sobre «Cómo impugnar a un votante», Seifried esbozó una serie de escenarios en los que los reclutas podrían impugnar a los votantes o los procesos de votación, aunque advirtió que es ilegal impugnar cada voto.

«Tienes que tener una buena razón para creer que un individuo no es un ciudadano, que un individuo no tiene la edad legal para votar. Si un individuo no vive en el lugar en el que está registrado, o si la persona no está registrada en absoluto», dijo durante una reunión celebrada en marzo de 2022.

Esto también incluye si un votante recibió un voto por correo pero está votando en persona. También instó a los reclutas a acercarse a los secretarios electorales, lo que incluye asistir a reuniones de «precisión pública» para preguntarles sobre el funcionamiento de las máquinas de votación, registrar los números de las máquinas, solicitar copias de los resultados de los tabuladores antes y después de que comience la votación y desafiar a los secretarios a demostrar que sus máquinas no están conectadas a Internet.

Cuando se le preguntó sobre la estrategia, un portavoz del RNC dijo inicialmente que los reclutas no están siendo entrenados para cuestionar a los votantes. El RNC respondió más tarde citando una ley electoral de Michigan que establece que los trabajadores electorales «deberán» impugnar a un votante si el inspector «sabe o tiene buenas razones para sospechar» que el votante no es elegible y señaló que un juez revisaría el caso en última instancia.

En una reunión celebrada en octubre, Seifried dijo que los objetivos prioritarios son Detroit, Pontiac y Southfield, que son zonas fuertemente demócratas y de minorías. «Esas son en las que tenemos que centrar todos nuestros esfuerzos», dijo.

Los grupos de base alineados con Trump están ayudando en el reclutamiento. Entre ellos se encuentra «Stand Up Michigan», cuyos miembros adaptaron el éxito de los Village People «YMCA» a «MAGA», el lema de Trump «Make America Great Again». Si bien la ley estipula que los inspectores electorales deben ser entrenados por los secretarios locales, los candidatos también están siendo entrenados sobre las cosas a tener en cuenta por los operativos en los talleres patrocinados por el RNC.

Chris Thomas, que sirvió durante 36 años como director de elecciones bajo un secretario de estado demócrata y tres republicanos, dijo que ha pasado tiempo con Seifried, que parece estar tratando de ser «sobre la mesa» acerca de sus planes para crear una representación más equitativa entre los trabajadores electorales.

«Dice no ser del tipo ‘Stop the Steal’, pero obviamente toda la gente con la que habla lo es», dijo Thomas. «Van a estar engatusados pensando que van a ver todo tipo de cosas».

«Si Seifried es honesto con ellos», les dirá que no verán mucho, añadió Thomas. «Hay poco o ningún historial de inspectores electorales que desafíen a la gente» basándose en las calificaciones para votar, y si crean caos, «eso sólo hará que los echen [a los trabajadores electorales]».

El potencial de conflicto es evidente. En una formación impartida en marzo, Seifried dijo a los reclutas que se situaran detrás de las mesas de registro de votantes para «supervisar el libro de votación electrónico y asegurarse de que la persona que entra a votar es quien dice ser». Los votantes deben ser cuestionados alertando a los presidentes de los precintos y luego los reclutas deben llamar a la línea legal del RNC o registrar la queja en un sitio web con un chat en vivo para que «podamos comunicarnos con ustedes en tiempo real».

«Lo ideal es que todos ustedes sean los inspectores electorales», dijo Seifried. «Tienen mucha más autoridad porque son los que realmente administran las elecciones».

Mientras que Seifried subrayó que los impugnadores «no pueden obstruir la votación de ninguna manera» y que no deben ser «adversarios», Thomas dijo que es un error sugerir que un trabajador primerizo esté a cargo de un libro de votación y que dichos trabajadores no tienen «ningún derecho a exigir a los inspectores que revisen» los libros de votación.

La primera pregunta en el chat de Zoom: «¿Cómo detenemos los recuentos si la persona de la autoridad no respeta las impugnaciones realizadas como en el TCF de Detroit?» Otro preguntó qué hacer si alguien está «claramente» usando una identificación falsa para votar. Seifried dijo que «hay que intentar impugnarlo».

El esfuerzo ha estado en marcha durante meses, y los funcionarios del GOP están planeando utilizar las elecciones primarias del 2 de agosto en Detroit como un ensayo, según Seifried.

«Las primeras horas del día de las elecciones, el 2 de agosto, dirán si se trata de una operación legítima o de un intento de ralentizar el proceso para desanimar el voto», dijo Thomas.

Presionando al secretario de Detroit

El planteamiento se está llevando a cabo según lo previsto.

En una entrevista, Winfrey, la secretaria electoral de Detroit, confirmó que el RNC entregó una lista de más de 800 nombres a principios de mayo y que es probable que dé «un buen número» de los papeles a las personas siempre que asistan a las sesiones de formación y se confirme que son votantes registrados.

«Antes de cada elección siempre nos ponemos en contacto con los partidos demócrata y republicano para hacerles saber que estamos reclutando trabajadores electorales» y «conseguimos lo que conseguimos», es decir, mayoritariamente demócratas en una ciudad de mayoría demócrata.

La lista llega casi un año después de que Griffin, durante una reunión celebrada en junio de 2021, esbozara cómo los abogados del GOP podrían acorralar a Winfrey para que contratara a sus reclutas o estableciera la base de una demanda. «¿Cómo construimos las pruebas adecuadas y cómo construimos una trampa para Janice Winfrey?», dijo Griffin.

La presentación de una lista de personas «a las que no va a contratar» abriría «la puerta a una demanda de mandamus para que empiecen a cumplir la ley», o a sentar a más republicanos. Dos meses más tarde, en una reunión separada, Griffin reiteró que la estrategia es crear listas de trabajadores electorales republicanos que podrían ser rechazados y, por tanto, «crear las pruebas para futuros casos».

Al ser informada de las cintas, Winfrey dijo que «no está sorprendida» y que «no se siente intimidada de ninguna manera».

«Aparentemente piensan que soy estúpida», dijo. «Aparentemente piensan que no cumplo la ley. No me sorprende su ignorancia».

*Heidi Przybyla es periodista en Washington D.C.

FUENTE: POLÍTICO.

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