El presidente Joe Biden dio la bienvenida al primer ministro indio Narendra Modi en la Casa Blanca el miércoles, a quien recibió para una cena privada antes de una cena de estado mucho más grande programada para el jueves.
Los Biden y Modi estuvieron acompañados por el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, y el asesor de seguridad nacional de la India, Ajit Doval.
La cena del miércoles da el pistoletazo de salida a la visita de Modi a Washington, donde los dos líderes hablaron de profundizar los lazos de defensa y de la asociación en tecnología de sus países, así como de ampliar la cooperación en cuestiones globales clave, incluido el cambio climático, durante la visita de Estado de Modi a EE.UU.
La visita se produce en un momento en el que la administración Biden ha intensificado sus esfuerzos para reforzar su relación con India, que sigue ampliando su influencia mundial.
«No creemos que haya un socio más importante para ayudar en este sentido que la India», declaró el martes a la prensa John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional.
La guerra en Ucrania y la relación de la India con Rusia también se espera que estén en la agenda, dijo Kirby.
En los últimos años, la guerra de Rusia en Ucrania y el historial de la India en materia de derechos humanos han tensado las relaciones entre Nueva Delhi y Washington. India, que mantiene una postura neutral en la guerra entre Rusia y Ucrania, no ha criticado la invasión rusa y sigue comprando petróleo ruso, lo que ha ayudado a Moscú en medio de las sanciones occidentales.
Sin embargo, Estados Unidos busca alinear a la India en un objetivo clave, como contrarrestar la influencia de China en la región y en el mundo.
Las tropas chinas e indias han tenido varias escaramuzas a lo largo de su frontera en los últimos años. Veinte soldados indios murieron en junio de 2020 en un combate cuerpo a cuerpo con militares chinos, al que siguió otro enfrentamiento el pasado diciembre.
La Casa Blanca dijo que la visita de Modi también ayudaría a reforzar el compromiso de Estados Unidos e India con el Marco Económico Indo-Pacífico, que la Casa Blanca anunció el año pasado para contrarrestar el peso económico de China en la región.
Biden y Modi se reúnen en un momento en el que sigue aumentando la preocupación por el futuro de la democracia india y en el que, según los expertos, sigue reduciéndose el espacio para disentir de las políticas gubernamentales.
En una carta dirigida a Biden este mes, Elaine Pearson, directora para Asia de Human Rights Watch, afirmó que los problemas de derechos humanos en India están «poniendo en peligro» las relaciones entre Estados Unidos e India. «Le instamos encarecidamente a que aproveche sus reuniones con el primer ministro Modi para instarle a que haga avanzar a su Gobierno y a su partido en una dirección diferente», escribió Pearson.
Kirby no abordó directamente las preocupaciones en materia de derechos humanos en torno a la visita de Modi en su sesión informativa del martes. Afirmó que Biden aborda «habitualmente» las preocupaciones sobre derechos humanos con líderes extranjeros y describió los derechos humanos como un «elemento fundamental» de la política exterior de Biden.
«Los dos líderes pueden hablar por sí mismos cuando termine la reunión», dijo Kirby.
«Con esta visita oficial de Estado, reunimos a las democracias más antigua y más grande del mundo. Tras años de estrechar lazos, la asociación entre Estados Unidos e India es profunda y amplia, ya que abordamos conjuntamente los retos mundiales», declaró Jill Biden en unas declaraciones previas al acto. «Pero nuestra relación no se limita al gobierno. Estamos celebrando las familias y amistades que se extienden por todo el mundo, aquellos que sienten los lazos del hogar, en nuestros dos países.»
Este artículo fue publicado por NBC News.
FOTO DE PORTADA: Sean Kilpatrick.
