Una nueva ronda de conversaciones, que según se informa tendrá lugar en la capital de Azerbaiyán, Bakú, entre el ministro de Asuntos Exteriores de Siria, Asaad al-Shaibani, y el ministro de Asuntos Estratégicos de Israel, Ron Dermer, se produce en medio de avances significativos de las tropas israelíes en territorio sirio.
La cita en Bakú sigue a una reunión similar celebrada la semana pasada en París, así como a la reciente visita de al-Sheibani a Moscú, que fue calificada como histórica por su carácter inédito.
Medios israelíes señalaron que este tipo de contactos no son nuevos pues con anterioridad, se realizaron encuentros en Azerbaiyán entre Ahmad al-Sharaa, líder del derrocamiento de Assad, y funcionarios israelíes.
Por otra parte, el canal israelí Kan confirmó que «Tel Aviv» exigió que el sur de Siria “permanezca libre de fuerzas del nuevo régimen”.
La analista política Gili Cohen, citando a un funcionario israelí, precisó que el Estado sionista trasladó el mensaje de que la zona comprendida entre Sweida y Damasco debe ser desmilitarizada, sin presencia de fuerzas armadas.
Ocupación israelí en Siria
Según informes de Al-Akhbar, las fuerzas israelíes han llegado a Ras al-Nabaa, una ciudad al oeste de Qatana, situada a solo 20 kilómetros de Damasco. Esta es la segunda incursión de este tipo en menos de una semana.
Fuentes locales dijeron que la unidad, que incluía a altos oficiales israelíes como el portavoz del ejército Avichay Adraee, avanzó desde el Monte Hermón a través del corredor Qalaat Jandal-Aysam antes de entrar en el antiguo cuartel general de la ahora extinta 78ª Brigada de Siria .
Las imágenes que circulan en línea muestran a tropas israelíes cerca de Qatana con subtítulos en hebreo que declaran: “Nuestro destino: Damasco”, un mensaje que ha alarmado a los observadores y analistas sirios.
Muchos creen que Israel podría estar preparándose para establecer una base permanente en la región para lanzar futuras operaciones más profundamente en territorio sirio.
Qatana tiene importancia estratégica, ya que anteriormente albergó a las divisiones 10.ª y 7.ª de Siria , unidades de élite de la Guardia Republicana y el Ejército de Liberación de Palestina (ELP), el brazo militar de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP). El control de esta zona podría permitir a las fuerzas israelíes acceder a corredores clave hacia Yafour y Jdeidat Artuz, situándolas a una distancia de ataque de la capital siria.
En otros lugares, el despliegue de tropas israelíes se ha intensificado cerca de la línea de separación que conecta los Altos del Golán ocupados con territorio sirio, previamente asegurado tras la caída del gobierno del expresidente sirio Bashar al-Assad. Según informes, se han instalado nuevos sistemas de defensa aérea y guerra electrónica en Tal al-Faras, cerca de la frontera entre Deraa y Quneitra, lo que ha interrumpido las comunicaciones entre ambas provincias.
Se han establecido nuevos puestos de avanzada israelíes en Breqa, Beer Ajam y Qers al-Nafl, cerca de la ciudad de Hadar, de mayoría drusa. Los analistas sugieren que estas medidas indican un esfuerzo por consolidar el control y presionar a Damasco para que acepte una nueva arquitectura de seguridad en la región.
Mientras tanto, helicópteros israelíes han estado aterrizando en el antiguo cuartel general de la 15.ª División en Suwayda, ahora utilizado por facciones drusas antigubernamentales. Una fuente cercana a los Hombres de la Dignidad —una milicia drusa que opera principalmente en la gobernación de Suwayda— afirmó que los helicópteros están entregando armas y suministros médicos mientras las facciones locales buscan formar una fuerza unificada para proteger la provincia e imponer un alto el fuego a largo plazo.
A pesar de esta coordinación, la fuente afirmó que las facciones de clanes pro-Damasco siguen violando la tregua. El martes por la noche, según informes, intentaron avanzar hacia Al-Thaala, pero fueron repelidos con la ayuda de ataques con drones israelíes.
Mientras la escalada militar supera los esfuerzos diplomáticos, la frágil situación en el sur de Siria sigue en el filo de la navaja.
La influencia de Israel en el sur de Siria ha aumentado tras la masacre del mes pasado de cientos de civiles drusos en Suwayda. Los asesinatos fueron perpetrados por fuerzas leales al presidente sirio Ahmad al-Sharaa, incluyendo miembros del Ministerio de Defensa, Seguridad General y tribus beduinas armadas.
El ataque a Suwayda, que según se informa recibió luz verde de Estados Unidos e Israel, ha empujado a los drusos a refugiarse en Tel Aviv. Muchos drusos piden ahora a la comunidad internacional, incluido Israel, que intervenga para protegerlos de las fuerzas de la Sharaa.
Tel Aviv busca ocupar el sur de Siria, incluidos Deraa y Suwayda, para crear el llamado Corredor de David que conecte el territorio ocupado por Israel en los Altos del Golán con el territorio del noreste de Siria ocupado por fuerzas kurdas respaldadas por Estados Unidos.
