El Parlamento Europeo aprobó una resolución mediante la cual ha pedido una prohibición urgente de todas las ventas de armas a la coalición liderada por Arabia Saudí que está impulsando una guerra mortal en Yemen desde 2015.
La resolución, que fue aprobada el jueves por la mañana, también instó a todas las partes a poner fin a la guerra de Yemen que comenzó en 2015.
“La coalición saudí ha sido acusada de bombardear áreas altamente pobladas, incluidos hospitales, escuelas y otros objetivos civiles”, dijo el Parlamento Europeo en un comunicado publicado en su sitio web.
“Los eurodiputados piden a todas las partes en conflicto que pongan fin a las hostilidades de inmediato”, agrega la declaración. “Ellos condenan enérgicamente la violencia en curso y los ataques contra civiles y exigen que se lleven a cabo investigaciones independientes sobre los presuntos abusos contra los derechos humanos y violaciones del derecho humanitario”.
“La resolución respalda los esfuerzos de las Naciones Unidas, la Unión Europea y los estados miembros para ayudar a poner fin al conflicto y brindar apoyo a los afectados. Solo una solución política, inclusiva y negociada del conflicto puede restablecer la paz y preservar la unidad […] de Yemen”, agrega la declaración.
Mientras tanto, la eurodiputada Angela Vallina dijo que la resolución “estaba dirigida a ciertos países de la UE que aún no respetan esta medida: por ejemplo, el Reino Unido, Francia, Suecia o España”.
“Los ataques aéreos y armas letales contra civiles se han usado diariamente y ya han causado miles de muertes, así como el sufrimiento de millones más por la hambruna extrema”, concluyó Vallina.
EEUU y el Reino Unido respaldan a la alianza liderada por Arabia Saudí en su guerra en Yemen, que ha matado a más de 15,000 personas, brindándole diversos tipos de apoyo que incluyen coordenadas de bombardeos, ayuda logística y reabastecimiento de combustible en el aire.
Los mayores proveedores de armas a Riad son EEUU, con ventas por valor de 8.400 millones de dólares desde 2014, seguidos del Reino Unido (2.600 millones de dólares) y Francia (475 millones de dólares).