Ahora, mientras Modi inicia su tercer mandato, la política exterior del gobierno marcada por el llamado «Act East» (en español «actuar hacia el este») está lista para un nuevo impulso significativo.
Durante sus dos primeros mandatos, Modi impulsó el compromiso económico y estratégico de Nueva Delhi con el sudeste asiático, aunque con algunas deficiencias que ahora requieren corrección. Con un nuevo mandato, se espera que Modi pueda inyectar un renovado vigor a esta política exterior clave, buscando establecer una presencia más fuerte en el tan disputado escenario del Indo-Pacífico.
Impulso conómico y necesidad de reajustes
En el frente económico, los vínculos comerciales y de inversión con las naciones del sudeste asiático han visto un notable incremento en los últimos años reflejando la importancia que le da India a esta región.
El comercio bilateral aumentó de aproximadamente US$80.000 millones en 2014 a más de US$110.000 millones en 2021-22. Sin embargo, el acuerdo comercial existente entre India y la ASEAN ha sido criticado por favorecer en gran medida a los países de la ASEAN, lo que ha generado frustración en India y fue una de las principales críticas de la oposición para debilitar a Modi.
Las exportaciones de India al sudeste asiático crecieron moderadamente en el año fiscal 2023, de US$42.300 millones del año anterior a US$44.000 millones. Sin embargo, las importaciones de las naciones de la ASEAN aumentaron significativamente, de US$68.000 millones a US$87.600 millones, resultando en un déficit comercial sustancial de US$43.600 millones para India. Este desequilibrio es particularmente preocupante si se considera que el déficit comercial en 2011 era de solo US$5.000 millones.
El enfoque económico de India hacia las naciones de la ASEAN ha sido limitado por la reticencia a emprender reformas de mercado y a liberalizar los aranceles. Esta actitud ha provocado frustración entre varios Estados del sudeste asiático, dejando la dimensión económica de la política “Act East” rezagada respecto a los objetivos políticos.
Fortalecimiento Estratégico y Colaboración Marítima
En el frente estratégico, la política Act East de India ha facilitado la incorporación de siete miembros de la ASEAN al Marco Económico del Indo-Pacífico, una iniciativa destinada a fortalecer la cooperación económica entre estas regiones críticas. La Iniciativa de los Océanos Indo-Pacífico de India y la perspectiva de la ASEAN sobre el Indo-Pacífico presentan oportunidades para una amplia colaboración marítima.
La participación de India en estas estrategias complementarias del Indo-Pacífico permite una mayor coordinación de los intereses respectivos en esta región estratégicamente vital. Las iniciativas relacionadas con la conectividad, como el Proyecto de Transporte de Tránsito Multimodal de Kaladan, de US$484 millones, que conecta India con Myanmar, y la Autopista Trilateral India-Myanmar-Tailandia, son ejemplos de lo que la colaboración entre la ASEAN y la India puede lograr en esta área.
Ademas de la cooperación dada en este nivel es interesante observar y prestar atención a las continuas políticas del gobierno indio para lograr un posicionamiento estratégico como país dominantes en esta región pero que hasta el momento no ha logrado sus objetivos debido al modelo ASEAN de negociación en bloque.
Perspectivas Futuras y Reajuste de la Política.
El tercer mandato de Modi ofrece una oportunidad crucial para ajustar y fortalecer la política Act East de India. A medida que Nueva Delhi busca mejorar sus lazos económicos y estratégicos con el sudeste asiático y el Indo-Pacífico, la necesidad de abordar el desequilibrio comercial y de emprender reformas de mercado se vuelve cada vez más apremiante.
La recalibración de la política Act East de India bajo Modi podría no solo mejorar los lazos bilaterales y multilaterales, sino también posicionar a India como un actor clave en la dinámica geopolítica del Indo-Pacífico. Con una combinación de iniciativas económicas robustas y colaboración estratégica, India tiene el potencial de fortalecer su presencia y su influencia en esta región crucial, promoviendo un equilibrio de poder que favorezca sus intereses nacionales y regionales.
Objetivos en mente.
Nueva Delhi a través de este acercamiento busca posicionar el establecimiento de centros marítimos estratégicos o instalaciones logísticas en todo el sudeste asiático. Las negociaciones para adquirir bases en la bahía de Cam Ranh, en Vietnam, y en la isla de Sabang, en Indonesia, podrían dar sus frutos durante el tercer mandato de Modi.
Al mismo tiempo, se espera que India continúe desarrollando su poder blando en todo el sudeste asiático, a través de la ampliación de los intercambios culturales, los vínculos educativos y los programas de asistencia para el desarrollo, para de este modo reforzar su imagen como un contrapeso atractivo al poder duro de China.
Para los estados de menor importancia de la ASEAN, que equilibran cuidadosamente las esferas de influencia de India y China, el tercer mandato de Modi presenta tanto oportunidades como desafíos. Una India más integrada económicamente y comprometida estratégicamente puede actuar como un contrapeso al dominio chino. Colaborar de manera efectiva con India podría ayudar a estos estados a reducir su dependencia de Pekín, al tiempo que incrementan su propia influencia regional.
No obstante, estos países deberán manejar con destreza las posibles tensiones derivadas de la rivalidad geopolítica entre Nueva Delhi y Pekín. La centralidad de la ASEAN podría verse sometida a nuevas presiones si las tensiones entre Estados Unidos y China proyectan una sombra aún mayor sobre la región que se ha convertido en una suerte de limbo regional que trae sus ventajas en medio de la creciente inestabilidad. La realidad y el pulso actual indican que para aprovechar la mayor participación de India sin desestabilizar la región, los estados de la ASEAN necesitarán una habilidad política excepcional.
Medidas necesarias y estratégicas.
El gobierno de Narendra Modi, al iniciar su tercer mandato, tiene una visión clara de posicionar a India como una potencia mundial y mantener un rol preeminente en la región del Indo-Pacífico. La recalibración de la política «Act East» no es solo una respuesta a las demandas inmediatas de comercio y seguridad, sino parte de una estrategia geoestratégica más amplia para afirmar la influencia de India en una región de creciente importancia global.
India ha desarrollado su plan hacia el este debido a las barreras geopolíticas que enfrenta en otras regiones. Al norte, la presencia dominante de China limita la expansión de la influencia india. Hacia el oeste, Pakistán actúa como un estado de contención, bloqueando el acceso directo de India al Medio Oriente y Asia Central.
Estas circunstancias geográficas y políticas han obligado a India a apostar fuerte por el sudeste asiático, una región con la cual comparte lazos históricos y culturales, y que ofrece oportunidades significativas para la colaboración económica y estratégica.
Aun así la apuesta de India en el sudeste asiático no está exenta de desafíos. El bloque cohesivo de la ASEAN y la emergencia de potencias regionales como Indonesia imponen limitaciones a la expansión india. Aunque los vínculos comerciales han mejorado, con un notable incremento en el comercio bilateral, el desequilibrio comercial y la reticencia a liberalizar los aranceles han frenado un avance más robusto.
En el ámbito estratégico, la colaboración en iniciativas como el Marco Económico del Indo-Pacífico y la Iniciativa de los Océanos Indo-Pacífico muestra el compromiso de India por fortalecer sus lazos con la ASEAN. Los diversos proyectos de conectividad proyectados por la India a la vez aun no han podido competir en calidad e inversiones con el magno proyecto de la “Franja y la Ruta” dirigido por China, aunque el esfuerzo de Nueva Delhi son ejemplos tangibles de lo que puede lograrse mediante una colaboración efectiva.
Sin embargo, para que estas iniciativas sean verdaderamente exitosas, es necesario un esfuerzo concertado para superar las barreras comerciales, y políticas eficientes para fomentar un entorno de mayor apertura y cooperación.
A pesar de los desafíos geopolíticos y económicos, el compromiso de India con esta región es un testimonio de su determinación por expandir su influencia en medio de un mundo en constante transformación que vira hacia el multipolarismo. La clave para el éxito de esta política radica en la capacidad de India para adaptarse a las realidades del entorno regional y global en este aspecto es necesario observar con atención las próximas jugadas del gobierno de Modi y sus aproximaciones con el sudesteasiatico.
Tadeo Casteglione* Experto en Relaciones Internacionales y Experto en Análisis de Conflictos Internacionales, Diplomado en Geopolítica por la ESADE, Diplomado en Historia de Rusia y Geografía histórica rusa por la Universidad Estatal de Tomsk. Miembro del equipo de PIA Global
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