La alcaldía Cuauhtémoc es sede de dos poderes de la Unión y del Senado de la República. También del gobierno capitalino. Tiene algunos de los monumentos más emblemáticos de México y ahora tiene a una gobernante que simpatiza con ultraderechistas de la más pura ralea.
La alcaldesa Sandra Cuevas publicó recientemente un tuit agradeciendo a la familia Schlapp “su hospitalidad en la cena de bienvenida de la International Summit Against Human Trafficking 2023″. Anda (o hasta hace poco andaba) en Washington.
El tuit, que corresponde a imágenes del miércoles, inicia con Cuevas posando en un muro con logos de CPAC (Conferencia Política de Acción Conservadora), una organización internacional de ultraderecha que trabaja para construir una fuerza global.
La pregunta no es cómo llegó Sandra Cuevas a esa reunión en casa de Mercedes y Matt Schlapp.
La cuestión es si el PRD, partido que la postuló, está de acuerdo en que su abanderada departa con ultraderechistas que tienen como modelo a, además de Trump, el duro populista húngaro Viktor Orbán.
La cuestión es si el PAN, que también la postuló, aplaude que vaya a la casa de un firmante de la Carta de Madrid, sí, ese compromiso de agenda ultraconservadora promovido por Vox y signado por Matt Schlapp, anfitrión de Cuevas el miércoles.
La cuestión es si el PRI, que llegó a tener una agenda internacional digna de presumirse, comulga con la idea de que la política que apoyaron para llegar a la Cuauhtémoc se junte con personas que en la reunión de CPAC de Orlando (febrero 2022) dijeron al unísono que a Trump (y a Bolsonaro, por cierto) le robaron la Presidencia.
CPAC ha estado activa desde 1974 y el año pasado llevó a cabo una reunión en nuestro país, donde tuvo una participación Matt Schlapp, quien advirtió en contra del peligro que para Estados Unidos representa el comunismo de América Latina.
Si quieren una crónica del delirio de esa reunión de la derecha más recalcitrante, escuchen el estupendo pódcast de Galia García Palafox.
Más allá de eso, Mercedes Schlapp fue contratada en la Casa Blanca de Trump (antes estuvo en la de George W. Bush), y en ocasión de esa incorporación la prensa estadounidense recordó que otra de las cosas que la ha caracterizado son sus posicionamientos en contra de la agenda LGTB.
En un artículo calificó el apoyo de Obama al matrimonio gay como la peor de sus políticas.
Matt Schlapp es presidente de la American Conservative Union y en Fox News ha llamado a secundar la propuesta trumpista de construir un muro en la frontera entre México y Estados Unidos, incluso declaró que la política de separación de familias llevada a cabo por Trump era similar a la de Barack Obama, cosa que le desmintieron en un ejercicio periodístico de fact checking.
Trump no vino a CPAC México, pero envió un mensaje en el que agradecía a Matt y Mercedes Schlapp por la organización de ese evento. Y luego habló de desmantelar al socialismo.
Además, CPAC México, ligada a Eduardo Verástegui, retuitea noticias sobre acciones tendientes a limitar el derecho de las mujeres a decidir y sobre prohibición a atletas transgénero a participar en competencias.
En la alcaldía Cuauhtémoc vive mucha gente que apoya los derechos de mujeres y la agenda de la diversidad. Son gobernados por una persona que ahora se revela como afín al ultraconservadurismo mundial.
Los partidos de la alianza tienen mucho qué hablar con Sandra Cuevas ahora que regrese de la casa de los Schlapp. Creo.
*Salvador Camarena es periodista especializado en política mexicana.
Este artículo fue publicado por El Financiero.
FOTO DE PORTADA: Reproducción.