El 24 de Julio se conmemoraron los 240 años del natalicio de Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar Ponte y Palacios Blanco. Con PIA Global acercamos algunos de sus documentos, cartas y discursos más importantes y destacados que hicieron a la conformación de una identidad Nuestra Americana. Que permitió pensar a la política de nuestras tierras conforme a su identidad y distinción, enriqueciendo y no dividiendo el sin fin de identidades preexistentes a la colonización de nuestros territorios.
Así como refería Bolívar, “Seguramente la unión es la que nos falta para completar la obra de nuestra regeneración. Sin embargo, nuestra división no es extraña, porque tal es el distintivo de las guerras civiles formadas generalmente entre dos partidos: conservadores y reformadores. Los primeros son, por lo común, más numerosos, porque el imperio de la costumbre produce el efecto de la obediencia a las potestades establecidas; los últimos son siempre menos numerosos aunque más vehementes e ilustrados. De este modo la masa física se equilibra con la fuerza moral, y la contienda se prolonga siendo sus resultados muy inciertos. Por fortuna, entre nosotros, la masa ha seguido a la inteligencia»
Estos documentos políticos fundamentales de Simón Bolívar hoy en día siguen vigentes. Las reflexiones del libertador con respecto a nuestros pueblos, a la liberación y conformación de una unidad territorial e integral aún hoy es necesaria y urgente. Para seguir pensando en nuestra soberanía, para no caer una y otra vez en las manos dominantes de veredictos extranjeros que colonizan nuestras mentes, palabras y actos.
“La naturaleza hace a los hombres desiguales en genio, temperamento, fuerzas y caracteres. Las leyes corrigen esta diferencia, porque colocan al individuo en la sociedad para que la educación, la industria, las artes, los servicios, las virtudes, le den una igualdad ficticia (¿facticia?) propiamente llamada política y social”
Carta de Jamaica
La “carta de Jamaica”, escrita por Bolívar −Un Americano Meridional− en Kingston el 6 de septiembre de 1815. En ella, el libertador analiza el presente de la américa hispana a la luz del pasado, e indica las grandes líneas previsibles del porvenir
Manifiesto de Cartagena
Esta memoria, conocida también como “Manifiesto de Cartagena”, fue firmada por bolívar en cartagena de indias (colombia) el 15 de diciembre de 1812. Es su primer gran documento público, en el cual analiza las causas de la caída de la Primera República de Venezuela y propone medidas para restaurarla.
Discurso de Angostura
En la oración inaugural del congreso de angostura, reunido el 15 de febrero de 1819, el libertador hace explícita profesión de fe de sus ideas políticas democráticas y republicanas. Este documento, conocido como el “Discurso de angostura” por antonomasia, encierra una completa síntesis del ideario de bolívar
El Manifiesto de Carupano
En otro de sus grandes documentos públicos, el Manifiesto dado en Carúpano –puerto del oriente de Venezuela– el 7 de septiembre de 1814, bolívar analiza las causas que han conducido a la pérdida de la Segunda República de Venezuela
La última carta de Bolívar para sus compatriotas:
En la hacienda de San Pedro alejandrino –propiedad del hidalgo Joaquín de Mier cercana a Santa Marta– el libertador redacta su última proclama. este documento, firmado el 10 de diciembre de 1830, una semana antes de su muerte, representa el legado de bolívar para sus compatriotas de colombia la Grande –venezolanos, colombianos, ecuatorianos, panameños– y para los pueblos todos de américa
Simon Bolivar
Libertador de colombia y del Perú, etc., etc., etc. A los pueblos de Colombia.
Colombianos:
Habeis presenciado mis esfuerzos para plantear la libertad donde reinaba antes la tiranía. He trabajado con desinterés, abandonando mi fortuna y aun mi tranquilidad. Me separé del mando cuando me persuadí que desconfiabais de mi desprendimiento. Mis enemigos abusaron de vuestra credulidad y hollaron lo que me es más sagrado, mi reputación y mi amor a la libertad. He sido víctima de mis perseguidores que me han conducido a las puertas del sepulcro. Yo los perdono.
Al desaparecer de en medio de vosotros, mi cariño me dice que debo hacer la manifestación de mis últimos deseos. No aspiro a otra gloria que a la consolidación de Colombia. Todos debéis trabajar por el bien inestimable de la unión: los pueblos obedeciendo al actual gobierno para libertarse de la anarquía; los ministros del santuario dirigiendo sus oraciones al cielo; y los militares empleando su espada en defender las garantías sociales. ¡Colombianos! Mis últimos votos son por la felicidad de la patria. Si mi muerte contribuye para que cesen los partidos y se consolide la unión, yo bajaré tranquilo al sepulcro.
Hacienda de San Pedro, en Santa Marta, a 10 de diciembre de 1830, Simón Bolívar