Una delegación africana, encabezada por el presidente sudafricano Cyril Ramaposha, y representantes de Senegal, Egipto, Zambia, Uganda, República del Congo y Comoras se reunieron en un palacio cercano a San Petersburgo, subrayando de esta manera el compromiso del continente con la paz. La comitiva visitó Ucrania y Rusia y se reunió con ambos líderes. Con el claro objetivo de poner fin a la guerra presentaron una propuesta de 10 puntos y ofrecieron su mediación en el conflicto. El resultado de las reuniones tuvo disimiles análisis, las posturas de ambos presidentes de cara establecer diálogos de paz parecen estar estancadas en fracasos anteriores, aun así la delegación africana fue contundente con su pronóstico: el dialogo es el camino para la paz.
Durante la reunión con la delegación de países africanos la semana pasada, el presidente ruso Vladimir Putin, presentó el borrador de un acuerdo que fue «firmado preliminarmente» con Ucrania el año pasado y alegó que Ucrania se retiró de él en el último momento sin ninguna explicación. Este borrador tuvo el auspicio del gobierno turco y quedó trunco a partir de la decisión de la OTAN de aumentar el apoyo militar a Ucrania.
Putin culpó a los países occidentales por la escasez de alimentos y fertilizantes en África y otros países en desarrollo. Las sanciones impuestas a Rusia empeoraron una situación por demás compleja de aquellos países que dependen del flujo en el mercado de cereales ruso para sus economías. Putin acusó a Occidente de utilizar la guerra en Ucrania como excusa para ocultar sus propias políticas económicas “injustificadas”.
África, la llave de la paz
Los delegados africanos se reunieron con el presidente ruso un día después de una breve reunión con el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky en Kiev el viernes 16 de junio.
El líder sudafricano Cyril Ramaphosa, que tiene una estrecha relación con Putin, planteó que África estaba lista para convertirse en mediadora en la búsqueda de la paz. Esto lo expuso al presentar los 10 puntos de la propuesta de paz africana para poner fin a la guerra, que incluyeron la reanudación inmediata de las conversaciones, las medidas de fomento de la confianza de ambas partes, el reconocimiento de la integridad territorial y la soberanía de Rusia y Ucrania, y las exportaciones ininterrumpidas de cereales y fertilizantes.
En este mismo sentido es que el Ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, comparó la propuesta de paz africana con la propuesta china de 12 puntos y afirmó que los líderes africanos después de reunirse con Putin mostraron una mayor comprensión de las verdaderas causas del conflicto que tienen sus raíces en algunos países que adoptan dobles raseros, por un lado piden paz y por otro lado siguen armando y fogoneando la guerra desde los medios concentrados de información, además de imponer sanciones unilaterales y amenazar la seguridad de los demás.
Durante su reunión con la delegación africana en San Petersburgo, Putin habría dicho que Rusia nunca había negado las conversaciones con Ucrania. Sin embargo, afirmó que Ucrania no solo se ha negado a negociar con los rusos, sino que también se retiró de las conversaciones el año pasado cuando se firmó preliminarmente un acuerdo de paz en Estambul sin ninguna explicación. Además Putin reiteró su postura de que Ucrania y sus aliados occidentales habían iniciado el conflicto mucho antes de que Rusia enviara sus fuerzas armadas a la frontera en febrero del año pasado. El presidente ruso afirmó durante esta reunión que Occidente, y no Rusia, era responsable de la fuerte alza de los precios mundiales de los alimentos a principios del año pasado, que ha afectado especialmente a África.
Agregó, además, que las exportaciones de grano ucraniano desde los puertos del Mar Negro, permitidas por Rusia durante el año pasado, no contribuían en absoluto a aliviar las dificultades de África con los altos precios de los alimentos, ya que se destinaban en su mayor parte a los países ricos. Putin afirmó que Rusia nunca se había negado a mantener conversaciones con la parte ucraniana. Sin embargo, Moscú ha afirmado en repetidas ocasiones que cualquier paz debe tener en cuenta las «nuevas realidades», es decir, su anexión declarada de cinco provincias ucranianas, cuatro de las cuales sólo controla parcialmente, una línea roja para Kiev.
Putin presentó el borrador del acuerdo firmado con anterioridad y que reiteró como incumplido por la parte ucraniana a los líderes africanos, que supuestamente tenía cláusulas detalladas acordadas mutuamente por los rusos y los ucranianos en Estambul. Según el acuerdo, Ucrania aceptó la demanda de neutralidad y garantizó la seguridad rusa. “También se refiere a las fuerzas armadas y otras cosas. Todo estaba escrito en números de vehículos y personal”, dijo Putin.
Putin negó que Rusia hubiera violado las fronteras internacionales y acusó a Ucrania y sus aliados de iniciar la guerra en 2014.
El hambre en África, responsabilidad occidental
Putin aseveró que los precios mundiales de los alimentos han subido debido a las sanciones y restricciones impuestas por Occidente a la exportación de granos y fertilizantes rusos, lo que más ha afectado a los países africanos. Afirmó que a pesar del acuerdo de granos mediado por la ONU, las naciones africanas continúan sufriendo porque la mayoría de las exportaciones permitidas se han canalizado a países europeos avanzados en lugar de ir a África.
Citando el impacto del aumento de los precios de los productos básicos en los países más pobres, la ONU y Turquía habían mediado en un acuerdo de cereales entre Ucrania y Rusia en julio del año pasado. Según el acuerdo, Rusia permitiría la exportación de granos alimenticios de Ucrania a cambio de que EE.UU y la UE relajen sus sanciones unilaterales sobre las exportaciones agrícolas de Rusia.
Putin señaló que alrededor de 31,7 millones de toneladas de productos agrícolas ya se han exportado desde los puertos ucranianos bajo la iniciativa de granos, pero solo el 3,1% de este volumen se destinó a países en desarrollo, afirmando desde aquí que los africanos son y serán de los primeros perjudicados ante este estado de situación si no se llegara a un acuerdo sobre las agroexportaciones. Putin afirmó que el aumento del hambre en África fue el resultado de políticas “económicamente injustificadas” adoptadas por los países occidentales para resolver sus problemas que surgieron desde la pandemia de COVID-19.
Según el Banco Africano de Desarrollo, la guerra en Ucrania ha sido responsable de una escasez de alrededor de 30 millones de toneladas de cereales alimentarios en el continente y de un aumento de aproximadamente un 300 % en los precios de los fertilizantes, lo que dificulta cada vez más a los agricultores del continente los medios para cultivar granos alimenticios esenciales en el hogar.
Zelensky cerrado al diálogo, recrudece la cotraofensiva
Los líderes africanos pretendían llegar a un acuerdo sobre una serie de «medidas de fomento de la confianza», mientras Kiev iniciaba la semana pasada una contraofensiva para expulsar a las fuerzas de ocupación rusas de las zonas del sur y el este de Ucrania.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, declaró tras reunirse con la “comitiva de paz africana” en Kiev, que las conversaciones de paz exigirían que Moscú retirara sus fuerzas del territorio ucraniano ocupado, algo que Rusia ha dicho que no es negociable.
Durante la visita de la comisión de líderes africanos a Kiev, las fuerzas militares ucranianas desplegaron sendos ataques sobre posiciones rusas, en un claro mensaje: la paz será, pero bajo los términos que imponga Ucrania, leáse OTAN. Las tropas ucranianas registraron éxitos en tres tramos del frente en el sur y este del país, según Andriy Kovalev, portavoz del Estado Mayor de las fuerzas armadas de Ucrania, en un comunicado el viernes en medio de “las conversaciones por la paz”.
Según Kovalev, las fuerzas ucranianas avanzaron al sur de la ciudad de Orikhiv en la provincia de Zaporiyia, en dirección al pueblo de Robotyne, así como en las áreas de Levadne y Staromaiorske, en la frontera entre Zaporiyia y la provincia de Donetsk al este.
Es evidente que los esfuerzos para poner fin a la guerra hoy no están en manos más que las de rusos y ucranianos, los diálogos por la paz serán infructuosos, engan del lado que vengan, sino hay un verdadero espíritu de poner fin al conflicto. Rusos, ucranianos y los “varones” de la guerra de Occidente deberán aunar criterios para lograr un verdadero acuerdo de paz que respete los reclamos de las partes.
Si debemos saber que mientras esto no ocurra, los daños “colaterales” de la guerra se sienten muy lejos de las fronteras del este europeo. Sin granos o fertilizantes, el hambre arrecia en África.
*Beto Cremonte es docente, profesor de Comunicación Social y Periodismo, egresado de la UNLP, Licenciado en Comunicación Social, UNLP, estudiante avanzado en la Tecnicatura superior universitaria de Comunicación pública y política, FPyCS UNLP.
Foto de portada: reunión de líderes africanos con Vladimir Putin en San Petersburgo