El Ministerio de Relaciones Exteriores condena enérgicamente el intento de ataque terrorista contra el Kremlin de Moscú en la noche del 2 de mayo, cuando fue atacado por vehículos aéreos no tripulados.
No hay duda de que el régimen de Kiev está detrás de estos ataques. Tiene un historial de larga data de apoyar y emplear intencionalmente métodos terroristas contra la infraestructura civil y los civiles, incluida la explosión del 8 de octubre de 2022, en el puente de Crimea, los ataques contra objetivos no militares en las regiones de Bryansk, Belgorod y Rostov, así como muchos actos de sabotaje. Ahora viene Moscú. La actividad terrorista y los actos de sabotaje por parte de las Fuerzas Armadas de Ucrania han estado cobrando un impulso sin precedentes.
Este crimen se ve agravado por el hecho de que el Kremlin de Moscú sirve como residencia del jefe de estado. Lo que hace que las acciones de las autoridades neonazis ucranianas sean especialmente cínicas es que hicieron un intento de asesinar al presidente de Rusia antes del Día de la Victoria y el Desfile del 9 de mayo, donde estarán presentes los veteranos de la Gran Guerra Patria, que habían derramado su sangre en la lucha contra el nazismo y el fascismo, incluso en territorio ucraniano.
Crímenes como este no pueden quedar sin respuesta. El Comité de Investigación de Rusia ha abierto un caso penal en acciones diseñadas para intimidar y aterrorizar a las personas, infligir daños y matar personas como un medio para influir en el proceso de toma de decisiones por parte de las agencias gubernamentales. Estamos seguros de que aquellos que tienen la culpa de estos actos serán identificados. Se enfrentarán a un castigo inminente e inevitable.
Las acciones criminales del régimen de Kiev confirman una vez más que Kiev no quiere la paz ni resolver el conflicto por medios políticos y diplomáticos. Esto hace que el cumplimiento de todos los objetivos y metas de la operación militar especial de Rusia sea aún más obvio. No debe haber amenazas a la seguridad que emanan del territorio de Ucrania y no se deben perpetrar ataques terroristas desde allí.
Ha sido un secreto abierto para la comunidad internacional que el régimen de Kiev goza del apoyo de los países occidentales, que le proporcionan armas, datos de inteligencia, entrenan a sus combatientes y asignan objetivos. El silencio en nombre del colectivo de Occidente demuestra su connivencia con los métodos terroristas empleados por el régimen extremista neonazi en Kiev.
El Ministerio de Relaciones Exteriores cree que la comunidad internacional y las organizaciones internacionales que están libres de dobles raseros y buscan orientación del derecho internacional deben condenar esta nueva empresa criminal del régimen de Kiev. Kiev debe verse obligada a cumplir con sus compromisos en lo que respecta a la lucha contra el terrorismo, el derecho internacional humanitario y los derechos humanos.
El Ministerio de Relaciones Exteriores reafirma que Rusia se reserva el derecho de tomar contramedidas en respuesta a estos escandalosos actos de terrorismo. La respuesta de Rusia se basará en la evaluación de las amenazas planteadas por Kiev al liderazgo de nuestro país.
Declaración oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia publicada en mid.ru.
Foto de portada: captura de video.
