Este martes 28 de marzo el Consejo de Seguridad rechazó la resolución, presentada por el representante de la Federación de Rusia, para establecer una comisión de investigación internacional independiente sobre los «actos de sabotaje» cometidos en septiembre de 2022 en el gasoducto Nord Stream, en el mar Báltico.
El Consejo rechazó el proyecto de resolución por falta de votos suficientes a favor. En la votación hubo tres positivos correspondientes a Brasil, China y la Federación Rusa y 12 abstenciones. Para aprobar la medida era necesario un piso de 8 votos favorables.
De haberse aprobado, la resolución habría pedido al Secretario General que estableciera una comisión internacional e independiente para llevar a cabo una investigación internacional exhaustiva, transparente e imparcial de todos los aspectos del acto de sabotaje de los gasoductos Nord Stream 1 y 2, incluida la identificación de sus autores, patrocinadores, organizadores y cómplices.
La misma estaría formada por «expertos imparciales e internacionalmente respetados» seleccionados por el Secretario General, y que contaría con un número adecuado de personal experimentado e imparcial.
Según establece el reglamento, el Consejo habría pedido al Secretario General que le informara en un plazo de 30 días sobre las recomendaciones relativas a las modalidades específicas propuestas para la comisión, y alentó a los Estados miembros -incluidos los que llevan a cabo sus propias investigaciones nacionales pertinentes- a cooperar plenamente y compartir información con la comisión.
Antes de la votación, el representante de la Federación Rusa dijo que su delegación proponía el establecimiento de una investigación independiente liderada por Naciones Unidas sobre los ataques al gasoducto Nord Stream debido a sus «serias y muy bien fundadas dudas» sobre la transparencia de las investigaciones nacionales que se están llevando a cabo actualmente, en concreto por Dinamarca, Alemania y Suecia.
«Es necesaria una investigación más exhaustiva y transparente», subrayó, «especialmente ante la aparición de nuevos hechos e informaciones en los medios de comunicación sobre los incidentes del Nord Stream». También advirtió de que «se está perdiendo un tiempo precioso» y de que las investigaciones nacionales podrían prolongarse durante años.
El representante de China, lamentando el fracaso del proyecto de resolución, afirmó que una investigación internacional no entraría en conflicto con las nacionales actualmente en curso. «Una investigación dirigida por las Naciones Unidas podría desempeñar un papel de coordinación y dar más autoridad a las conclusiones de otros estudios. Lanzar una investigación dirigida por Naciones Unidas es también la mejor manera de responder a la amplia especulación internacional», dijo, añadiendo que bloquear al Consejo para que no lance tal investigación sólo levanta sospechas de que «algo se oculta entre bastidores».
El representante de Brasil subrayó que cualquier propuesta de un miembro del Consejo debe considerarse de forma respetuosa y objetiva. Tras señalar que la información preliminar de las autoridades europeas indica que los incidentes del Nord Stream fueron un acto de sabotaje con la posible implicación de un agente estatal, citó la importancia de que las Naciones Unidas realicen esfuerzos más exhaustivos para comprender el ataque. Animó a los responsables de las investigaciones nacionales en curso a compartir sus conclusiones con el Consejo lo antes posible.
El representante de Estados Unidos, rechazando las acusaciones infundadas sobre el papel de su país en el acto de sabotaje del gasoducto Nord Stream, dijo que la comunidad internacional no puede tolerar daños a infraestructuras críticas. Para el representante estadounidense, el texto presentado por la Federación Rusa no era un intento de buscar la verdad, sino más bien de «desacreditar el trabajo de las investigaciones nacionales en curso que podrían no llegar a conclusiones que se alineen con su narrativa predeterminada».
La delegada de Suiza, tras señalar la abstención de su delegación, se hizo eco de las expresiones de preocupación por los sucesos en los gasoductos Nord Stream y condenó este tipo de ataques contra infraestructuras críticas. «Dinamarca, Alemania y Suecia están llevando a cabo investigaciones nacionales para esclarecer los hechos», dijo, y pidió al Consejo que esperara a conocer sus resultados. «Pedir una investigación adicional no sería beneficioso en este momento», añadió.
El representante de Gabón, señalando que África ha acogido muchas investigaciones internacionales y de expertos independientes a lo largo de los años con implicaciones para la soberanía de los Estados, dijo que su delegación se abstuvo porque los argumentos sobre las investigaciones nacionales han sido ignorados habitualmente en su continente. «Ya nadie aceptará estas lecciones de moral», subrayó, declarando que hoy es «un buen día para la soberanía de los Estados individuales, pero un mal día para la transparencia y la independencia».
También intervinieron los representantes de Ghana, Ecuador, Malta, Japón, Reino Unido, Francia, Albania y Emiratos Árabes Unidos.
FOTO DE PORTADA: ONU.