El Dr. C. Leonid Savin, es director de la Fundación Fidel Castro para el desarrollo de las relaciones Ruso-Cubanas; investigador científico asociado del RUDN Universidad; autor de numerosos libros sobre el tema de los conflictos, la geopolítica y las relaciones internacionales.
Resumen
El ciberespacio en su sentido más amplio es visto hoy como un escenario principalísimo de la actividad política internacional, de ahí que para el mismo se hallan desarrollado varias doctrinas de carácter ideológico que lo asumen como una nueva zona para la expansión hegemónica, no en vano determinados poderes están tratando de asegurarse ventajas en el mismo para su uso exclusivo.
Eso es lo que explica el marcado interés no solo por la actividad comercial en el nuevo espacio, sino también, por los intentos de varias compañías tecnológicas para establecerse allí de manera monopólica y también se aprecia en la dimensión tecnológico-militar de las actividades del cíbercomando de las fuerzas armadas de los EE.UU., que de cierta manera, ha encontrado acompañamiento desde la OTAN, donde los miembros de esta alianza desempeñan un papel especial en el desarrollo y la imple-mentación de tales proyectos.
Su enfoque coordinado y sus intenciones agresivas contra otros Estados, en primer lugar, contra Rusia, son también hoy muy evidentes. Los diferentes centros de la OTAN están atrayendo a sus laboratorios a científicos que se ocupan del estudio de las ciencias cognitivas, la cibernética, la inteligencia artificial, la biotecnología, etc., con el fin de asegurarse una clara ventaja estratégica en el futuro.
Sobre esta base, se puede suponer que el objetivo de la OTAN y de los países que encabezan esta alianza es conseguir el dominio del ciberespacio, incluida la posibilidad de influir en los ciudadanos de otros países a través de diversos formatos de interacción activa en el mismo mediante la aplicación de procedimientos como la manipulación en línea, la publicidad contextual, la recopilación de datos personales para crear un retrato psicológico para su posterior influencia, la vigilancia electrónica, la difusión de información falsa, etcetera.
Los considerables recursos que se invierten en el funcionamiento de estos centros y en la ejecución de diversos programas, como IDEaS y la aplicación de métodos de comunicación estratégica, indican una toma de decisiones centrada en estas cuestiones clave. El concepto de guerra híbrida también se refiere a actividades maliciosas en el ciberespacio.
Los casos mencionados en esta publicación muestran que muchos desarrollos occidentales en esta área se utilizan activamente para la guerra “por otros medios” contra Rusia. De ahí que ante esto, Rusia se ha visto obligada a responder, lo que ha hecho mediante el desarrollo de sus proyectos de ley, doc-trinas y la introducción de nuevas tecnologías para garantizar su defensa y seguridad.
Dado que no existe una legislación internacional para regular el ciberespacio (con la excepción de los conceptos generales y una serie de resoluciones basadas en la ONU), existe el riesgo de que el conflicto se intensifique en esta área. Aunque Rusia había propuesto anteriormente desarrollar y firmar un documento regulatorio, los magros avances en las actividades del grupo de trabajo en la ONU muestran que Estados Unidos está frenando deliberadamente este trabajo pues no le conviene que haya or-den en este escenario y apuestan por el caos con la idea de manejarlo a conveniencia.
Palabras clave: Ciberespacio, OTAN, Guerra, EE.UU., tecnologías.
Savin, L. (2022). Cibergeopolítica y la guerra cognitiva: Cybergeopolitics and the Cognitiva Warfare. Cuadernos De Nuestra América, (03). Recuperado a partir de https://cna.cipi.cu/cna/article/view/75