La información aún es confusa, pero a primera hora de la tarde (hora local), los tiroteos alertaron a la población de la capital. Una operación militar para hacerse con el control del Palacio Presidencial parecía comenzar, los estruendos de la balacera podían confirmar esos hechos. Algunas informaciones aseguraban que los amotinados habían logrado penetrar en el edificio y capturar al presidente Umaro Sissoco Embaló, a su primer ministro, Nuno Gomes Nabiam, y a titulares de varias carteras.
En plena reunión extraordinaria del gabinete ministerial guineano comenzaron fuertes enfrentamientos entre fuerzas leales al gobierno de Guinea- Bissau y un grupo de militares disidentes en los alrededores del Palacio Presidencial, donde se estaba realizando la mencionada reunión del Consejo de Ministros. El presidente Umaro Sissoco Embaló, había empezado a presidir la reunión alrededor de las 10 a.m., hora local, cuando horas después fuertes disparos cerca del Palacio de Gobierno interrumpieron la sesión. El presidente y el primer ministro estaban presentes en el Consejo de ministros extraordinario, que se organizó con el fin de preparar la cumbre de la CEDEAO en respuesta al golpe militar de la semana pasada en Burkina Faso.
De llegarse a confirmar que el tiroteo respondió a un intento de derrocar al Gobierno, este se sumaría a una lista de nueve golpes o intentos de golpe de Estado que ha vivido el país desde su independencia de Portugal en 1974.
La CEDEAO y la ONU condenan el “intento” de golpe de Estado
Por ahora, no se conoce el origen ni la causa exacta del tiroteo, pero la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) condenó el hecho. «CEDEAO condena este intento de golpe y responsabiliza a los militares por la integridad física del presidente Umaro Sissoco Embaló y miembros de su Gobierno», dijo la organización subregional en un comunicado publicado en sus redes sociales.
De confirmarse, este sería el segundo golpe en África occidental en poco más de una semana. El presidente de Burkina Faso, Roch Kabore, fue derrocado por los militares el 23 de enero. Oficiales del ejército también tomaron el poder en Guinea y Malí el año pasado.
Embalo fue declarado ganador de las elecciones de 2020, pero los resultados han sido impugnados por su oponente, Domingos Simoes Pereira. Embalo comenzó a formar un nuevo gobierno con el apoyo de las fuerzas armadas, incluso mientras la Corte Suprema impugnaba las elecciones.
Las Naciones Unidas, a través del secretario general, Antonio Guterres, también salieron a condenar el hecho, expresando que el organismo mundial no conoce los detalles de los hechos en Guinea-Bissau, pero, en la voz de Guterres, «los golpes de Estado son totalmente inaceptables». El secretario de la ONU agregó, «Estamos viendo una terrible multiplicación de golpes, y nuestro fuerte llamamiento es que los soldados regresen a los cuarteles y que el orden constitucional esté plenamente en su lugar en el contexto democrático de Guinea-Bissau de hoy».
La calma ha vuelto a Guinea-Bissau
El Gobierno aseguró que la situación está bajo control, mediante un comunicado emitido en la cuenta oficial del presidente Embaló en Facebook. Un mensaje similar en una cuenta de Twitter no oficial a nombre del mandatario indicó que este se encuentra bien. Estas publicaciones en las redes sociales de cuentas vinculadas al presidente de Guinea-Bissau, Umaro Sissoco Embalo, dijeron que la situación en el país de África occidental estaba bajo el control del gobierno y que la calma había regresado a la capital, Bissau.
«¡La calma vuelve a Bissau!» dijo una publicación en la cuenta oficial de Facebook de Embalo. Incluía fotos sin fecha de Embalo sentado en un sillón, conversando con militares uniformados.
Una publicación de Twitter de una cuenta no verificada a su nombre decía que estaba bien. «La situación está bajo el control del gobierno. Agradezco a la población de Guinea-Bissau y a todos los que se han preocupado más allá de nuestras fronteras por mi gobierno y por mí». La cuenta no tiene la marca azul que indica que Twitter ha verificado su autenticidad, pero sí mostraba una gran cantidad de publicaciones anteriores aparentemente de Embalo, informando sobre asuntos gubernamentales de rutina.
El ministro de Relaciones Exteriores de Portugal, Augusto Santos Silva, dijo anteriormente que había recibido información «positiva» de que Embalo estaba en su residencia, aunque no sabía si el ataque al gobierno de Guinea-Bissau había terminado.
El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, dijo en su sitio web oficial que había hablado con Embalo por teléfono y había «transmitido su vehemente condenación… de estos ataques contra el orden constitucional de Guinea-Bissau».
Antes de esos acontecimientos, la Unión Africana en medio de la confusión reinante y la falta de información certera había dicho que algunos miembros del gobierno estaban detenidos y había pedido al ejército que los liberara, sin dar detalles.
*Beto Cremonte es periodista, Comunicador Social y docente en la Facultad de Comunicación Social de La Plata (U.N.L.P), estudiante avanzado de la Tecnicatura Universitaria en Comunicación Pública y Política de la Universidad Nacional de La Plata (U.N.L.P)